ANAHÍ ABELEDO

Dos causas principales ocasionaron la caída de los precios del petróleo de los últimos días: el aumento de los casos de Covid en China  -con la expectativa que esto genera otra vez en los mercados globales- y el crecimiento de las reservas de crudo de EE. UU.. El movimiento fue mucho y no siempre en el mismo sentido ni en el más esperado. Mientras hubo una descompresión en la oferta al permitirse operar a una terminal rusa sobre el Mar Negro para exportar oil ruso, a Joe Biden no le habría ido tan bien en su gestión para que Arabia Saudita pueda suplir ese petróleo sancionado. La OPEP bombea menos de lo esperado y la demanda global cae por debajo de las previsiones.

La Agencia Internacional de la Energía ha advertido que, a pesar de que la actual crisis energética es potencialmente la peor de la historia, todavía está lejos de terminar. La atención internacional se ha desplazado de los mercados del petróleo, en los que los precios han vuelto a caer por debajo de los 100 dólares, al gas natural, donde se perfila una tormenta perfecta antes de la temporada de invierno 2022/2023. 

Si bien el jefe de la AIE, Fatih Birol, elogió la importancia de la energía limpia, advirtió sobre la dependencia de China, ya que Beijing controlará el 95% de la cadena de suministro mundial de energía solar para 2025. Además de lo anterior, la fortaleza del dólar estadounidense, que ha subido a máximos de 20 años y alcanzado la paridad con el euro, mantendrá bajo presión a las materias primas. 

Un tribunal de la región de Krasnodar canceló el lunes una instrucción para suspender los envíos desde la terminal CPC en la costa rusa del Mar Negro, que exporta principalmente crudo kazajo. Se debe enviar 1,2 millones de barriles por día este mes. 

La producción mundial de crudo y la producción de refinación todavía están luchando para seguir el ritmo del repunte de la demanda posterior a la pandemia y la interrupción del suministro como resultado de las sanciones a Rusia por la invasión de Ucrania. El precio de la gasolina sigue siendo una fuente de peligro político para un presidente que se dirige a elecciones intermedias con índices de aprobación cercanos al 40%.

UN PUERTO SOBRE EL MAR NEGRO
Un tribunal de la ciudad de Novorossiysk, en la región de Krasnodar, con costa al Mar Negro, ha multado con 200.000 rublos al gestor del oleoducto del Caspio, que abastece con más de un 1 millón de barriles diarios de crudo kazajo a Europa. Durante la semana pasada, el juzgado amenazaba con cortar el suministro 30 días. La medida hubiera metido mucha presión a Europa, que se enfrenta al cierre temporal del Nord Stream 1, que suministra gas ruso al centro de Europa.

Un tribunal de la ciudad de Novorossiysk, en la región de Krasnodar, con costa al Mar Negro, había ordenado al oleoducto del Caspio parar su actividad durante 30 días, lo que implicaría daños graves en la infraestructura. Más de un millón de barriles de crudo atraviesan a diario uno de los oleoductos más grandes del planeta, con destino a Europa. 

Según ha informado el consorcio que gestiona el oleoducto, Caspian Pipeline Consortium (CPC, por sus siglas en inglés) ha sido sancionado con 200.000 rublos, aproximadamente 3.200 euros al cambio. El juzgado ha aceptado las alegaciones de la compañía para dejar la sanción, en un mero correctivo económico.

Había miedo que Rusia comenzara a jugar con los suministros de petróleo a Europa. Sin gas y con el crudo todavía más por las nubes será demasiado largo y duro, para unas economías que ya se asoman a la recesión y que se preparan para afrontar racionamientos de energía, la crisis de los 70 se hubiera quedado pequeña con un inicio de recortes en el petróleo que viene de Rusia o las antiguass repúblicas soviéticas, como Kazajistán.

VOLATILIDAD DEL CRUDO

PRECIOS, RESERVAS Y  RAZONES 
Los futuros del crudo West Texas Intermediate caían para cerrar en 104,09 dólares el barril el lunes, una baja del 3,9% en relación inversamente proporcional al aumento de los casos de Covid en Shanghái a lo que se sumó otra baja del 7% el martes.

