Advierte que la medida de Las Bambas afectará el empleo y que los escándalos de corrupción han dañado la credibilidad del Ejecutivo
Roque Benavides es uno de los empresarios cuyo nombre se asocia más a la actividad minera en el Perú. Desde su perspectiva, advierte el riesgo que supone la paralización de las operaciones de Las Bambas y observa con preocupación los recientes escándalos de corrupción en la gestión de Pedro Castillo.
El presidente del directorio de Buenaventura también ha transitado por la actividad gremial empresarial y la academia, y ahora lo hace por el Colegio de Ingenieros, pues en noviembre fue elegido decano del Consejo Departamental de Lima (CDLima) para el periodo 2022-2024.
- Ante el anuncio de la minera MMG sobre suspender la producción de cobre de Las Bambas por el bloqueo de vías, ¿qué impacto prevé que tenga esto en la minería y en la economía?
- El impacto en la economía será de una reducción del crecimiento de 2% del PBI, que es lo que representa la producción de Las Bambas. El mayor impacto negativo lo tendrán los pobladores de esa región. Ahí es donde más puestos de trabajo se perderán.
- Hace unos días usted mencionó, en el contexto del cierre de minas que dispuso la premier Mirtha Vásquez, que había un sesgo político por parte de ella contra la inversión. ¿Se refería solo a la inversión minera o a la inversión privada en general?
- Ella (la premier) es parte de la ONG Grufides y seguidora del señor Marco Arana, conocidos antimineros. Es una abogada que conoce perfectamente la legislación minera; lo que ella dijo en Ayacucho no tiene sentido. Tiene un cargo tan importante como ser primera ministra, es abogada, y dice algo así, debe tener motivaciones de otra índole y esas motivaciones son políticas. Y por supuesto son antimineras y nosotros –conociendo las bondades del sector minero– no podemos sino levantar nuestra voz de alerta, tanto es así que ha tenido que retractarse.
- Si hablásemos de designaciones de funcionarios para cargos técnicos, por ejemplo, en el caso del Ministerio de Energía y Minas hubo nombramientos en las últimas semanas de personajes vinculados a Perú Libre. ¿Cree que se está dando una politización en cuanto a la designación de funcionarios para cargos técnicos en los ministerios?
- Definitivamente, cuando la señora primera ministra nombra al señor Sánchez, que también es parte de Grufides, es evidente que el Estado peruano estaba contratando con amiguismo y con sesgo. ¿De dónde viene tal o cual ministro? No puede ser que se nombre a un señor como Sánchez, que, como digo, viene de las canteras de Grufides y también ha demostrado ser un claro antiminero. Y así hay otros nombramientos.
El solo hecho de que este gobierno en 90 o en 100 días haya tenido dos gabinetes, que haya perdido tantos ministros que no resistían el menor análisis, y que todavía haya otros tantos que están muy cuestionados, no cabe la menor duda; creo que muestra que acá hay una carencia de capacidad para elegir buenos ministros. Nuestra patria merece la mejor gente en los puestos públicos, no la gente mediocre o sesgada.
- Luego de que el gobierno desistiera del cierre de las cuatro minas, ¿cree que puede haber una ligera mejoría en cuanto a las señales que pueda dar el Ejecutivo en favor de la inversión o considera que este último caso solo fue parte de las intermitencias de la actual gestión?
- No lo puedo decir. La verdad es que este gobierno, en estos primeros ciento y pocos días, ha sido incoherente y errático. Y creo que los errores políticos se pagan políticamente. Yo no veo que el error político de la señora Vázquez haya sido pagado. Yo pensaba que esto significaba la caída de la primera ministra.
- ¿Y considera que esta incertidumbre va a ser la nueva normalidad con la que el empresariado va a tener que aprender a convivir?
- No puedo hablar por todo el empresariado. Lo que sí puedo decir es que me parece que no nos corresponde quedarnos callados y que el sector empresarial tiene que producir. Y en lo que a mí respecta, yo seguiré pronunciándome. No se puede soslayar lo que ha sucedido en Ayacucho, que ha generado mucho daño a una empresa como Hochschild, que está listada en la Bolsa de Londres. Definitivamente la señora primera ministra ha hecho un gran daño a la industria.
Y es interesante también destacar que el señor ministro de Energía y Minas no asistió a esa reunión y que no haya dicho nada al respecto. Salió con un comunicado aclarando esencialmente con palabras dulces, pero diciendo que no estaba de acuerdo. Entonces lo primero que tiene que haber en un gobierno es coherencia y no la estamos viendo.
- ¿Usted ve con buenos ojos que el Congreso cite al presidente Pedro Castillo a que rinda cuentas?
