La producción petrolera de la OPEP aumentó en agosto a su máximo desde los primeros días de la pandemia en 2020, ya que las instalaciones de Libia se recuperaron de los disturbios y los miembros del Golfo Pérsico incrementaron su bombeo.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) bombeó 29.58 millones de barriles por día (bpd) este mes, según el sondeo, lo que supone un aumento de 690.000 bpd respecto a julio y el más alto desde abril de 2020, según una encuesta de Reuters.
La OPEP y sus aliados, un grupo conocido como OPEP+, están deshaciendo los recortes de producción realizados en 2020 a medida que la pandemia se afianzaba, aunque muchos están luchando por entregar los volúmenes completos. El bombeo ha sido inferior a las alzas prometidas por la OPEP+ durante meses.
El último incremento del acuerdo de la OPEP+ para deshacer por completo los recortes de 2020 exigía un aumento de 648,000 bpd en agosto por parte de todos los países asociados al bloque, incluidos unos 413.000 bpd de las 10 países naciones de la OPEP.
Dado que muchos productores carecen de capacidad para elevar su producción debido a la insuficiente inversión en yacimientos petrolíferos, los 10 miembros de la OPEP lograron un aumento de 300.000 bpd con respecto a julio y siguen bombeando mucho menos de lo previsto, según el estudio.
La producción de los 10 países se situó 1.4 millones de bpd por debajo del objetivo de agosto, frente al déficit de 1.3 millones de bpd de julio.
La OPEP+ tendrá una reunión la próxima semanas y las fuentes han dicho que los posibles recortes de producción propuestos la semana pasada por Arabia Saudita podrían no ser inminentes y probablemente coincidirían con el regreso de más oferta iraní en caso de llegar a un acuerdo nuclear.
La producción de Libia, uno de los miembros exentos de los acuerdos de extracción de la OPEP, registró el mayor aumento, de 400,000 bpd, al recuperarse la producción a finales de julio tras los disturbios, según el estudio.
El segundo mayor aumento, de 100,000 bpd, se produjo en Arabia Saudita, el principal exportador, aunque todas las fuentes de la encuesta, salvo una, consideraron que la producción del reino estaba por debajo de su cuota de 11 millones de bpd.
La producción nigeriana se recuperó en 50,000 bpd durante el mes de agosto, aunque bombeó 646,000 bpd por debajo de su objetivo, el mayor déficit del grupo, según el sondeo.
Irak aumentó su bombeo en 70,000 bpd gracias al incremento de las exportaciones desde el sur, mientras que Kuwait elevó su suministro de acuerdo con su cuota. Emiratos Árabes Unidos fue el único miembro de la OPEP que cumplió por completo con su alza de producción prometido.
Según el estudio, no hubo descensos significativos en la producción durante agosto. La producción de Irán y Venezuela, los otros dos productores exentos, se mantuvo estable.
La encuesta de Reuters tiene como objetivo seguir el suministro al mercado. Se basa en datos de transporte proporcionados por fuentes externas, datos de flujos de Refinitiv Eikon, información de rastreadores de petroleros como Petro-Logistics, e información proporcionada por fuentes de las compañías petroleras, la OPEP y consultores.
RECORTE DE PREVISIÓN
El mercado del petróleo registrará un pequeño superávit de 400.000 barriles diarios en 2022, mucho menos de lo previsto antes, según fuentes de la OPEP+, debido a la menor producción de los miembros del grupo.
El Comité Técnico Conjunto (JTC, por su sigla en inglés) asesora a la Organización de Países Exportadores de Petróleo y a sus aliados, liderados por Rusia, conocidos colectivamente OPEP+, sobre los fundamentos del mercado.
Antes de su reunión, el JTC había publicado un artículo en el que sugería que el excedente del mercado del petróleo ascendería a 900.000 barriles por día (bpd) en el mejor de los casos.
Tras la reunión, la cifra se situaba en 400.000 bpd, dijeron dos fuentes de la OPEP+, ya que el grupo decidió incluir en los balances las cifras de subproducción significativa de sus propios miembros.
La OPEP+ está dispuesta a recortar la producción en un contexto de volatilidad del mercado de futuros, impulsado por la escasa liquidez y la desconexión con los mercados físicos, según dijo la semana pasada el ministro saudí de Energía, el príncipe Abdulaziz bin Salman.
Cinco fuentes dijeron a Reuters que aún no se ha iniciado el debate sobre la política de producción más allá de septiembre y si el grupo recortará el bombeo.
En su última reunión, la OPEP+ acordó aumentar los objetivos de producción en 100.000 bpd para septiembre, tras deshacer los recortes récord de unos 10 millones de bpd que plasmó en 2020 para ayudar a contrarrestar el impacto de la pandemia.
La información del JTC muestra que la demanda de petróleo, que se prevé que aumente en 3,1 millones de bpd este año, enfrenta importantes incertidumbres, especialmente por el aumento de la inflación y el endurecimiento de la política monetaria por parte de los bancos centrales, lo que está afectando los presupuestos de los consumidores.
“El aumento de los precios de la energía supone otro riesgo de cara al futuro”, señala el reporte. “Esto último puede llevar a una reducción del consumo más significativa de lo que se prevé actualmente, especialmente hacia finales de año”.