Por el lado de la oferta, las preocupaciones disminuyeron después de que una orden judicial permitiera que la terminal CPC en la costa rusa del Mar Negro permaneciera operativa. Mientras tanto, en EE. UU., el Departamento de Energía adjudicó casi 39 millones de barriles de crudo de la Reserva Estratégica de Petróleo a 14 empresas, según un informe de Bloomberg.

La disputa por el estratégico Mar Negro, terminal de oil

El Instituto Americano del Petróleo (API, por sus siglas en inglés) informó una gran acumulación esta semana para el petróleo crudo de 4,762 millones de barriles, mientras que los analistas predijeron una extracción de 1,933 millones de barriles.

La acumulación se produce cuando el Departamento de Energía liberó 6,9 millones de barriles de las Reservas Estratégicas de Petróleo en la semana que finalizó el 8 de julio, a 485,1 millones de barriles.

Los inventarios de crudo de EE. UU. han perdido unos 63 millones de barriles desde principios de 2021, pero las pérdidas netas han sido insignificantes desde principios de 2020, según datos de API.

“El crudo vuelve a estar bajo presión a medida que se alivian las preocupaciones sobre el suministro del oleoducto CPC y el sentimiento sigue siendo agrio”, dijo Rebecca Babin, operadora sénior de energía de CIBC Private Wealth Management. 

El petróleo cayó por debajo de los 100 dólares la semana pasada, luego se recuperó cuando el mercado se vio afectado por las perspectivas de la oferta y la demanda. El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, tiene previsto visitar Arabia Saudita en los próximos días durante una gira por el Medio Oriente mientras busca controlar el aumento de los precios de la energía que pesan sobre la economía mundial.

Los especuladores también se volvieron más bajistas en los principales puntos de referencia del petróleo la semana pasada. Los administradores de dinero redujeron las posiciones largas netas tanto en Brent como en WTI al nivel más bajo desde 2020.

"Los datos de la CFTC publicados el viernes mostraron que el posicionamiento fue el menos alcista en más de dos años, lo que destaca la falta de convicción en mantener posiciones largas en materias primas en una incertidumbre económica", dijo Babin. 

El WTI para entrega en agosto cayó 70 centavos para cerrar en 104,09 dólares el barril en Nueva York.

El Brent para la liquidación de septiembre subió 8 centavos para cerrar en 107,10 dólares el barril.

Shanghái registró 69 nuevas infecciones de covid el domingo, la mayor cantidad desde fines de mayo. China dará a conocer una serie de datos económicos esta semana, y los números se analizarán en busca de evidencia del impacto de Covid Zero en la economía número 2 del mundo.

Shanghái registró 69 nuevas infecciones de covid el domingo, la mayor cantidad desde fines de mayo.

A pesar de las preocupaciones sobre la demanda de China, el mercado del petróleo aún cuenta con el respaldo de una oferta limitada, en parte debido a los flujos comerciales alterados de Rusia luego de su invasión de Ucrania. Los diferenciales de tiempo se han afirmado en una estructura de retroceso alcista, lo que indica volúmenes escasos.

LA DEMANDA GLOBAL POR DEBAJO DE LO ESPERADO
“Casi todo el mundo ha reducido sus expectativas de demanda para el año”, dijo Edward Morse, del Citigroup y agregó que la demanda “simplemente no estaba creciendo sobre una base empírica al grado que la gente esperaba”.

Citigroup ha reducido su previsión de demanda de petróleo en un tercio, a entre 2,4 millones de bpd y 2,5 millones de bpd, cerca de las perspectivas proporcionadas por la EIA y la IEA. Morse espera ver aún más revisiones a la baja en la demanda.

Parte de la razón de la menor perspectiva de la demanda de petróleo es la decepcionante demanda de petróleo de China y los altos precios de la gasolina que mantendrán a raya la demanda este verano.

El martes, un informe de Citigroup sugirió que los precios del petróleo podrían caer a US$65 por barril para fines de este año y a US$45 por barril para fines del próximo año, debido a la recesión mundial y la falta de intervención en el mercado por parte de la OPEP+. Citi señaló, sin embargo, que este caso no era su caso base y que no preveía una recesión global.

Citi continúa siendo bajista con respecto al petróleo, manteniendo que el petróleo crudo está sobrevaluado y debería cotizar en el rango de US$70, no en el rango de US$100.