- Ahí hay dos aspectos, ¿no? Los nombramientos de las cúpulas militares, este donde hubo evidentemente irregularidades y lo del señor Bruno Pacheco, que ha quedado demostrado con los 20,000 dólares (incautados por la Fiscalía) y los 20,000 soles (que le fueron depositados por un chofer del Despacho Presidencial), que parece que fuera de 20,000 sin perjuicio de la moneda.
Todo eso tiene que ser aclarado. Y junto con eso, el video donde se muestra al profesor Castillo asistiendo a reuniones a medianoche, cuando en el fondo él vive en Palacio. La verdad es que creo que esas cosas (los escándalos) le hacen mucho daño a la credibilidad del Gobierno.
- ¿Qué tan probable ve que el Perú aproveche el alto precio del cobre o que quedemos fuera de ello?
- La industria minera es de largo plazo. Si bien yo digo que los precios de los metales nos puedan ayudar en este momento, lo que tenemos que hacer es un permanente esfuerzo por renovar la producción minera y eso se logra con nuevos proyectos. Desde 1969 cuando comenzó Cuajone, hasta que se comenzó a desarrollar Yanacocha en 1993, pasaron 24 años.
Y durante esos años no se desarrolló otro gran proyecto minero. Se perdieron dos décadas. Eso es lo que nosotros no queremos que vuelva a suceder. No queremos repetir las décadas del 70 y del 80, que fueron décadas perdidas. El Perú lo que necesita es ir poniendo en valor todos los proyectos que se pueda y si es que en su momento los precios nos acompañan, pues enhorabuena, hay que entender que el cobre es el metal del futuro.
El metal del medio ambiente, el metal que se va a utilizar en las energías alternativas como la eólica, la solar y para los vehículos eléctricos. Nuestra patria es el país que tiene más proyectos mineros de cobre en el mundo, más que más que Chile, más que Australia, más que Canadá, lo que no podemos es seguir perdiendo tiempo.
- El Ejecutivo ha estado buscando que se le otorguen las facultades delegadas en materia legislativa. Y entre las medidas, la reforma tributaria hace énfasis también en el sector minero. El ministro de Economía asegura que aún hay un campo de acción para gravar al sector…
Hay dos aspectos. Uno es que cuando la economía está recesada, como es lo que tenemos en este momento, necesitamos reactivarla. Lo peor que se puede hacer es crear nuevos impuestos o incrementarlos. En el caso de la industria minera, hoy día ya existe un impuesto que se incrementa dependiendo del aumento de la utilidad operativa, que está íntimamente ligada al precio de los metales. El señor Francke dice que porque los precios están altos, hay que cobrarles más a las empresas mineras. Esos comentarios generan inestabilidad (…).
- ¿Cómo está el Perú en el tema de impuestos?
- Hoy en el Perú, las empresas mineras pagamos más impuestos que en Canadá, Australia, Chile, países con los que competimos. Lo que nosotros necesitaríamos es que haya más estabilidad política. En eso no estamos a nivel de los otros países, ni en cuanto a conflictividad social.
Tampoco estamos a nivel competitivo en cuanto a la infraestructura que necesita la industria minera para desarrollarse. Así que creo que hay otros aspectos en los cuales el señor Francke debería abocarse, como que sean bien utilizados los recursos tributarios y que no haya toda la corrupción que estamos viendo.
- Hay una serie de megaproyectos que están paralizados, que deberían ser destrabados. ¿Cuáles son prioritarios?
- Te sorprenderá que mencione primero un proyecto agrícola. Yo soy 50% trujillano. Mi madre nació en Trujillo y para mí Chavimochic III es un proyecto que no debería estar paralizado. Es un proyecto que se paralizó por el escándalo del caso Lava Jato. Está al 80% de avance.
El reservorio de Palo Redondo se está deteriorando y la verdad es que, por esas incompetencias, esos absurdos jurídicos, no se puede terminar esa obra que daría trabajo a cientos de miles de agricultores de La Libertad, Cajamarca y Lambayeque. Es inconcebible que ese proyecto esté paralizado. Veo con gusto que Majes Siguas se haya estado movilizando.
- Y hay varios proyectos mineros…
- No podemos dejar US$56,000 millones en proyectos mineros paralizados. El Perú necesita reactivar su economía y la industria minera responsable, esa que cuida el medio ambiente, que genera desarrollo social y que contribuye económicamente a nuestro país, debe ponerse de pie y, por supuesto, poner en valor esos proyectos.
- ¿Cuáles están paralizados?
- Me parece inconcebible que proyectos como Michiquillay, en Cajamarca, no se hayan desarrollado. Tenemos proyectos en el sur, como Zafranal, otros en Lambayeque, como el proyecto Cañariaco o La Granja.
Hoy, el cobre se cotiza a precios altos, podría ser un impulsor de la reactivación económica y de la generación de puestos de trabajo. Hemos calculado que si se pusieran en valor los US$56,000 millones de proyectos mineros, se generarían 2.3 millones de puestos de trabajo.