Los problemas logísticos en el abastecimiento de diésel los cuales provocaron largas filas por el carburante desde el jueves pasado, 26 de octubre, en Bolivia, tendrían dos razones: problemas de pagos a los proveedores internacionales y dificultades de estos para cumplir con el suministro. Esta semana, el ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina, admitió las restricciones de provisiones por falta de pago a proveedores.

“Queremos manifestar de que, evidentemente, la semana pasada, comenzaron a haber algunas restricciones con algunos proveedores; también, esto, generándose algunos temas asociados a algunos pagos que evidentemente se tenían que hacer”, señaló Molina.

“Lógicamente hay algunos que han tenido ciertas dificultades de suministro. No voy a entrar en el detalle de decir cuál proveedor, porque no corresponde”, agregó. El titular de Hidrocarburos detalló que Bolivia cuenta con una cartera de entre ocho a 12 empresas abastecedoras.  

Ayer (1/11), en contacto con Unitel, el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, admitió este el problema tuvo origen en la emisión de Swift, para poder pagar a las empresas que proveen de combustible a Bolivia.

“Hemos tenido un problema logístico la semana pasada, donde aproximadamente un 20% del combustible de esos dos días no pudo ser suministrados. A esto sumamos un problema evidentemente especulativo (…) El problema logístico que tuvimos fueron las emisiones de los Swift, para poder pagar a las empresas que nos proveen combustibles”, señaló el titular de YPFB.

“Al haber el retraso en la entrega del Swift, hay un retraso también en la entrega del combustible. Muchas veces, cuando tenemos un retraso en el pago del Swift, el combustible deja de llegar al país. Esto hace que tengamos un retraso de dos, tres días en poder normalizar la situación. Por eso el problema logístico que tuvimos la semana pasada”, detalló Dorgathen.

RETRASO EN PAGO DE COTA
Añadió que YPFB solicitó la cota para realizar el pago a los proveedores, pero “hubo un retraso de un día en el pago de la cota”. Esto generó que “al haber el retraso de ese día en la entrega del Swift, lo que pasa es que la logística de la empresa proveedora también tarda un día en poderse reactivar, ahí son dos días”, explicó.

Dorgathen precisó que YPFB, a la cabeza del Ministerio de Hidrocarburos, se encarga de contar con los contratos, cisternas, el sistema de almacenaje y el transporte; es decir, la logística hidrocarburífera. Sin embargo, el Ministerio de Economía y el Banco Central de Bolivia (BCB) son los entes que deben responder por los retrasos en los pagos.  

Tras superar este panorama, YPFB normalizó el despacho de combustible desde el lunes. Hoy incrementaron la entrega en un 7% para evitar las filas.  

EN COCHABAMBA   
Mientras tanto, en Cochabamba, YPFB inyectó 1.1 millones litros de diésel y 800 mil de gasolina en las estaciones de servicio para abastecer la alta demanda y evitar las largas filas, reportadas desde el jueves pasado.

El suministro contó con la supervisión, desde tempranas horas de la mañana, de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH). YPFB y la institución encargada de regular, supervisar, controlar y fiscalizar las actividades de toda la cadena hidrocarburífera en Bolivia descartaron la escasez del combustible e instaron a la población a no realizar filas.

“Estamos garantizando a la población que el combustible va a llegar a todas las estaciones verificando que las cisternas salgan de planta. Hoy día se adelantó el despacho a partir de las 04:00 y también estamos en todas las estaciones de servicio con todo el personal desplegado”, informó la directora distrital de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Wendy Villarroel.