La polémica por el impacto de la minería en otros sectores productivos de Fiambalá se generó cuando en declaraciones a medios locales, Cuello Roca había afirmado que para el 2023 quizás no haya cosecha.
“No tenemos obreros, no hay personal para cosechar, entonces el problema es con una solución improbable. Todo el mundo lo sabe: la presencia de las mineras ha hecho subir los salarios a un nivel imposible de pagar por nosotros”, había manifestado.
Posteriormente destacó que el municipio ha invertido en el sector vitícola con la puesta en marcha de la bodega “La Indómita” y con la mejora en el precio de la uva. En este marco resaltó que los productores han logrado “mejorar su rentabilidad” para ampliar su producción. “Si uno recorre el distrito observa cómo el productor ha podido mejorar la estructura de sus viñedos para elevar su volumen productivo”, dijo.
Posteriormente y en cuanto el supuesto impacto de la minería en los sectores agrícolas, resaltó que “si bien es cierto que la minería mejoró sustancialmente el ingreso de la oferta laboral al distrito, es solamente para mano de obra especializada”.
“Es lo mismo que ocurre con el sector productivo que requiere, por ejemplo, podadores e injertadores. Esto ha permitido que haya disminuido el desarraigo en el distrito ya que muchos productores han retornado a la localidad por la mejora en el sector vitícola”, aseveró.
“La incursión del Estado ha permitido que el sector vitícola mejore sustancialmente su rentabilidad con la mejora en el valor del precio de la uva lo que permitió que se pague lo mismo que se pague en Mendoza o San Juan”, añadió.
Finalmente, el funcionario municipal indicó que la gestión de Paulón ha puesto como pilar de su gestión el desarrollo del turismo, la minería y la producción.
“PERSONAL CALIFICADO”
Posteriormente, uno de los productores que se reunió con Muñoz, Martín Sable, afirmó que al menos en su finca no se han sufrido bajas en la mano de obra. “Hemos tenidos demoras pero por cuestiones personales pero no por la influencia de la minería”, dijo.
Sin embargo, reconoció que “cuesta conseguir mano de obra calificada”, pero dijo que esto se debe principalmente porque “lleva mucho tiempo capacitar a los trabajadores”.
Con respecto a los sueldos de los obreros, indicó que los dueños de las fincas “han incrementado el pago a sus empleados de acuerdo a cómo evoluciona la situación del país”.
Finalmente, señaló que el año que viene será importante para el sector con la participación de La Indómita dado que el municipio mejoró el precio de la producción de la pasa de uva.
EL RECLAMO DE CUELLO ROCA
“Lamento decir que para el 2023 quizás no haya cosecha. No tenemos obreros, no hay personal para cosechar, entonces el problema es con una solución improbable. Todo el mundo lo sabe: la presencia de las mineras ha hecho subir los salarios a un nivel imposible de pagar por nosotros”, advirtió Cuello Roca en declaraciones a medios locales.
En ese sentido, explicó que “nosotros pagamos de acuerdo a los convenios colectivos de trabajo en el sector agropecuario, en especial del vitivinícola, que son más o menos, un poco más de 50.000 pesos por mes”.
“En la mina pagan $200.000, entonces están yendo todos nuestros obreros a trabajar en la mina. Hay un desplazamiento de obreros del sector rural al sector minero y eso hace que no tengamos personal para trabajar las viñas, menos que menos vamos a tener para la cosecha y mucho menos para la pasa”, advirtió.
“Sabemos que se aproxima el final porque no es una cosa que la esté anunciando con poco espíritu para el futuro, sino que ha ocurrido en muchas partes del mundo. Esto que está pasando tiene un nombre y es ‘la maldición de los recursos naturales’. Pongan en Google y van a ver: donde se descubren recursos naturales que proporcionan mucho dinero, se produce la desgracia de las actividades que había hasta ese momento basadas en una economía de mucho menor valor”, opinó.