El alto tribunal dijo que las 31 toneladas de oro en disputa entre Caracas y la dirigencia opositora por ahora continuará en las bóvedas del Banco de Inglaterra
La Corte Suprema británica dio una victoria parcial al líder opositor venezolano Juan Guaidó frente al presidente Nicolás Maduro, al reenviar a fuero comercial el caso del oro del país caribeño guardado en el Banco de Inglaterra y cuyo control se disputan ambos.
“No podrá saquearlo”, celebró en Twitter el líder opositor, quien añadió que “el oro de las reservas internacionales continuará protegido en el Banco de Inglaterra”.
“Continuaremos dedicados a ejercer nuestro deber constitucional de proteger los activos de la República, para las generaciones futuras y promover elecciones presidenciales libres y justas en Venezuela, con el propósito de poner fin al sufrimiento del pueblo venezolano y rescatar nuestra democracia”, señaló.
Tras juzgar que los tribunales británicos no pueden contradecir al Poder Ejecutivo, que considera a Guaidó como presidente interino, “queda saber si los fallos emitidos por la Corte Suprema de Venezuela pueden ser reconocidos aquí. El caso es reenviado al Tribunal de Comercio”, afirmó el alto tribunal en un comunicado.
La Corte Suprema aseguró de todos modos que “los tribunales británicos se negarán a reconocer cualquier veredicto de una jurisdicción extranjera, como los de la Corte Suprema de Venezuela, si entran en conflicto con nuestra política nacional”, que incluye reconocer a Guaidó como presidente.
Ambas partes designaron comités de gestión del Banco Central de Venezuela (BCV), “que han dado instrucciones divergentes sobre las reservas internacionales del país” depositadas en el Banco de Inglaterra. El BCV nombrado por Maduro quiere recuperar las toneladas de oro depositadas en el banco británico, pero por ahora no puede acceder por el reconocimiento de Londres de Guaidó.
Autoproclamado presidente interino en 2019 con el apoyo de Estados Unidos, Guaidó es considerado el presidente interino por unos cincuenta países que, por ende, no reconocieron la reelección de Maduro en 2018.
En 2020, el BCV recurrió a la Justicia británica, que inicialmente falló a favor de Guaidó, pero el tribunal de apelaciones anuló la sentencia y el bando del opositor decidió llevar el caso ante la Corte Suprema.
Los abogados de Maduro argumentan que Gran Bretaña reconoce efectivamente su presidencia, en particular en las relaciones diplomáticas. Según ellos, el oro depositado en el Banco de Inglaterra podría, entre otras cosas, ayudar a financiar la lucha contra el Covid-19.
Según los datos oficiales, Venezuela, de 30 millones de habitantes, registró 440.000 contagios y más de 5000 muertos de coronavirus. Tanto la oposición como algunas ONG acusan al poder de falsear las estadísticas.
El gobierno de Guaidó asegura en cambio que el dinero se usaría para reprimir el pueblo o llenaría los bolsillos de una “cleptocracia”.
La situación es ambigua: como Estados Unidos, Gran Bretaña no reconoce la legitimidad del nuevo Parlamento y reitera su apoyo a Guaidó, que no tiene poder en el país. Pero al mismo tiempo, Gran Bretaña mantiene una embajada en Caracas, aunque con relaciones diplomáticas reducidas.