Es posible que Citi no vea una recesión en el horizonte, pero el temor a una recesión ha enfriado los precios del petróleo esta semana, con el WTI cotizando ahora muy por debajo de US$100 por barril a $95.90 a las 12:20 p. m. ET. El crudo Brent también cotiza por debajo de los 100 dólares, a 99,37 dólares, la primera marca por debajo de los 100 dólares desde mediados de abril.

El caso base de Citi es que el petróleo se hunda a $85 por barril. “No hay evidencia de que vayamos a ver este aumento de verano en la conducción y el aumento de la demanda de verano. El precio es demasiado alto”.

LA OPEP BOMBEA POR DEBAJO DE LOS OBJETIVOS
Los diez productores de la OPEP en el pacto OPEP+ bombearon 24,8 millones de barriles por día (bpd) de petróleo crudo en junio, según mostraron datos de la OPEP el martes, con una producción que cayó 1 millón de bpd por debajo de los niveles objetivo.

Los 13 miembros de la OPEP produjeron 28,716 millones de bpd en junio, 234.000 bpd más que en mayo, según fuentes secundarias utilizadas por la OPEP para rastrear la producción en su Informe mensual del mercado petrolero (MOMR).

Sin embargo, los 10 productores del pacto OPEP+ produjeron 24,8 millones de bpd, 1 millón de bpd por debajo del objetivo de la OPEP de 25,864 millones de bpd para los diez miembros para junio.

Irán, Libia y Venezuela están exentos del pacto de producción.

Libia experimentó la mayor caída en la producción en junio, ya que su producción cayó por debajo de 1 millón de bpd en cada uno de los meses del segundo trimestre debido a los continuos disturbios , protestas y bloqueos de puertos. Esto ha servido como un recordatorio de los riesgos perennes para la producción mundial. 

Choques en Libia entre dos gobernantes, disrubios y protestas, mayo 2022

Dejando de lado todos los riesgos y beneficios potenciales relacionados con los flujos de crudo de la OPEP, hay un problema apremiante que poco pueden hacer para resolver: la falta de capacidad en todo el mundo para producir gasolina, diésel y combustible para aviones. 

Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos son los únicos miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo con volúmenes significativos de producción no utilizada. Juntos tienen actualmente un colchón de unos 3 millones de barriles diarios, indican datos oficiales de los países. 

Eso es alrededor del 3% de la producción mundial de petróleo y aproximadamente el equivalente a la cantidad de petróleo ruso que podría quedar fuera del mercado por las sanciones a fin de año, según la Agencia Internacional de Energía. 

El ministro de Energía de los Emiratos Árabes Unidos, Suhail al Mazrouei advirtió el 29 de junio que el mundo se enfrenta a un “mercado cada vez más ajustado” y a un “ período turbulento ” porque la OPEP tiene menos capacidad ociosa de lo que se suponía. 

Después de años de inversión insuficiente a escala mundial, la industria del petróleo y el gas ahora "enfrenta enormes desafíos en múltiples frentes", dijo Mohammad Barkindo, el Secretario General de la OPEP a los delegados en una conferencia de la industria en Lagos.

“Estos amenazan nuestro potencial de inversión ahora y a largo plazo, para decirlo sin rodeos, mis queridos amigos, la industria del petróleo y el gas está sitiada”, citó así Barkindo los acontecimientos geopolíticos en Europa. También sugirió que la escasez de suministro que eventualmente surgiría para la industria como resultado de esa inversión insuficiente, y como resultado del intento de un país de alejarse de los combustibles fósiles, podría mitigarse si se permitiera exportar más petróleo de los miembros de la OPEP. Irán y venezuela

LA BÚSQUEDA DE BIDEN EN ARABIA SAUDITA NO ES LO ESPERADO
La búsqueda de Biden por el petróleo saudita se enfrenta a la realidad de la escasa capacidad. Biden dijo que su visita a Medio Oriente, que incluye una parada en Israel, se centrará en cuestiones de seguridad en lugar de suministros de energía. Dijo que no pedirá específicamente al rey saudí Salman o al príncipe heredero Mohammed Bin Salman que aumenten la producción de petróleo. Sin embargo, el viaje representa un revés para el presidente, quien previamente prometió recalibrar la relación de Estados Unidos con el reino después del asesinato en 2018 del crítico del régimen Jamal Khashoggi.

