Renegociaciones de contratos o suscripción de nuevos acuerdos comerciales que garanticen suministros eléctricos basados totalmente en fuentes certificadamente limpias han sido la tónica de los últimos años
SANDRA NOVOA
Por representar cerca de un tercio del consumo energético del país, el sector minero ha marcado y seguirá marcando en gran medida el ritmo de avance de las energías renovables en la matriz. Según consigna el documento Política Nacional Minera. Minería 2050, lanzado en enero, Chile cuadruplicó su capacidad para generar energía solar y septuplicó la de energía eólica en cinco años con ayuda de esta industria.
Y su peso en el consumo eléctrico debiera al menos mantenerse. Según un estudio de Cochilco, en la minería del cobre este crecerá desde 25,8 TWh (Tera Watts hora) en 2021 hasta 33,8 TWh en 2032, año en que los nuevos proyectos representarían 32% de la demanda eléctrica esperada (las empresas han declarado que la materialización de estos dependerá del royalty que les apliquen).
En una primera etapa −desde mediados de los 2000− las mineras participaron en asociaciones con empresas generadoras para desarrollar proyectos solares y fotovoltaicos; pero en los últimos cinco años han recurrido intensivamente a incluir tanto en nuevos contratos como en renegociaciones de acuerdos contractuales vigentes cláusulas que aseguren abastecimiento al ciento por ciento de energías verdes, en plazos que les permitan cumplir su metas tanto en Chile como a nivel mundial para reducir la huella de carbono en sus producciones.
Algunas han venido recortando plazos y ya cuentan con suministros íntegramente renovable para todas sus operaciones locales, otras proyectan hacerlo a 2025 y 2030. Lo que se condice con el plan retiro y reconversión de las centrales a carbón del Ministerio de Energía, el explosivo desarrollo de proyectos renovables y la trazabilidad de estas energías por parte de actores independientes.
Para esto último, hay compradores y vendedores que han recurrido al Registro Nacional de Energías Renovables (Renova), plataforma del Coordinador Eléctrico Nacional certificada internacionalmente, que lleva la trazabilidad de los electrones suministrados mediante tecnología blockchain: a la fecha suma 138 generadoras y 89 clientes, varios de ellos del rubro minero.
ANTOFAGASTA MINERALS AL 100%
Según lo informado públicamente, Antofagasta Minerals −del grupo chileno Luksic− está entre las que ya cumplió uno de los objetivos clave de la Estrategia de Cambio Climático que puso en marcha en 2021: descarbonizar sus operaciones por la vía de convertir la matriz de sus cuatro operaciones mineras a fuentes renovables a 2022, lo que la empresa declara haber cumplido en abril. Esto implicó renegociar algunos contratos.
Minera Zaldívar −yacimiento que opera y cuya propiedad comparte en partes iguales con Barrick Gold Corp− anunció en julio de 2020 que era la primera empresa chilena en utilizar 100% energías renovables para producir cobre, mediante un contrato a 10 años con Colbún por 550 GWh/año, en el que la generadora se comprometió a certificar que la energía suministrada provendrá de fuentes que no generan emisiones (hidráulica, solar y eólica), lo que será verificado por un organismo externo.
Minera Antucoya utilizará sólo fuentes de energías renovables en función de un contrato con Engie Energía Chile que empezó a operar este año e involucra 300 GWh/año.
Minera Los Pelambres comenzó a integrar fuentes de energía renovable en 2014, cuando firmó su primer contrato de energía eólica con el parque El Arrayán, en el que participaba con 30% junto a Pattern Energy (70%), con una capacidad instalada de 115 MW. El Arrayán vende 70% de su energía a Los Pelambres mediante un contrato a 20 años por 280 GWh/año, equivalente al 20% de la demanda de la minera, y el resto lo comercializa en el mercado spot.
Este yacimiento también obtiene suministro del parque Conejo Solar, desarrollado por Pattern Chile, que produce 310 GWh anuales, y que mantiene un contrato a 22 años con Antofagasta Minerals. En 2018 Arroyo Energy Group adquirió a Pattern ambos proyectos, incluida la participación minoritaria de Antofagasta Minerals en El Arrayán.
En 2015 Los Pelambres empezó a recibir además suministro de la planta fotovoltaica Javiera SpA, de Sun Edison por un contrato a 20 años y en cuya propiedad participaba su matriz Antofagasta Minerals a través de Energía Andina (joint venture con la australiana Origin Energy que tenía 40% de la propiedad).
En 2017 vendieron su porcentaje a Atlas Renewable Energy Chile SpA, momento en que Los Pelambres renegoció las condiciones contractuales para capturar la baja en los precios. Con una capacidad instalada de 69,5 MW de potencia la planta aporta aproximadamente entre 12% y 14% de la energía que utiliza el yacimiento.
