La minería sigue siendo uno de los principales motores de desarrollo y crecimiento económico del Perú. Al cierre del 2018, las exportaciones mineras (metálica y no metálica) del país sumaron US$ 29,451 millones, lo que representó más del 60% del valor total exportado.
En la última edición del Boletín Estadístico Minero, el Ministerio de Energía y Minas (MEM) informó que durante el año pasado las exportaciones metálicas sumaron un total de US$ 28,823 millones, significando así un crecimiento de 6.1% en comparación al año anterior.
La tendencia positiva se mantuvo en la mayoría de los metales, destacando las exportaciones de cobre, oro y zinc, que alcanzaron crecimientos de 8.4%, 3.3% y 7.9%, respectivamente. Cabe destacar que la exportación de estos productos representó más del 50% del valor total exportado y más del 70% del valor total de exportaciones mineras.
En tanto, el valor de las exportaciones de minerales no metálicos también mostró un crecimiento consistente, al registrar un incremento de 7.1% al término del 2018 y sumar en valor US$ 628 millones, afirmó el MEM.
La inversión minera alcanzaría los US$ 7.000 millones con los proyectos cupríferos Quellaveco, ampliación de Toromocho, Mina Justa, entre otros, informó el Área de Estudios Económicos del BCP.
El Área de Estudios Económicos del BCP decidió mantener su proyección de crecimiento de la economía peruana en 3.7% para el año 2019. Según indicaron, esta cifra implica un crecimiento de 4.1% del gasto privado y una caída en la inversión pública de 5% debido al cambio de autoridades subnacionales.
El último reporte semanal macroeconómico del BCP estima que el crecimiento de la economía se desaceleraría a un rango entre 3.5% y 4% durante el primer trimestre del 2019. Además, consideran que el sector pesca no volverá a tener un aporte positivo como el observado en el cuarto trimestre del 2018.
Así, con un crecimiento entre el 3% y el 3.5% durante el primer semestre, la economía nacional necesitaría expandirse entre 4% y 4,5% durante el segundo semestre de este año para alcanzar la meta del 3,7%.
Las variables que permitirán alcanzar dicho crecimiento son: la evolución de la inversión privada, en particular la no-minera, la cual deberá alcanzar tasas de crecimiento superiores al 5%; un crecimiento sostenido del mercado laboral con tasas superiores al 4%; un impacto nulo de los fenómenos metereológicos sobre las temporadas de pesca de anchoveta; así como una moderación de la contribución negativa de la inversión pública.
Por otro lado, la inversión privada será uno de los principales motores del crecimiento económico, asociado a las inversiones cupríferas en los proyectos Quellaveco, Mina Justa, ampliación de Toromocho, entre otros, que generarían que la inversión minera alcance los US$ 7,000 millones al cierre del 2019.
El avance de los proyectos como la ampliación del aeropuerto Jorge Chávez, el Puerto de Chancay, el Puerto de Salaverry, también impulsará el crecimiento económico, explicaron.