Todo eso ha provocado un rally del carbón en Asia, el centro de la demanda del combustible fósil. El precio de los cargamentos físicos de carbón en los puertos de Newcastle en Australia y Qinhuangdao en China se ha disparado más del 50% este año a su nivel más alto. Los futuros también han subido, con los de Australia subiendo casi un 50% y los precios en China más del doble.

"Los precios del carbón siguen subiendo", comentó Peter O'Connor, analista de Shaw & Partners, con sede en Sydney. "Estamos cerca de los primeros en términos de precios, pero no creo que estemos allí aún". 

El rally está destacando el papel perdurable del carbón en la combinación energética mundial, particularmente en las economías grandes y en crecimiento de Asia, a pesar de un impulso más amplio para una acción más agresiva para abordar el cambio climático. El carbón representó más de un tercio de la generación de electricidad mundial en 2019, según BloombergNEF. Se prevé que los tres principales consumidores, China, India y Estados Unidos, quemen más este año.

"Podemos ver precios bastante sólidos hacia fin de año", explicó Sakkie Swanepoel, gerente de grupo de marketing de Exxaro Resources, la minera y productora de carbón con sede en Sudáfrica. "No vemos que los precios caigan por el precipicio".

China

Gran parte de la rigidez del mercado se remonta a China, que produce y quema la mitad del suministro mundial. La demanda de energía está aumentando a medida que las fábricas aceptan pedidos para abastecer a las economías en recuperación, y la producción minera nacional se ha visto frenada por las inspecciones de seguridad después de una serie de accidentes mortales y un escrutinio adicional debido a las celebraciones del centenario del Partido Comunista Chino.

Las centrales eléctricas están buscando importaciones para llenar el vacío, y se espera que las entregas de junio superen los 30 millones de toneladas por primera vez este año antes de aumentar nuevamente en julio y agosto, según analistas de Fengkuang Coal Logistics. El país aún se niega a permitir las compras australianas en medio de una brecha geopolítica.

Incluso con los esfuerzos del gobierno para enfriar el mercado, como liberar existencias y presionar a los proveedores estatales para que no permitan que las ofertas se salgan de control, los precios se mantendrán en niveles elevados este verano, especialmente porque el mercado al contado se enfrenta a una escasez "bastante grave", informó Wang Haitao, analista de Huatai Futures.

Australia

Los productores han hecho caso omiso de la pérdida de un mercado de exportación clave después de que las tensiones diplomáticas hicieron que China detuviera las compras de carbón de Australia desde fines del año pasado. Los cargamentos de carbón térmico premium han encontrado rápidamente compradores alternativos, mientras que los proveedores de combustible para centrales eléctricas de calidad media y carbón siderúrgico están listos para beneficiarse a medida que India y partes del sudeste asiático alivian las restricciones relacionadas con Covid, dijo el gobierno de Australia.

Los precios de referencia para el carbón físico de mayor calidad en el puerto australiano de Newcastle han subido un 66% este año a un record de US$ 136,38 la tonelada, según China Coal Resource. Los futuros del carbón de Newcastle subieron a US$ 131,45 la tonelada, el nivel más alto desde marzo de 2011.

Esas ganancias no se han traducido en avances para algunos productores australianos. Yancoal Australia ha caído un 18% este año hasta el cierre, mientras que Coronado Global Resources ha caído un 20%. “El carbón está subiendo y, sin embargo, la gente no quiere invertir en carbón”, comentó O'Connor. "Hay una dislocación entre los precios del carbón y las acciones". Empresas como Whitehaven Coal también se han enfrentado a  largas batallas legales por los planes de expansión.

Japón

Algunas empresas de servicios públicos japoneses han impulsado las compras de carbón al contado después de que el Ministerio de Energía, Comercio e Industria del país les ordenó estar preparados para la demanda de verano después de que la escasez de invierno disparara los precios de la energía.

Tohoku Electric Power tuvo que aceptar un aumento de precio del 60% para su suministro anual de carbón hasta marzo de 2022 de Glencore. Aún así, los altísimos precios del carbón no están ni cerca del nivel que deberían estar para hacer que las empresas de servicios públicos cambien al gas natural licuado, donde los precios han aumentado en un 500% el año pasado.

Incluso a mediados del verano, los compradores ya están negociando los cargamentos de octubre, ya que buscan asegurar suministros antes del invierno.

Indonesia

Las fuertes lluvias caídas en Indonesia a principios de año redujeron el suministro en el mayor exportador mundial de carbón para centrales eléctricas. En abril, el gobierno otorgó a las mineras permiso para producir 75 millones de toneladas adicionales para la exportación, además de los 550 millones de toneladas que había establecido como cuota de producción, pero hasta ahora los suministros están retrasados.

"Todavía no sabemos si se puede lograr el objetivo de exportación", explicó en una entrevista la directora ejecutiva de la Asociación de Minería del Carbón de Indonesia, Hendra Sinadia. "Incluso si los precios son buenos, también dependerá de la demanda y la recuperación económica en los países compradores en medio de esta situación de pandemia".

India

India, el segundo mayor consumidor de carbón, quema el combustible para aproximadamente el 70% de sus necesidades de energía y los precios más altos podrían afectar a la economía, acelerando la inflación, según Rupesh Sankhe, vicepresidente de Elara Capital India en Mumbai.

Coal India, el principal productor mundial de combustible, busca ganar ventas a medida que los clientes cambian a fuentes nacionales de importaciones de mayor costo. También está debatiendo si elevar los precios de los contratos a largo plazo para reflejar el aumento de las tasas de referencia mundiales, comentó el presidente Pramod Agrawal.

El productor "tiene una gran oportunidad de recuperar clientes que se habían cambiado a las importaciones", dijo Sankhe.