Los saudíes ya han ofrecido un gesto de reconciliación antes de la visita de Biden al dirigir la alianza OPEP+ para acelerar sus aumentos de producción este mes y el próximo, revirtiendo el último de los recortes de producción introducidos al comienzo de la pandemia de Covid-19 en 2020.  

Biden ha señalado que quiere que los exportadores de todo el Golfo Pérsico hagan aún más, que es donde surgen las preguntas sobre la capacidad disponible.

No obstante, hay algunos signos de alivio para Biden. Los precios de la gasolina, uno de los principales contribuyentes a la inflación y un tema central en las elecciones estadounidenses, han caído durante 27 días, incluida la mayor caída diaria en más de una década. Esa es la racha más larga de caídas desde abril de 2020.

Incluso si Joe Biden asegura una promesa de más petróleo cuando visite Arabia Saudita esta semana, puede hacer poco para reducir los altos precios del combustible que agitan la economía mundial.

La visita del presidente de EE. UU. a un país que una vez prometió aislar representa un descongelamiento significativo de las relaciones, pero los saudíes y sus socios de la OPEP tienen una capacidad de producción limitada para ofrecer a cambio de esta concesión política. Algunos observadores del mercado también se preguntan si aprovechar este colchón de suministro calmaría los mercados energéticos o simplemente empeoraría las cosas.

“Parece poco probable un aumento en la producción saudita”, dijo Ben Cahill, investigador principal del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales. “Arabia Saudita y la OPEP+ tienen una capacidad adicional muy limitada y deben administrarla con cuidado”.

El reino no hizo uso completo de su cuota de la OPEP+ en mayo, bombeando alrededor de 125.000 barriles por día menos de lo que podría, a pesar de las súplicas internacionales por más suministro, según muestran los datos del grupo. 

RBC Capital Markets estima que puede haber un "techo blando a corto plazo" de 11,5 millones de barriles por día, y se necesita más perforación para alcanzar niveles más altos.

“Se da cuenta de que Arabia Saudita no tiene mucho que aportar en términos de suministros, al menos por el momento”, dijo Bill Farren-Price, director de Enverus Intelligence Research.

El gigante estatal Saudi Aramco dice que puede alcanzar y mantener una producción máxima de 12 millones de barriles por día. Los datos de la OPEP muestran que el país solo ha mantenido este nivel durante un solo mes, abril de 2020, en sus muchas décadas como un importante productor de petróleo.

Como resultado, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos pueden ofrecer una promesa genérica para estabilizar los mercados petroleros mundiales mientras mantienen seca su "capacidad de producción adicional" durante un período de suministro aún más limitado que se espera más adelante en el año, dijo Bob McNally, presidente de Washington, consultor basado en Rapidan Energy Group y ex funcionario de la Casa Blanca.

“No existe una varita mágica para ningún presidente en esta situación”, dijo McNally. “Lo mejor que puedes hacer es preguntarle a la OPEP, y no tienen mucho que dar”.

El presidente francés, Emmanuel Macrom, fue captado por una cámara en la cumbre del G-7 el mes pasado, diciéndole a Biden que el gobernante de los Emiratos Árabes Unidos, el jeque Mohammed bin Zayed, le había admitido que Abu Dhabi está en su producción "máxima" y que los saudíes solo pueden aumentar "un poco más". ” 

LAS REFINERÍAS DE EE.UU. AL MÁXIMO
Las refinerías de EE. UU. están operando al 95% de su capacidad, la más alta en casi tres años, mientras se esfuerzan por mantenerse al día con la demanda máxima de combustible del verano. 

Años de inversión insuficiente, junto con la interrupción de las exportaciones rusas de productos petroleros, han llevado a la Casa Blanca a considerar reiniciar las refinerías suspendidas . 

“Esta crisis energética necesita una inversión de ciclo largo en infraestructura como refinerías y abordar problemas de seguridad militar y energética”, dijo Jeff Currie, jefe de investigación de materias primas de Goldman Sachs Group Inc. “Las preguntas sobre la capacidad de producción de la OPEP son un espectáculo secundario”.