El vidrio está entre los productos que escasean como consecuencia de la crisis de suministro y por una incipiente escasez de arena. Falta de vidrio pone en vilo a bodegas del mundo
Hay una enorme falta de botellas de vino en prácticamente todo el mundo. Las bodegas no pueden embotellar ya que las productoras de envases no dan abasto.
Una de las causas más evidentes es la crisis en la cadena de suministro que que se remonta al inicio de la pandemia de coronavirus en 2020, cuando las duras restricciones para frenar los contagios llevaron a una fuerte caída en la demanda y en la actividad económica, poniendo frenos a la producción. También se registraron importantes cierres en puertos y fábricas debido a brotes de casos.
El defectuoso funcionamiento de la cadena de suministro a nivel mundial está produciendo retrasos en las entregas y escasez de determinadas materias primas y productos, así como incrementos en los precios de compra de determinados bienes e incluso desabastecimiento de algunos de ellos.
La primera consecuencia que la pandemia tuvo en la cadena de suministro fueron paradas intermitentes en la producción en fábricas que operaban en China, a principios de 2020, extendiéndose posteriormente este efecto a la escala global, con la consiguiente escasez en existencias de materias primas, productos semielaborados y productos terminados.
CRISIS DE ARENA
Y otra, no tan visible, es la falta de arena que viene afectando al mundo desde principios del 2021. La arena es la sustancia principal que se utiliza en la construcción de carreteras, puentes, trenes de alta velocidad e incluso en proyectos de regeneración de tierras. La arena, la grava y la roca trituradas se funden para hacer el vidrio que se usa en cada ventana, pantalla de computadora y teléfono inteligente, incluso la producción de chips de silicio utiliza arena.
El problema es que el mundo se enfrenta a una creciente escasez con menos de 1.000 minas de arena y grava en Estados Unidos, principal nación que provee este recurso.
La escasez de arena, grava y roca triturada persitió durante la mayor parte de la última década, impulsada por el creciente desarrollo de edificios y la demanda de teléfonos inteligentes y otras tecnologías personales que utilizan pantallas.
Pascal Peduzzi, científico climático del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma) se lamentó durante un seminario web organizado por un grupo de expertos denominado Chatham House: “Simplemente, pensábamos que la arena está en todas partes”
“Nunca nos imaginamos que nos quedaríamos sin arena, pero está comenzando a suceder en algunos lugares”, añadió Peduzzi, al mismo tiempo que adelantó: “Se trata de anticipar lo que puede suceder en la próxima década porque, si no miramos hacia adelante, si no anticipamos, tendremos problemas masivos sobre el suministro de arena pero también sobre la planificación del territorio”, según informó CNBC.
La falta de vidrio es motivo de especial preocupación durante la pandemia, dados los miles de millones de viales y jeringas necesarios para que las vacunas lleguen a los brazos de todo el mundo.
La industria del vidrio médico recién comenzaba a ponerse al día con la demanda en 2020, pero la pandemia y el posterior lanzamiento de vacunas han retrasado considerablemente las cosas.
El funcionario, quien es director de la Base de Datos de Información de Recursos Globales (GRID) del Pnuma en Ginebra, dijo que entrar en pánico no ayudará, “pero es hora de echar un vistazo y cambiar nuestra percepción sobre la arena”. Chatham House, también conocido como el Instituto Real de Asuntos Internacionales, es una organización no gubernamental, sin ánimo de lucro, con sede en Londres, que ha descrito los esfuerzos para mejorar la gestión de los recursos de arena como “desiguales”.
Esto se debe en parte a características geológicas y geográficas únicas, pero también a diferencias en las manifestaciones locales del “desafío de la arena”, la demanda nacional y regional de recursos de arena, así como a las capacidades para hacer cumplir o implementar procedimientos de evaluación de mejores prácticas, prácticas extractivas, requisitos de gestión y restauración, sostuvo la entidad en un comunicado en su sitio web.
Según el Pnuma, aproximadamente entre 40.000 y 50.000 millones de toneladas métricas de arena se utilizan cada año solo en la industria de la construcción.
IMPACTO EN LAS BODEGAS DEL MUNDO
BODEGAS DE ARGENTINA DISCONTINÚAN PRODUCTOS, BUSCAN ENVASES ALTERNATIVOS Y RECHAZAN PEDIDOS
EL CRONISTA/NURIA REBÓN
La falta de provisión de botellas para vinos en el mercado local, lejos de solucionarse, se agravó aún más en el último tiempo.
El incendio que registró hace casi dos meses la fábrica de Verallia , en Mendoza, que aportaba casi la mitad de las botellas al mercado, terminó de complicar la situación, a tal punto que importantes bodegas debieron discontinuar productos , cambiar formatos y colores de envases e , incluso, rechazar ventas a canales antes de las Fiestas .
En general, la mayoría trata de reservar estos envases para los vinos de mayor gama, que dejan más rentabilidad , y evalúan cómo resolver el problema implementando algunos cambios en los menores gama.
El problema , que ya se hizo notar el verano pasado pero se agravó con el paso de los meses. Y, si bien, la cristalería nacional Cattorini Hermanos , que aportaba casi la otra mitad de la demanda local, sumó un horno adicional recientemente para ampliar la fabricación de botellas, la falta a todas las bodegas, desde las grandes hasta las chicas.
Y como Verallia tiene previsto parar algunas de sus máquinas en enero y febrero, por parada técnica, se estima que estos envases escasearán aún más.
"La capacidad de producción de botellas no va en línea con la demanda de la industria. La escasez comenzó hace un año y medio, pero el incendio de Verallia, hace dos meses, lo agravó y no pueden aumentar rápidamente la producción, eso lleva tiempo . Faltan de 20% a 30% de las que necesita la industria ", descrito El Cronista Eduardo López, presidente de Bodegas López, una empresa familiar centenaria, que produce más de 9 millones de litros al año.
