El Instituto Americano del Petróleo informó un aumento de inventario de 7.544 millones de barriles
Las reservas comerciales de petróleo crudo en Estados unidos subieron la semana pasada para sorpresa de los analistas, en tanto que las de gasolina bajaron, y el petróleo cerró estable.
El barril de Brent del mar del Norte para entrega en setiembre terminó a 44.29 dólares en Londres, 3 centavos por debajo del cierre del martes.
En tanto en Nueva York el barril de WTI para el mes de setiembre, en su primer día como contrato de referencia, perdió 2 centavos a 41.90 dólares.
El martes las cotizaciones de los barriles de referencia alcanzaron máximos desde marzo.
Según el informe semanal de la Agencia estadounidense de Información sobre Energía (EIA), las existencias de crudo aumentaron 4.5 millones de barriles (mb) al 17 de julio para quedar en 536.6 mb, mientras los analistas esperaban un descenso de 2.2 mb.
"Algunas refinerías sufrieron imprevistos que limitaron el ritmo de actividad", observó Andy Lipow, de la firma Lipow Oil Associates.
Las refinerías estadounidenses funcionaron a 77.9% de su capacidad frente a 78.1% de la semana anterior. Por otra parte, las importaciones, que cayeron la semana pasada, volvieron a subir y pasaron de 5.56 millones de barriles diarios (mbd) a 5.94 mbd.
Las exportaciones también aumentaron: de 2.54 mbd a 3.00 mbd. De su lado, las reservas de gasolina bajaron 1.8 mb, en línea con lo esperado por el mercado.
Los stocks de productos destilados (como el carburante para calefacción y el combustible para avión) subieron por su parte 1.1 mb, algo más de lo que proyectaba los analistas. La producción estadounidense de petróleo, que caía desde hace un mes, también subió a 11.1 mbd (100,000 barriles más por día que el registro anterior).
Este modesto aumento "no sorprende, tomando en cuenta que los precios del barril volvieron a ubicarse por encima de los 40 dólares y que varias empresas anunciaron que reactivarían su producción", observó Lipow.
"El alza es bastante pequeña si se compara con la caída de 2 mbd con relación a los niveles de mediados de marzo" -cuando la pandemia de coronavirus reinante comenzó a golpear a Estados Unidos-, destacó Lipow.
"La reactivación de la producción petrolera debería ser débil hasta fin de año, en particular por el número históricamente bajo de plataformas de extracción en actividad", precisó este experto.
En el plano de la demanda, los estadounidenses consumieron una media de 17.9 mbd en las últimas cuatro semanas. La cifra es algo inferior a la de la semana anterior y representa 14.6% menos que en igual período del año pasado.
"La demanda debería continuar progresando en Estados Unidos en las próximas semanas ahora que las autoridades alientan seriamente medidas como el porte de mascarillas para limitar la propagación del virus", destacó Bart Melek, de TD Securities.