Glencore anunció un pago de US$ 7.100 millones a sus inversores, ya que los altos precios del petróleo y el carbón le ayudaron a registrar un beneficio anual récord, pero dijo que el aumento de los costos de producción de minerales podría hacer mella en las ganancias futuras.

En los resultados preliminares de 2022, la minera y comercializadora dijo que redujo la deuda neta a US$ 75 millones a finales de año desde los 6,000 millones de finales de 2021.

Las ganancias ajustadas antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA) aumentaron un 60%, a US$ 34,100 millones, pulverizando un récord anterior de US$ 21,300 millones un año antes, en línea con las estimaciones de los analistas.

El desembolso de US$ 7.100 millones incluye el pago de dividendos y una recompra de acciones por valor de US$ 1.500 millones.

La empresa contrarrestó la tendencia a la baja de las rentabilidades de otras mineras, ya que sus fuertes beneficios comerciales amortiguaron el aumento de los costos y el descenso de la producción.

Los beneficios de la comercialización de metales y combustibles fósiles alcanzaron la cifra récord de US$ 6.400 millones en 2022, un 73% más, aunque los analistas afirman que es improbable que se repitan estos resultados este año o el próximo.

“La pandemia mundial, la recuperación de la misma y los años de inversión insuficiente, seguidos del conflicto en Europa, expusieron vulnerabilidades preexistentes en la seguridad energética y las cadenas de suministro, lo que apuntaló el entorno de precios de las materias primas generalmente alto y volátil de 2022, que permitió al grupo generar una rentabilidad récord", dijo Gary Nagle, director ejecutivo de Glencore.

“El EBITDA industrial aumentó en $10,200 millones a $27,300 millones, beneficiándose principalmente de los precios récord de nuestros puntos de referencia clave de carbón, amplificados por la contribución incremental de los dos tercios de Cerrejón, adquiridos en enero de 2022, que Glencore no poseía previamente", detalló. 

“Las altas tasas de inflación y las condiciones monetarias más estrictas asociadas presentan cierto riesgo para las perspectivas económicas en 2023. Sin embargo, la reapertura de China, junto con un enfoque global continuo en la seguridad energética y la descarbonización / electrificación, significa que es probable que la demanda de muchos de nuestros productos básicos se mantenga. saludable, mientras persisten las restricciones de suministro y los inventarios siguen siendo relativamente bajos", explicó el directivo. 

“Las políticas gubernamentales recientes, como la Ley de Reducción de la Inflación de EE. UU. y el Plan Industrial Green Deal propuesto por la UE, demuestran la creciente necesidad de materias primas críticas hasta el final de la década y más allá, lo que requiere nuevas inversiones tanto en suministro primario como en reciclaje", agregó. 

“La solidez de nuestro modelo comercial diversificado en la industria y el marketing, centrándose en los metales y la energía, ha demostrado su eficacia en una variedad de condiciones del mercado, lo que nos brinda una base sólida para enfrentar con éxito los desafíos a corto plazo que puedan surgir, así como para cumplir con las necesidades de recursos del futuro. Me gustaría agradecer a todos nuestros empleados por sus esfuerzos y su tremenda contribución durante el desafiante pero exitoso 2022. Como siempre, seguimos enfocados en operar de manera responsable y ética y en crear valor sostenible a largo plazo para todas nuestras partes interesadas”, completó Nagle.