La Corte Suprema de Chile ratificó el cierre definitivo ordenado por un tribunal ambiental al proyecto de oro y cobre Pascua Lama, de US$ 8,500 millones, de Barrick Gold.
Si bien a principios de junio la Dirección General del Aguas Región de Atacama (DGA) entregó los resultados que acreditan el total cumplimiento a la normativa vigente por la fiscalización de oficio para constatar el estado y funcionamiento del sistema de manejo de aguas que opera en el proyecto minero Pascua Lama, la Corte Suprema determinó cumplir con lo establecido por el Tribunal Ambiental y proceder al cierre del proyecto.
Durante el proceso de inspecciones efectuado por la DGA, y que inició en diciembre de 2021, la autoridad sectorial pudo constatar de manera presencial que tanto las estaciones de monitoreo y plantas de tratamiento de agua se encuentran operando en óptimas condiciones, en cumplimiento de todos los índices y parámetros establecidos en nuestra legislación, permisos ambientales y sectoriales.
“No se han constatado incumplimientos a las materias que regula el Código de Aguas, por lo tanto, este Servicio no perseverará en el presente proceso de fiscalización” cita el informe fechado el nueve de junio de 2022.
Para el Gerente de Relaciones Comunitarias de Barrick Chile, Francisco Salas, “El resultado de esta fiscalización ratifica el trabajo permanente y sostenido para el cuidado de las aguas del rio Estrecho. Queremos que la ciudadanía, y en particular, nuestros vecinos de Alto del Carmen y de la provincia del Huasco estén en conocimiento que la calidad de las aguas se encuentran en total cumplimiento a la legislación”.
La fiscalización de la DGA incluyó una minuciosa revisión de registros históricos del monitoreo de las aguas que ingresan y salen del sistema de tratamiento complementado con visitas para corroborar en terreno el estado y correcto funcionamiento de las instalaciones.
La iniciativa enclavada en la Cordillera de Los Andes entre Chile y Argentina fue objeto de una extendida disputa legal debido a incumplimientos ambientales, lo que llevó a la firma a paralizarla por aumento de costos y cuestionamientos de accionistas.
El máximo tribunal “descartó infracción de ley en la sentencia, confirmando así tres cargos interpuestos en su momento por la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA)”, informó el Poder Judicial.
Entre las faltas que llevaron en el 2018 a la clausura, la SMA indicó la afectación de diversas especies de fauna y flora nativa, la monitorización incompleta de glaciares y la descarga de aguas ácidas al río Estrecho sin cumplir con las normas de calidad del agua.
En el 2020, el Primer Tribunal Ambiental había reiterado la clausura “total” que aprobó en el 2018 y además una multa por más de 7.000 millones de pesos (unos US$ 6.72 millones al cambio actual).
Organizaciones ambientalistas y comunidades locales se opusieron tenazmente al proyecto, emplazado en la región de Atacama en el norte de Chile, por considerar que disminuía la disponibilidad de agua en la zona y que había tenido impacto sobre glaciares cercanos.
LA PRESENCIA DE BARRICK EN CHILE
En Chile, Barrick tiene en operación a Zaldívar, mina de cobre a cielo abierto ubicada a 3.000 msnm, en la Región de Antofagasta un joint venture operado por Antofagasta Minerals.
En el 2015 Barrick anunció el descubrimiento del depósito de Alturas ubicado a unos 30 km al sur de la antigua mina El Indio. La compañía continúa realizando labores de exploración con el objeto de mejorar la comprensión geológica y delimitación del recurso. El depósito Alturas-Del Carmen se extiende a lo largo de la frontera de Chile y Argentina y tiene un recurso de más de 8 millones de onzas de oro extraíble mediante un proceso de lixiviación en pilas.
El Indio,en proceso de cierre, una mina de oro que cerró sus faenas a mediados de 2002. Se encuentra en el Valle del Elqui, en la Región de Coquimbo, a 4.000 metros sobre el nivel del mar.
Barrick adquirió esta propiedad en 1994, tras la compra de Lac Minerals, dueña del yacimiento en esa época y cuyo inicio de explotación se remonta a 1979. Su cierre se ha transformado en un ejemplo en el rubro, al presentar un trabajo que incluye el desmantelamiento de las construcciones, la devolución de las principales geoformas a condiciones lo más parecidas posible a las encontradas antes de la operación minera y la clausura de túneles de acceso a las faenas subterráneas, entre otras acciones.
Actualmente y luego de más de diez años de trabajo, la mina se encuentra en proceso de cierre, iniciativa pionera en Chile y que hasta ahora ha significado una inversión de cerca de US$80 millones.
A pesar de que la manera de realizar un cierre minero no estaba normada por la legislación chilena en 2002, para Barrick, de acuerdo a sus estándares medioambientales a nivel mundial, era imperativo ejecutar un programa que diera garantías de que esta operación se haría en armonía con el entorno, asegurando la sustentabilidad de las comunidades cercanas, principalmente agrícolas, así como de las ciudades de La Serena y Coquimbo.