PRATIMA DESAI
La floreciente actividad en los sectores de vehículos eléctricos, infraestructura energética, inteligencia artificial y automatización generará al menos 10 millones de toneladas métricas de consumo adicional de cobre durante la próxima década, según un análisis del comerciante materias primas Trafigura.
Los avances tecnológicos como la inteligencia artificial y la automatización, y la transición energética, que incluye vehículos eléctricos y energías renovables, ya han impulsado las perspectivas de demanda de cables de cobre utilizados para conducir electricidad.
Las estimaciones de la nueva demanda de estas aplicaciones varían, pero Graeme Train, jefe de análisis de metales de Trafigura, con sede en Suiza, dijo que un tercio de los 10 millones de toneladas de nueva demanda provendrían del sector de vehículos eléctricos.
"Un tercio es generación, transmisión y distribución de electricidad, y el resto se destina a cosas como la automatización, el gasto de capital en fabricación y los sistemas de refrigeración dentro de los centros de datos", dijo.
La aceleración de la producción de vehículos eléctricos, paneles solares y la inversión en redes en China, y un repunte de la actividad manufacturera en el principal consumidor, ya han impulsado la demanda de cobre utilizado en las industrias de energía y construcción.
Eso, combinado con la escasez de suministros de cobre metálico refinado y concentrado, ha impulsado al cobre en la Bolsa de Metales de Londres (LME) a máximos de dos años cercanos a los US$ 10.000 la tonelada.
Fuentes de la industria del cobre dicen que parte del motivo del aumento de precios es la caída de las existencias en los almacenes registrados en la LME, que a 121.200 toneladas han caído más del 35% desde octubre del año pasado.
Los escasos suministros de cobre extraído o concentrado, la materia prima para el cobre metálico, debido a interrupciones como el cierre de la mina Panamá Cobre de First Quantum el año pasado también han ayudado a impulsar el impulso alcista del precio del cobre este año.
Los analistas han estado revisando sus pronósticos sobre el equilibrio del mercado del cobre desde diciembre, cuando Anglo American también recortó su guía de producción, y algunos ahora esperan una escasez significativa en el mercado del cobre estimada en alrededor de 26 millones de toneladas este año.
Train espera que la demanda de cobre se vea impulsada por la industrialización y la urbanización en el mundo emergente, particularmente en India, donde el consumo por persona por año es de sólo medio kilo. En China y el mundo desarrollado, el consumo de cobre per cápita es de entre 7 y 10 kg respectivamente.