Con el objetivo de generar las condiciones necesarias para que la energía contribuya al bienestar y a la vida digna de las personas mediante el desarrollo de una matriz energética limpia, segura y resiliente, el Ministerio de Energía logró la aprobación unánime de su partida del Presupuesto 2023 en la Quinta Subcomisión Mixta. 

Esta instancia está conformada por los senadores Daniel Núñez (PC) y David Sandoval (UDI), junto a los diputados Carlos Bianchi (IND), Frank Sauerbaum (RN) y Alexis Sepúlveda (PRSD), quien oficia como presidente, según informó el Ministerio chileno. 

El ministro de Energía, Diego Pardow, destacó el avance de la tramitación de este proyecto en el parlamento.

“Conseguimos aprobar la última de nuestras partidas presupuestarias relacionadas con transición energética justa y fomento a la industria del hidrógeno verde. Agradecemos a los senadores y diputados que participaron en esta comisión. Tuvimos un debate constructivo y conseguimos que fuera aprobada por unanimidad”, añadió. 

Por su parte el subsecretario de la cartera, Julio Maturana, se mostró satisfecho por la unanimidad obtenida por la partida presupuestaria y espera que siga avanzando en el plano legislativo.

“Con esto se completa toda la partida presupuestaria aprobada en la subcomisión, ahora va a comenzar el siguiente proceso legislativo donde vamos a apoyar las siguientes etapas de la discusión de presupuesto”, puntualizó.  

El proyecto de Ley de Presupuestos del próximo año, el primero del Gobierno del Presidente Gabriel Boric, contempla recursos por un total de US$ 81.581 millones, lo que se traduce en un crecimiento de un 4,2% respecto al 2022, y busca resolver las necesidades de la ciudadanía en temas que son relevantes para su vida diaria: Seguridad económica, seguridad ciudadana y seguridad social. 

En el caso del erario del Ministerio de Energía, este contempla 4 líneas de acción a desarrollar durante el próximo periodo. La primera está relacionada con el impulso a la industria del Hidrógeno Verde.

Asimismo, el plan contempla el ítem de Transición Energética Justa, que considera los proyectos territoriales enfocados en la descarbonización de la matriz energética y que consideran la participación ciudadana, un servicio energético limpio, de calidad y justo, el desarrollo local y la reparación socioambiental. 

La partida, además, considera la línea de acción de Estrategias Territoriales, impulsando una normativa ambiental y territorial que permita promover la inserción adecuada y planificada de la infraestructura energética en las regiones. Por último, contempla desarrollo de Capital Humano orientado a género y derechos humanos.