Su otro abastecedor es AES Andes, contrato que tiene una historia con varios capítulos. A mediados de 2017 Los Pelambres anunció la firma de dos contratos con la entonces llamada AES Gener por energía de un proyecto que cuando entrara en operación le proveería cerca de 50% de su consumo: hidroeléctrica Alto Maipo (531 MW). Aquí también partió siendo socia, con 40%.
En 2017, tras retrasos y alzas en el costo de construcción, la minera vendió su 40%, pero mantuvo el contrato hasta 2040. En abril de este año la central de la ahora Alto Maipo SpA −subsidiaria de AES Andes− partió por fin su operación comercial, junto con salir de un proceso de quiebra en Estados Unidos.
En ese escenario empezó un gallito entre ambas empresas por terminar y mantener el contrato, considerado “el activo más valioso” de AES Andes al representar un flujo de ingresos crítico para sus acreedores. A mediados de año Alto Maipo SpA activó un arbitraje contra su principal cliente en el Centro de Arbitraje y Mediación de la Cámara de Comercio de Santiago, proceso que según fuentes de la minera terminó, pero cuyas condiciones están sujetas a un acuerdo de confidencialidad, por lo que no pueden entregar antecedentes respecto de las condiciones finales del contrato de suministro.
En abril de 2020 se informó que Centinela cerró con la francesa Engie Chile abastecimiento para 2022-2033 100% de energías renovables, por una potencia de 186 MW. Como parte de la transacción la minera canceló dos contratos con vencimientos en 2026 y 2027 y le vendió su participación indirecta de 40% en la central térmica Hornitos a Engie.
CODELCO CON META A 2030
En el caso de la estatal chilena Codelco, que consume alrededor de 7.000 GWh/año, aproximadamente, 3.600 GWh/año en el Distrito Norte (Chuquicamata, Radomiro Tomic, Gabriela Mistral y Ministro Hales) y 3.400 GWh/año en el Distrito Centro Sur (Salvador, Andina, Ventanas y El Teniente) mantiene contrato con cinco generadoras: Engie, CTA (filial de Engie), AES Andes, Colbún y Pacific Hydro.
Tres de estos contratos terminan entre 2024 y 2029, los otros dos vencen entre 2033 y 2044. Este último es el de Colbún, que acaba de modificar: antes esta empresa le vendía 2.500 GWh/año a carbón, pero previa renegociación le suministrará 1.000 GWh/año de renovables a partir de 2026, manteniendo la duración del acuerdo original. Codelco licitará el saldo (1.500 GWh/año) entre oferentes en energías verdes en los próximos meses, para contar con esa energía cuando concluya la transición de esta modificación contractual.
El acuerdo con Colbún le permitirá a Codelco pasar del actual 20% al 50% de su matriz eléctrica con “energía verde” a 2026. Y en paralelo revisará otros contratos para alcanzar lo más aceleradamente posible el cumplimiento de su meta de llegar al 100% en 2030.
TECK SUMA RENOVABLES PARA QB2
En el caso de Teck, su filial Compañía Minera Teck Quebrada Blanca cerró un acuerdo de compra de energía limpia por 17 años para el proyecto de cobre Quebrada Blanca Fase 2 con AES Andes, por 1.069 GWh/año de energía procedente de fuentes renovables, con el que logrará 100% de energía limpia para esta operación a partir de 2025.
Este acuerdo permitirá a Teck alcanzar su objetivo de cero emisiones netas de alcance 2 (asociadas a la energía comprada) para 2025. También contribuye al objetivo de Teck para 2030 de reducir la intensidad de carbono de las operaciones en 33% y convertirse en un operador neto cero para 2050.
Esta minera canadiense ya había concretado en septiembre de 2020 un acuerdo similar para su operación Carmen de Andacollo por 550 GWh que se extenderá hasta fines de 2031, con la misma generadora.
LAS METAS DE ANGLO AMERICAN
Alineado con las metas de su Plan Minero Sustentable, que establece el compromiso de alcanzar la carbono neutralidad a 2040, aunque para ocho de sus operaciones a nivel mundial (aún no detalladas) pretende lograrla en 2030, en Chile la multinacional Anglo American puso en marcha en enero de 2021 un contrato de suministro eléctrico con Enel Generación para abastecer a las operaciones de Los Bronces, El Soldado y Fundición Chagres, a partir de fuentes 100% renovables a diez años por hasta 3 TWh al año. Este contrato es certificado por la entidad internacional I-REC Standard y le ha permitido reducir en más de 70% sus emisiones.
Otra iniciativa pionera a nivel mundial es su planta fotovoltaica flotante instalada sobre el depósito de relaves Las Tórtolas, en Colina, que cuenta con 256 paneles con capacidad para generar 150.000 KWh al año.
