Aseguró que la Constitución del 80, que "se hizo durante el gobierno militar, dividió a Chile desde el primer día”.
CARLOS REYES
Como un proceso con “riesgos”, pero también con “oportunidades”, calificó esta jornada el Presidente, Sebastián Piñera, lo que será la elaboración de una nueva Constitución para Chile.
El Mandatario participó de un foro del Grupo Azvi entre Chile y España, que contó también con la presencia del exPresidente de este último país, José María Aznar.
“Yo tengo confianza de que este proceso constituyente nos llevará a un buen puerto. Y un buen puerto es una Constitución respetada, legitimada, aceptada por todos”, comenzó diciendo Piñera consultado sobre la elaboración de la nueva Carta Magna.
Agregó que “estamos conscientes de que hay riesgos, pero tenemos confianza en la sabiduría, el buen criterio del pueblo chileno”.
Sobre la elaboración y los principios básicos que debieran estar en dicho documento que será elaborado por una Convención Constitucional, Piñera dijo que esperaba se incluyera que “Chile sea un república democrática, que haya separación de poderes y, en tanto, independencia de de funcionamiento de los poderes, porque eso es fundamental para el buen funcionamiento de un Estado de derecho. Que haya un mayor compromiso del Estado con impulsar una mayor igualdad de oportunidades, con impulsar un trato más igualitario, la igualdad ante la ley, mayor dignidad, combatir con mayor eficacia los abusos”.
“Adicionalmente, que haya un orden económico en que se respeten valores fundamentales, como el derecho a la propiedad, la libertad de emprendimiento”. Y que “además de eso, resguardar ciertos derechos básicos como por ejemplo, el derecho a la salud, la educación, a la vivienda, a las pensiones. Esos son temas que vamos a tratar e acordar en esta convención constitucional”.
Previo a abordar el actual proceso constituyente, el Mandatario también explicó en el citado foro cómo es que surgió este debate de una nueva Carta Magna en Chile.
“Nosotros estamos muy comprometidos en que Chile renueve su Constitución, después de 30 años los países pueden reflexionar respecto de cómo quieren darse un marco de unidad hacia adelante. Y recordemos que la Constitución del 80, porque fue una Constitución que se hizo durante el gobierno militar, dividió a Chile desde el primer día. Desde el primer día esa fue una constitución muy cuestionada”, dijo el Presidente.
Agregó que “a pesar de que estoy consciente de los riesgos y de que yo escucho, leo, lo que plantean algunos sectores extremistas que quieren terminar con todos estos valores y principios e instaurar una utopía que no ha funcionado en ninguna parte del mundo, y donde se ha implementado ha sido un desastre que ha afectado la libertad, el desarrollo y la dignidad de las personas, y eso no lo queremos para Chile”.
“Más allá de que veo los riesgos, tengo mucha confianza. Esta Constitución tiene que aprobarse por 2/3 de los constituyentes y por tanto va a requerir un gran acuerdo”, complementó.
Piñera también fue consultado por la próxima elección presidencial de noviembre próximo en nuestro país.
En ese sentido, el Mandatario aseguró que tiene "confianza en que nuestras ideas, nuestro sector, nuestro proyecto de país, que es un proyecto de progreso con libertad, equidad, igualdad de oportunidades, va a permanecer”.
Y que “por eso yo creo que el próximo Presidente de Chile, y tengo confianza, va a ser parte de nuestra coalición”.
En tanto, al ser consultado por si tenía alguna autocrítica, el Mandatario se limitó a responder que “me critican tanto en mi país que no me obligue a ser masoquista”.
Finalmente, el Mandatario abordó el conflicto que se vive en La Araucanía, zona donde en el último tiempo se han producido diversos ataques incendiarios y tomas de terrenos.
“El pueblo mapuche no es un pueblo narcotraficante o terrorista, es un pueblo que habita nuestra país desde antes que llegaran los españoles. Los españoles creen que descubrieron América, pero no lo descubrieron, llegaron a América, lo habrían descubierto desde mucho antes los pueblos originarios”, dijo Piñera.
Y cerró que “por eso hago una distinción muy clara entre lo que son las legítimas demandas del pueblo mapuche, que por lo demás arrastran desde hace siglo, de lo que es esta violencia irracional, terrorista, que usa el narcotráfico para tratar de destruir el sistema”.