Licitan 'in extremis' derechos de perforación en zonas de gran importancia natural en el Ártico
El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, hasta en sus últimos momentos como mandatario sigue impulsando polémicas políticas, que esta vez repercuten al medio ambiente, y se deben al anuncio de su gobierno sobre la apertura de concesiones de petróleo y gas en el refugio ártico de Alaska, un hecho que es señalado por muchos como una grave agresión a la naturaleza.
La concesión de permisos está previsto que tenga lugar justo antes de que Trump entregue el poder al demócrata Joe Biden, una instancia que está consignada para el 20 de enero. La medida del actual presidente se contrapone con quien continuará en el cargo, quien ha mostrado públicamente su oposición a la apertura del Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico, en Alaska, a la explotación petrolera.
A través del Registro Federal, la Oficina de Administración de Tierras pidió a las compañías identificar los lugares en los que están interesadas para la prospección y posible explotación de hidrocarburos en los cerca de 6 mil kilómetros cuadrados del refugio a lo largo de la costa del océano glaciar Ártico. En agosto, la administración del magnate republicano anunció la aprobación de un plan para abrir el Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico a la exploración y explotación de petróleo, pese a la oposición de las organizaciones medioambientales.
Si no existe una instancia judicial que impida el proceso, probablemente el 6 de enero se concederán estos derechos de extracción en la zona. Desde el Departamento de Interior de Estados Unidos confirmaron el procedimiento de venta por subasta. Aunque el Congreso designó en 1980 la franja costera de la reserva, en el nordeste de Alaska, para posibles explotaciones petroleras, el Refugio del Ártico ha sido territorio vedado para las perforaciones a pesar de los esfuerzos de cuatro décadas de los republicanos por abrirlos a las empresas petroleras.
Dicho plan preveía que la primera licitación de concesiones se llevaría a cabo el 22 de diciembre de 2021, por lo que el anuncio del Gobierno supone acelerarlo para antes de la entrega del poder al equipo de Biden. Organizaciones iniciaron procesos judiciales El refugio de vida silvestre es hábitat de especies como los osos polares y los renos.
Toda esta situación ha generado que diversas organizaciones ecologistas, juntos con los pueblos originarios de Alaska, pidieran hoy a un tribunal federal de Estados Unidos el impedimento a la administración de Trump de vender los derechos de extracción de petróleo y gas en el Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico el próximo mes.
Los grupos ambientalistas y originarios han presentado una solicitud a un juez de Anchorage, en el sur de Alaska, para que emita una orden preliminar que evite la subasta de petróleo y gas que planea el Departamento de Interior. Ante el intento de frenar el plan de la Administración Trump, el portavoz del Departamento de Interior, Ben Goldey, ha asegurado que "no es sorprendente que estos grupos de interés especial y los que presentan solicitudes frecuentemente traten de detener un programa de desarrollo energético ordenado por el Congreso".
Se refiere a la orden que emitió el Congreso estadounidense de mantener dos ventas de arrendamiento de petróleo del refugio ártico para 2024 para intentar recaudar dinero que compensase los recortes de 2017. Las empresas e inversores que quieran participar tienen hasta el 31 de diciembre para presentar ofertas selladas de al menos 25 dólares (unos 20 euros) por acre, unos 4 mil metros cuadrados aproximadamente.