El interés que se cobra en los proyectos de producción de hidrocarburos es del 20% en comparación al 3% que se cobra para los de energía verde
VÍCTOR BLANCO MORO
Las renovables llevan años ya haciéndose hueco en el sector de la generación de energía, hasta el punto de que el año que viene serán ya el principal foco de inversión en esta industria, superando por primera vez la cantidad de dinero que se destina a proyectos de producción de petróleo, según los cálculos de Goldman Sachs, quien estima que el año que viene más de un 25% de toda la inversión en capital (Capex) que se dedique a la producción energética estará centrada en fuentes renovables.
"La energía renovable será el mayor área de inversión en capital en la industria de la energía en 2021, según nuestras previsiones, superando a los proyectos de producción de petróleo y gas por primera vez en la historia", destaca el banco estadounidense en su informe Carbonomics, el motor verde de la recuperación económica.
Aunque queda camino por delante, este es un hito importante en el camino del ser humano hacia un desarrollo más sostenible y se conseguirá gracias a la rebaja que se está produciendo en el coste de financiación para los proyectos de energías renovables, mucho más baratos que lo que cuesta financiar un proyecto destinado a la producción de petróleo.
Según destaca Goldman, el tipo de interés que se está cobrando para quienes piden prestado para realizar proyectos de producción de hidrocarburos es del 20%, muy por encima del 3% que se cobra para los proyectos de energía verde, lo que hace que esta inversión gane mucho atractivo.
"El creciente compromiso de los mercados de capitales en cuanto al cambio climático está generando este enorme cambio en la distribución de los recursos, forzando el pago de entre 40 y 80 dólares la tonelada para los nuevos proyectos de hidrocarburos, según nuestras estimaciones", explica el banco, e indica también cómo el número de resoluciones relacionadas con el cambio climático se ha duplicado desde al año 2011 en las juntas de accionistas.
Goldman cree que el auge de la inversión en producción de energía con fuentes renovables es una realidad que ha venido para quedarse, y para la próxima década, hasta el año 2030, esperan que se lleven a cabo proyectos por valor de entre 1 y 2 billones de dólares anuales, con el potencial de crear entre 15 y 20 millones de nuevos puestos de trabajo en todo el mundo en este periodo.
Y es que los proyectos de infraestructuras para la generación de energía renovable son más intensivos en fuerza laboral, incluso hasta 3 veces superiores por unidad de energía producida, según los cálculos del banco, y es por ello que estos proyectos "requieren un marco regulatorio estable y atractivo y un menor coste de capital", explica Goldman.
Goldman Sachs señala que "la industria de petróleo es la que más está experimentando la presión de los accionistas, con un 30% de las propuestas relacionadas con el cambio climático".
La inversión en proyectos de petróleo cae más del 60%, según el banco, desde el pico de gasto que se tocó en el año 2014. Las grandes petroleras están rotando hacia las renovables cada vez más rápido, con un 14% del presupuesto estimado para 2021 dedicado a esta fuente, frente al 4% de 2019.