COLLAHUASI
Compañía Minera Doña Inés de Collahuasi −Anglo American (44%), Glencore (44%) y Japan Collahuasi Resources (12%)− firmó un contrato por 10 años con Enel Generación para el suministro de aproximadamente un TWh/año,100% renovable certificada, a partir del 1 de abril de 2020, que le permitió transformar su matriz totalmente a “verde”, según consigna en su Reporte de Sustentabilidad 2021. Partió incorporando renovables en 2011 y tras este acuerdo terminó el contrato asociado a la Central Termoeléctrica Tarapacá.
En el último Reporte de Sustentabilidad dice que en 2021 inició el proceso de una nueva licitación de largo plazo, por 2,5 TWh/año, que considera mantener las ERNC como fuentes exclusivas de electricidad las 24 horas del día, tanto para la operación basal como para los proyectos (planta desaladora y sistema de impulsión de agua de mar).
Adicionalmente, Collahuasi busca generar su propia electricidad a partir de fuentes renovables. Ya ha impulsado dos proyectos de energía solar en la región de Tarapacá, y avanza en la ingeniería conceptual de una planta fotovoltaica de 20 MW que se instalará en la faena.
BHP: 6 TWH/AÑO DE ERNC
Las operaciones de Escondida y Spence, de BHP comenzaron a operar con energía proveniente de fuentes renovables a mediados del año pasado, con activación de los primeros contratos licitados en 2019 por energías renovables, en que Enel Generación se adjudicó 3 TWh anuales por 15 años a partir de agosto de 2021 y Colbún 3 TWh/año por 10 años, desde enero de 2022.
El contrato con Enel Generación reemplazó a suministro basado en carbón, cancelado anticipadamente, con un costo aproximado de US$ 780 millones. A la fecha, ambos contratos se encuentran en plena ejecución, lo que les permite emplear energía renovable proveniente de fuentes eólicas y solares.
Desde enero de 2021 la totalidad de la energía empleada por Minera El Abra, filial de Freeport-McMoRan, tiene como base fuentes limpias y renovables, producto del suministro pactado con Engie Energía Chile por una potencia de 110 MW, mediante un contrato base por 80 MW y un adicional de 30 MW hasta 2028.
El 100% de la energía para las operaciones de la minera Sierra Gorda SCM −propiedad de la empresa polaca KGHM Polska Miedz y la australiana South32 − será renovable a partir de 2023, cuando empezará a operar un contrato con AES Andes por 1.240 GWh. El acuerdo entró en vigor en enero de 2021 por 40% del consumo y alcanzará su régimen el próximo año hasta su término en diciembre de 2039. Durante las horas de sol la energía será principalmente suministrada por el parque fotovoltaico Andes Solar II b y el tiempo restante del sistema de almacenamiento con baterías de estas instalaciones.
Minera Caserones −controlada por SCM Minera Lumina Copper Chile, que a su vez pertenece a la japonesa JX Nippon Mining & Metals− cuenta con un contrato a 17 años con Enel Generación por un volumen anual de 1 TWh de cualquier tipo de energía renovable certificada. En virtud de este acuerdo, desde enero de 2021 el 100% del suministro eléctrico proviene de estas fuentes, lo que representó el año pasado 853.579 MWh de electricidad.
Minera Candelaria −de Lundin Mining− tiene un contrato de suministro de energía eléctrica con AES Andes por 1.100 GWh/año, el que será abastecido con energías renovables y se extenderá por hasta 12 años, a partir de 2023. El acuerdo establece además que ambas entidades trabajarán en conjunto para optimizar el consumo eléctrico en las faenas mineras, en ámbitos como eficiencia energética, almacenamiento de energía, electromovilidad, proyectos de autogeneración y respaldo.
LA TRANSICIÓN EN LA MEDIANA MINERÍA
El holding minero Cemin anunció en julio de este año que migraría a la energía renovable en todas sus faenas con un suministro de energía verde (eólica, solar, geotérmica e hidráulica) proporcionada por ENEL durante seis años, certificada por un tercero. El contrato contempla 33 GWh anuales para abastecer a Minera Catemu, en la Región de Valparaíso; 2 GWh para Minera Dos Amigos, Región de Atacama, y a contar del 1 de febrero de 2025, 7 GWh anuales para la planta y mina Pullalli, Región de Valparaíso.
En la mediana minería también hay empresas que están haciendo por ahora la transición hacia energías más limpias a través del gas. Es así como Minera Sierra Atacama firmó un contrato por cinco años para suministro de gas natural −a partir de diciembre de 2021 pasado− que contempla el abastecimiento a través de dos plantas satélites de regasificación (PSR) instaladas en las faenas de la minera.
Con un volumen de energía contratada de 1.5 TBTU, le permitirán mantener sus procesos productivos y térmicos, para la obtención de cátodos de cobre con una menor huella de carbono, ya que la minera podrá generar su propia energía través de motores a gas natural para los procesos de mina, chancado, lixiviación, electrowinning y campamento.