El anunciado rebrote de la pandemia y el proceso de adquisición de vacunas son otros de los rubros de alta incertidumbre
Perú acumuló 1’015,137 casos de contagio con 37,680 fallecimientos, acusando una letalidad de 3.71%. Si bien esta cifra ha bajado desde 3.82% en octubre, resulta alarmante el crecimiento de la demanda de Camas UCI – antesala de alta letalidad– que ha pasado de 1,230 en diciembre a 1,410 hasta el 8 de enero de 2021. Es decir, una tasa de crecimiento diario de 40 camas UCI en diciembre y 176 al octavo día de este año.
Las expectativas de variación porcentual del PBI para el 2020 se ubicaron en un rango de ‐12 y -10%, según el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP).
Las exportaciones en noviembre alcanzaron US$ 4,064 millones, con un superávit de 2.44%, en tanto que las importaciones fueron de US$ 3,301 millones con un incremento de 1.50%. La balanza comercial reportó un superávit de US$ 763 millones.
Los ingresos consolidados del gobierno central fueron de S/ 10,071 millones con -9.4% y los recaudados por la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) S/ 8,603 millones con -10.8%. Ambos fueron los montos más elevados durante la pandemia.
Todas estas son señales de recuperación económica más no de crecimiento.
El Cuadro 1 muestra las ganancias/pérdidas de la producción minera, el comportamiento del PBI minero y el valor FOB de la variación con respecto a noviembre de 2019.
En el undécimo mes del año, la producción minera vio caer al cobre –su metal principal– en 2.37%. El oro desaceleró su carrera notablemente deficitaria de -28,23% en octubre a -20.82%. Es decir, de una caída de -3 TMF Au a -2.2 TMF en noviembre. Esta diferencia marcará el paso en la valorización de pérdidas del mes y, con el gran avance del zinc, resultarán determinantes en la recuperación de la economía minera.
Cobre: operatividad 98%. Déficit de 5 mil TMF en volumen. Mayores productores: Compañía Minera Antamina con 43.5 mil TMF y Sociedad Minera Cerro Verde con 39.9 mil TMF.
Oro: operatividad 79%. Déficit en volumen: 2.2 TMF. Mayores productores: Minera Yanacocha con 1.11 TMF y Compañía Minera Poderosa con 0.86 TMF.
Zinc: operatividad 121%. Superávit en volumen de 23.6 mil TMF. Magníficos resultados. Los mayores Productores: Compañía Minera Antamina con 19.6 mil TMF y Volcan Compañía Minera con 11.7 mil TMF.
Plata: operatividad 88%. Continuó declinando con -11.79%. Déficit en volumen de 39.4 TMF. Mayores productores: Compañía de Minas Buenaventura con 44.3 TMF y Compañía Minera Antamina con 40.5 TMF.
Hierro: operatividad 107%. Continúa en superávit, 6.99% y en volumen 78 mil TMF. Shougang Hierro Perú responde por el 96% de la producción.
Plomo: operatividad 84%. Caída de 9.31% equivalente a 2 mil TMF. Mayores productores Sociedad Minera El Brocal con 2.7 mil TMF y Compañía Minera Chungar con 2.2 mil TMF.
Estaño: operatividad 130%. Excelente superávit de 30% equivalente a 0.5 mil TMF. Minsur responde por el 100% de la producción.
Molibdeno: operatividad 87%. Dejó de crecer. Déficit de 13% equivalente a 0.4 mil TMF. Mayores productores: Southern Perú con 1.25 mil TMF y Sociedad Minera Cerro Verde con 1.11 mil TMF.
PBI minero: operatividad 97%. Debilitado por el déficit de cobre –su mayor aportante– el valor del PBI minero de noviembre fue reforzado por los mejores valores en oro, plata, hierro, plomo y molibdeno.
Así, con S/ 6,074 millones (soles 2007), alcanzó el más alto valor del año, superando al de octubre S/ 6,030 millones (soles 2007) que quedó en el segundo lugar.
Los resultados de octubre y noviembre de 2020 confirman la recuperación de la producción minera a pesar de los inconvenientes de protocolos, procedimientos y algunos eventos sociales y políticos.
Como se aprecia en el Cuadro 1, el valor de la pérdida de producción en noviembre de 2020 alcanzó US$ 139 millones, cifra menor a la pérdida de octubre de 2020 (US$ 149 millones) que hasta entonces era la más baja durante la pandemia.
Al igual que en el caso del PBI minero, la caída del cobre fue compensada y ligeramente superada por el comportamiento de otros metales como el oro, cuya pérdida se redujo de US$ 182 millones a US$ 129 millones en noviembre.
