Se trata de la licenciataria en Chile de las marcas Petrobras, Spacio1, Lubrax y Chevron. En 2021, esta distribuidora de combustible logró un EBITDA de $ 83.448 millones
MAXIMILIANO VILLENA
Fue en 2016 cuando Petrobras, luego de ocho años de operación en el país y tras adquirir Esso Chile, acordó la venta de sus activos a Southern Cross por US$ 470 millones. Desde entonces, la empresa -que pasó a llamarse Esmax- no ha hecho más que crecer.
Pero ahora, la firma de private equity liderada por Raul Sotomayor y Norberto Morita, entregó un mandato de venta a Bank of America (BofA) para ella, y de hecho dos bancos de inversión consultados aseguran que Esmax está en el mercado ya desde la semana pasada.
Se espera que las ofertas no vinculantes lleguen a fines de julio.
Southern Cross controló en Chile a La Polar, Essbio, Chilesat y GasAtacama, entre otras, y tiene hoy intereses en empresas de Brasil, Argentina y México, en rubros como telecomunicaciones, transporte, retail y energía. Desde su origen, la empresa ha levantado fondos por unos US$ 2.900 millones.
LAS CIFRAS DE ESMAX
Actualmente Esmax detalla que es licenciataria en Chile de las marcas Petrobras, Spacio1, Lubrax y Chevron, y que es la tercera mayor distribuidora de combustibles en el país, con cerca de 300 estaciones de servicio y 129 tiendas de conveniencia Spacio1, en ciudades y carreteras de Arica a Tierra del Fuego.
Adicionalmente, cuenta con 11 terminales de distribución de combustible a lo largo del territorio nacional y 11 operaciones en los principales aeropuertos.
Al cierre del año pasado su EBITDA alcanzó los $ 83.448 millones y obtuvo utilidades por $ 37.457 millones, 170% por sobre las de 2020, “gracias al crecimiento de un 41% en ventas de combustibles, 39% en tiendas y 26% en lubricantes. Es importante destacar que el 2021, ESMAX logró récords al vender más de 2 millones de m3 de combustibles y $ 104.000 millones anuales en nuestras tiendas Spacio1″, dijo en su carta a los accionistas, Juan Junet, presidente de la firma.
En el mercado estiman que si la venta se realiza según parámetros normales, es decir, entre 10 y 12 veces EBITDA, el precio debiera ser de al menos unos $ 834.000 millones -más de US$ 900 millones-.
La empresa ya había tanteado el apetito del mercado el año pasado, cuando colocó bonos por US$ 81 millones en el país a un plazo de 9,5 años, a una tasa de UF+2,45, lo que significó un spread de 220 puntos básicos.
EN 2022
Si el año pasado la empresa duplicó sus beneficios, en lo que va de este año sigue creciendo. A marzo, el EBITDA llegó a $30.731 millones, cifra 57% superior al resultado registrado durante el primer trimestre del año 2021, correspondiente a $19.590 millones.
En su análisis razonado, explicó que la variación se explica por el aumento en la actividad y en los volúmenes de venta de combustibles durante los primeros tres meses de 2022 al compararlo con el mismo periodo del año anterior; el incremento de las ventas del segmento tienda de conveniencia, y el efecto positivo en el margen por revalorización de inventarios, dado el incremento del precio de los combustibles a nivel internacional.
“Es importante mencionar que los resultados del periodo también se ven explicados por el contexto internacional y el impacto que ha tenido el conflicto entre Ucrania y Rusia en el mercado de los combustibles, que ha provocado escasez en la oferta de productos y un aumento sostenido en los precios a nivel global, lo que a nivel local se ha reflejado en un crecimiento de los precios de paridad de importación definidos por ENAP (Empresa Nacional del Petróleo) y la activación del MEPCO1 (Mecanismo de Estabilización de Precios de Los Combustibles)”, dijo en su análisis razonado.
Con esto, las ganancias de los tres primeros meses del año alcanzaron a $ 14.071 millones, cifra que se compara en forma positiva con la pérdida de $ 10.048 millones obtenida en el mismo lapso del año anterior.