Demandará una inversión de US$ 112 millones y se construirá a través de su filial Neoenergia
Iberdrola, a través de su filial Neoenergia, continúa acelerando su apuesta por Brasil. El grupo, que ha vuelto a demostrar su competitividad en una subasta muy reñida en la bolsa de São Paulo, se adjudicó la construcción y puesta en servicio de una subestación en Ibiraci, estado de Minas Gerais.
La adjudicación ha sido concedida por la Agência Nacional de Energia Elétrica (ANEEL), regulador del sistema eléctrico de Brasil, en un concurso internacional con el objetivo de atraer inversiones para mejorar y ampliar las redes de transmisión del país y en el que los precios de las adjudicaciones han sido, de media, un 66% más bajos que los previstos por el mercado.
El proyecto está compuesto por la subestación Estreito de 500.000 voltios y cuenta con tres compensadores síncronos -300/+300 Mvar. La instalación proporcionará mayor fiabilidad y flexibilidad operativa en escenarios críticos de alta importación de energía por parte de la región sudeste, además de garantizar el control del voltaje en el sistema de alta y media tensión de São Paulo, según informó Europa Press.
El plazo máximo para la entrada en operación comercial establecido por ANEEL es de 48 meses, a cumplir en marzo de 2026, aunque se espera que este plazo se adelante.
Siguiendo la estrategia, la inversión, estimada en unos US$ 112 millones, supone un aumento significativo en la generación de ingresos y amplía el área de actuación de la empresa de forma estratégica en la región sudeste. Durante la construcción del proyecto se crearán unos 1.700 empleos directos y numerosos puestos de trabajo indirectos.
Con el fin de reforzar la presencia de Neoenergia en el mercado de la transmisión, el activo adjudicado presenta sinergias durante el periodo de construcción con otros proyectos de la compañía, lo que contribuyó al estudio detallado elaborado por la empresa antes de la subasta.
La instalación proporcionará mayor fiabilidad y flexibilidad operativa en escenarios críticos de alta importación de energía por parte de la región sudeste
Apuesta por Brasil
Por medio de su filial Neoenergia, Iberdrola sigue acelerando su compromiso con Brasil. Gestiona una red de distribución de 540.417 km, que cubre una población de 34 millones de personas. Neoenergia cuenta además con más de 3.730,3 megavatios (MW) de energía renovable en funcionamiento y da servicio eléctrico a 15,7 millones de clientes.
Los nuevos proyectos de transmisión que la compañía irá poniendo en marcha en los próximos años seguirán la marca de eficiencia del grupo y producirán un rendimiento seguro para sus accionistas, manteniendo el enfoque en el negocio y generando un flujo de caja aún más predecible. Además, el grupo mantiene su trayectoria y compromiso de inversión y crecimiento en el país.
La descarbonización de la economía y la innovación digital traen de la mano redes de distribución para los nuevos modelos de consumo eléctrico. Las redes inteligentes hacen posible un nuevo mapa interconectado que responde a las necesidades de los usuarios y garantizan la incorporación de más renovables, un pilar esencial para la transición energética.
Con el nuevo plan inversor de Iberdrola, anunciado hasta 2030, el valor de los activos regulados por el grupo ascenderá a US$ 67.000 millones.
Tras la pasada adquisición de Neoenergia Brasilia, Iberdrola sigue invirtiendo de forma decidida en distribución. Este compromiso inversor no se limita a garantizar el crecimiento económico del país, sino que abarca todos los ámbitos sociales. La empresa impulsa a los suministradores locales y colabora con las comunidades en las que trabaja.
El grupo se ha marcado el objetivo a 2030 de llevar electricidad a más de 16 millones de personas que hoy carecen de acceso a esta fuente energética, dentro de su programa Electricidad para Todos. También cuenta con escuelas de electricistas, en las que busca la inclusión profesional y la equidad de género.