LUCIANA PAZ
La segmentación tarifaria dejó tela para cortar. Por un lado, los gobernadores del Norte Grande piden por una tarifa energética diferencial en verano mientras que en la Patagonia quieren volver a la "Tarifa Comahue".
La quita de subsidios progresiva generará para el gobierno un ahorro fiscal de $47.500 millones para 2022 y de $ 455.000 millones. El proyecto de segmentación fue en respuesta a la condición del Fondo Monetario Internacional de reducir los beneficios al gas y la electricidad, entre otros.
El plan de Sergio Massa es mucho más ostentoso que el de su ex ex Martín Guzmán. En el sistema que comienza a regir en septiembre, un 30% de los usuarios no tendrán más subsidios, un 20% seguirá con tarifa social y del 50% restante pagaría tarifa plena por consumos superiores a los 400 KWh bimestrales y el resto solo un incremento menor al 30% si continúa vigente la disposición de actualizar con el 80% del CVS del año anterior, según estimaciones del ex secretario Emilio Apud.
Ahora bien, qué pasa en las provincias más alejadas de Buenos Aires. El Norte padece de veranos extremos mientras que el Sur sufre de inviernos crudos. Aunque en el caso de Formosa, Chaco, Corrientes y Misiones el tope de energía eléctrica se elevó de 400 KWh a 550, no es suficiente en provincias donde las temperaturas llegan a los 40°.
Los gobernadores del Norte Grande: Catamarca, Chaco, Corrientes, Formosa, Jujuy, Misiones, Salta, Santiago del Estero y Tucumán, reunidos en la provincia gobernada por Gerardo Morales, reclamaron por una diferenciación en la segmentación de los subsidios energéticos, especialmente en la electricidad para las provincias con mayor consumo en la época estival.
Para responder al pedido de las provincias del NOA y NEA se debería elevar el corte de KWh a 650/750 en verano, mientras que para aquellas provincias electrodependientes, es decir que no cuentan con acceso al gas, el techo debería ser de 800 KWh.
Yendo más al Sur, mucho más al Sur, en las provincias de la Patagonia la situación cambia de estación y servicio, el invierno demanda mucho más gas para pasar el frío. Qué solución encontraron: pedir el regreso de la Tarifa Comahue.
La Tarifa Comahue planteaba un diferencial para las provincias que generaban energía eléctrica en reconocimiento por el uso de sus recursos naturales, como el caso de las represas en Neuquén y Río Negro, los '90 pusieron fin a la medida y la segmentación la puso de nuevo en debate.
El vicegobernador de Neuquén, Marcos Koopmann, envió una comunicación a Alberto Fernández para que restituya este beneficio, días después el gobernador Omar Gutiérrez insistió con el presidente sobre la medida.
La tarifa diferencial para la región se remonta a la década del 60, con la sanción de la Ley N°17.318, que en 1967 creó la empresa Hidroeléctrica Norpatagónica (Hidronor), con el fin de ejecutar la construcción y operación de grandes represas para mejorar las condiciones de abastecimiento energético del país.
Recientemente, el Parlamento Patagónico sesionó en Chubut y respaldo el proyecto de Koopmann que de aplicarse daría una reducción de la tarifa de entre el 15% y el 40%. Actualmente las cuencas de los ríos Limay y Neuquén albergan las represas: El Chocón-Arroyito, Piedra del Águila, Alicurá y el Complejo Cerros Colorados (con concesiones próximas a vencerse).
Asumiendo la lógica de a Tarifa Comahue, las provincias del NEA podrían pedir una reducción en el valor de la electricidad por la cercanía a Yacyretá, o bien, de apurar el ingreso al Sistema Interconectado de los proyectos solares y eólicos de las provincias del NOA, también podría hacerse uso de este sistema diferencial por el uso de los recursos naturales.
Sólo resta hacer cumplir lo que dijo la secretaria de Energía, Flavia Royón "tarifas más justas"