El superávit del zinc subió de US$ 16 a US$ 44 millones, el déficit de la plata bajó de US$ 32 a US$ 26 millones y el de plomo de US$ 6 a US$ 4 millones. De esta manera, se confirmó la tendencia de los resultados económicos mineros próximos a los niveles de prepandemia.
Las cotizaciones FOB fueron determinadas según los precios internacionales y tendencias mostradas por el BCRP.
El Gráfico 1 confirma la tendencia a obtener resultados menos deficitarios que alientan la posibilidad de nivelar las cifras alcanzadas en meses de prepandemia. Noviembre resultó el menos afectado, en nivel similar a octubre. A noviembre de 2020 se ha acumulado pérdidas del orden de US$ 4,408 millones.
Según se aprecia en el Cuadro 2, la empresa que más aportó a la producción minera de noviembre de 2020 fue Compañía Minera Antamina, mayor productor de cobre y zinc y segundo en plata, con lo cual ha contribuido decisivamente a lograr el mejor mes nacional durante la pandemia. La minera acumuló un PBI de S/ 1,053 millones (soles 2007).
Luego Southern Perú, segundo en cobre y primero, holgado, en molibdeno, S/ 818 millones (soles 2007). Tercero Sociedad Minera Cerro Verde con la cuarta posición en cobre y segunda en molibdeno, S/ 676 millones (soles 2007). Minera Las Bambas cuarto con S/ 622 millones (soles 2007) a pesar de sus conflictos.
Noviembre fue un mes con cifras de contagios y fallecimientos por Covid-19 a la baja, pero la tendencia alcista del número de camas UCI conllevan una situación de alarma e incertidumbre mayor.
Los mejores resultados de producción minera y valorización de pérdidas indican una pronta vuelta a los niveles de prepandemia. Sin embargo, la conflictividad social en regiones mineras y a nivel nacional, constituyen un riesgo para esa posibilidad.
Resulta imprescindible por un lado mantenerse atento al anunciado pronto rebrote del Covid-19 y nueva cepa para actuar en consecuencia y, por otro, propiciar y mantener el Estado de Derecho y la paz social.
No obstante los resultados positivos en la recuperación económica nacional, resulta conveniente hacer referencia a la situación de crisis política y social iniciada el 9 de noviembre pasado. Esta crisis continuó sostenidamente y hoy la presidencia del país se encuentra en manos de Francisco Sagasti, cuarto presidente en el periodo 2016 – 2021.
Esta situación ha afectado gravemente el accionar del Poder Ejecutivo cuyos más altos funcionarios han cambiado con una frecuencia nunca vista, con la consecuente remoción y reemplazos en los niveles de ejecución. La doble elección de representantes al Congreso de la República en el mismo periodo, en mi opinión, no ha significado una mejora en el accionar del Poder Legislativo.
Estos hechos, aunados a la grave incertidumbre originada por la pandemia, no representan de manera alguna un atractivo para la inversión privada. En el caso de la minería, la inversión en noviembre mostró un déficit de 38.3% y en el acumulado alcanzó -31.1%.
Si consideramos que los proyectos de Anglo American, Marcobre y Chinalco se encuentran en la fase de no retorno y constituyen el 51% de la inversión minera, en el acumulado a noviembre, el resto tuvo una contracción mucho más alta: 43%. Se precisa invocar a los poderes y altas instituciones del Estado peruano un esfuerzo de conciliación y colaboración que permita restituir el principio de autoridad y respetar y hacer respetar el Estado de Derecho, dentro de un marco de acatamiento absoluto de nuestra Constitución, asegurando la vuelta a la normalidad y al ambiente de paz social; y atender con alta eficiencia la problemática sanitaria originada por la pandemia del Covid-19.
La comitiva del gobierno y los dirigentes de Velille (Chumbivilcas, Cusco) alcanzaron acuerdos que permitieron el desbloqueo del corredor vial sur. Un grupo de agricultores de las provincias cusqueñas de Canchis y Anta bloquearon la carretera Cusco-Puno y Cusco-Abancay, en apoyo al paro agrario de 24 horas convocado por la Junta de Usuarios de Riego.
En Quispicanchi, con piedras y palos, también interrumpieron el paso de vehículos. Las juntas de usuarios solicitaron al Ejecutivo la activación del seguro agrario ante los desastres naturales.
De otro lado, los agricultores de Chincheros bloquearon la vía que comunica la provincia de Andahuaylas con Ayacucho y Lima.
En resumen, el ambiente social y político continúa calentándose y conlleva un alto grado de incertidumbre.