Además de oportunidades de crecer, el acuerdo entre Codelco y SQM para ir juntas por el litio de Salar de Atacama, dio cruces entre el presidente de directorio de Codelco, Máximo Pacheco y el presidente del grupo Errázuriz, Francisco Javier Errázuriz Ovalle.

 “Como hemos informado en reiteradas oportunidades, tanto en el Congreso Nacional como en medios de prensa, así como también durante las varias reuniones sostenidas con usted y su equipo, incluyendo la última que tuvimos el 12 de marzo de 2024, el proceso de selección del socio ha sido producto de un prolijo trabajo y análisis, por lo que estamos convencidos que su resultado es la mejor alternativa disponible actualmente para Chile”, escribió Pacheco en una carta fechada el 14 de marzo.

Según publicó Victor Guillou en La Tercera, el presidente de directorio de Codelco, Máximo Pacheco, respondió a la misiva de Francisco Javier Errázuriz Ovalle, presidente del grupo Errázuriz, donde reiteraba sus públicos cuestionamientos a la alianza anunciada entre Codelco y SQM para explotar el litio del Salar de Atacama en forma conjunta hasta 2060.

El grupo Errázuriz tiene interés en litio, ya que cuenta con pertenencias en el Salar de Maricunga –donde Codelco ha avanzado en consolidar la mayoría de las pertenencias mineras–, las que pretende explotar a través de su filial Cominor y en alianza con Simbalik, firma controlada por un fondo singapurense, en un proyecto que podría producir 22.000 toneladas de LCE (toneladas de carbonato de litio equivalente, por sus siglas en inglés) durante un período de 15 años, en las 11.268 hectáreas totales que controla la firma en la cuenca del segundo depósito salino de mayor importancia a nivel nacional e internacional.

Pese a los públicos emplazamientos de Errázuriz Ovalle para asociarse tanto con Codelco como con Enami para el desarrollo de nuevos proyectos, dichos contactos no han dado resultados para el grupo empresarial chileno.

El 12 de marzo, Pacheco mostró la hoja de ruta para avanzar con el acuerdo ante la Comisión de Minería del Senado y explicó que "Lo primero es explicar que un memorándum de entendimiento es un instrumento por medio del cual, Codelco y SQM acordaron las bases de un trabajo para la suscripción de documentos definitivos con el fin de implementar la asociación y desarrollar actividades productivas y comerciales en el salar de Atacama cuidando el medio ambiente e integrando las comunidades”, describió precisando que “no establece obligaciones exigibles para las partes”.

 “Hemos estado revisando antecedentes, lo que se llama due diligence (auditoría de empresa) desde lo legal, financiero y técnico. La documentación que tiene que ver con las relaciones comunitarias y temas de libre competencia, la redacción de borradores de contrato con SQM, acuerdos de asociación, pactos de accionistas, etc. Hay más de cien profesionales en esto”, confesó el ejecutivo.

Pacheco reveló que entre las etapas restantes figura la consulta indígena y obtener la autorización de la Comisión Chilena de Energía Nuclear para aumentar la producción de SQM. Estos documentos deben pasar por la toma de razón de Contraloría y ser visados por los directorios de cada empresa. Por último, el líder de la estatal recordó que la operación debe ser revisada por autoridades de libre competencia, tanto en Chile como en el extranjero.

En su estrategia para apuntalar la minería de litio, Codelco confirmó, días atrás, el control de las acciones de Lithium Power International Limited, LPI es dueña del proyecto de litio Salar de Maricunga en Chile, también conocido como Proyecto Blanco, que es vecino de las propiedades mineras que Codelco ya poseía en dicho salar. Así, la adquisición representa el puntapié inicial de la Corporación para consolidar un proyecto único en ese salar.