Si bien la mayoría salió a buscar botellas en países de la región , fueron pocas las posibilidades de importar, ya que hay escasez en América latina, pero también a global , tras el crecimiento de la demanda durante la pandemia.
De hecho, Bodegas de Argentina se reunió con el secretario de Industria, Ariel Schale para solicitar al Gobierno que se eliminen en forma temporal los aranceles a la importación y la tasa de estadística, que le agrega un 13% al costo de ingresar botellas al país , según comentó Francisco Do Pico, vicepresidente de esa cámara del sector .
"Quedaron en analizarlo. Las bodegas de otros países también están padeciendo la misma restricción, excede a lo local. Siempre se opera al límite del abastecimiento de botellas , es una industria que requiere mucha inversión para ampliar capacidad. Estimamos que van a faltar entre 50 y 100 millones de botellas en los próximos 12 meses " , agregó Do Pico.
Al respecto, Sergio Villanueva, gerente de la Unión Vitivinícola (UVA), otra cámara del sector, explicado que se venden unas 1000 millones de botellas al año y están faltando entre 20 y 30 millones por mes .
"En todo el mundo faltan envases de vidrio. Hubo un acuerdo del Gobierno de Mendoza y del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) con Cattorini para proveer 2 millones de envases a bodegas chicas, a las que les cuesta más acceder a esos envases. Muchas empresas salieron a buscar botellas afuera y están importando , a un costo más alto que el local, pero faltan en el mundo y tampoco es fácil conseguirlas. Por eso, algunas bodegas están tratando de utilizar, para algunos productos, envases alternativos, como la lata o el Bag in box, aunque aún los consumidores no son tan abiertos a cambiar de envase, especialmente en este último, que no conocen ".
La escasez genera un aumento mayor de los precios de las botellas, por una mayor demanda a la oferta disponible. "Los valores aumentaron un 15% por encima de la inflación y eso incide en los precios al público, en un contexto donde el poder adquisitivo está muy golpeado, y se evidencia en la caída del consumo este año , no sólo contra 2020, cuando había crecido mucho por los nuevos hábitos en pandemia, sino frente a 2019, cuando el precio relativo del vino era bajo frente a otras bebidas " , descrito Villanueva.
De hecho, entre enero y septiembre, se redujo un 13,2% el consumo de vino en el país, con una baja de 10,7% en botella, sobre todo por el mayor retroceso de las Magnum (de 1000 a 1500 cm3) , que cuestan conseguirse, con una caída de 26,2%, mientras que las tradicionales de 650 a 750 cm3 avanzaron un leve un 1%, según datos del INV.
En tanto, los tetra-brik disminuyeron 18%, pero, por otro lado, crecieron otros envases alternativos a la botella: los Bag in Box (cajas de 3 a 5 litros, con una bolsa de vacío en su interior que impide que el vino se oxide y una válvula por la que se sirve) treparon un 94,6%, from una base chica; y las latas, nada menos que un 75,7% , al sumar más oferta de marcas y variedades, con nuevos lanzamientos.
Bodegas López, una empresa familiar nacida en 1898 que elabora más de 9 millones de litros, con marcas de $ 160 (Vasco Viejo) a $ 1600 (Montchenot), es una de las tantas afectadas.
"Por la escasez, hace una semana comenzamos a distribuir en los canales nuestro vino Vasco Viejo en botellas bordelesas de 750 ml, en el lugar de las botellas tipo borgoña de 700 ml. En las que se vendía. Como ahora llevan un 7% más de vino, tenemos que ajustar el precio, y eso afecta al bolsillo del consumidor. Pero, además, quienes consumen vinos más económicos son más sensibles a los cambios; si se modifica el envase, duda que sea el vino que siempre toma, por eso decidimos comunicarlo ", explicado Eduardo López, su presidente.
"Tampoco se consiguen botellas para tapa a rosca, porque se producen menos ante los faltantes. Usábamos ese tipo de cierre para la mayoría de los blancos, ahora tuvimos que lanzarlos a la venta con corchos. Estamos usando las botellas que la cristalería nos quiere entregar , del color y formato que ellos quieren , lo cual afecta a la imagen de las marcas ", agregó.
Bodegas López debió discontinuar, además , algunos productos. "Vamos a dejar de vender las botellas de 375 ml. De Vasco Viejo y Traful en 10 días . Tratamos de mantener ese envase para las líneas de mayor precio, porque hay pocas", descrito.
Al respecto, desde Familia Zuccardi y Santa Julia también admitieron que están teniendo demoras en la entrega de estas botellas de 375 ml. , lo que les algunos produjeron quiebres de stock en ese calibre, pero aclararon que esperan solucionarlo hacia fines de noviembre.
Con respecto a los envases de consumo individual, Bodegas López vende, además, la marca Traful también en lata, pero no puede reemplazar las botellas pequeñas por este envase de aluminio, porque, aclaró el empresario, " no todos los consumidores están preparados para aceptarlas . Los argentinos somos muy clásicos a la hora de tomar vino ".
Como si fuera poco, la bodega debió incluso rechazar pedidos de canales, por no poder cumplir con las entregas , justo antes de fin de año, el momento de mayor demanda. "En 20 días, nos vamos a quedar sin stock para espumantes , justo para las Fiestas. Estamos rechazando pedidos de López Extra Brut porque no podemos entregarlos, no hay suficientes botellas. Estamos perdiendo ventas por este tema puntual , no por precio o calidad, sino por falta de insumos ", advirtió.
La bodega neuquina Malma, más chica, también es otro ejemplo de los problemas que vive el sector y de las estrategias utilizadas en un intento de sobrellevar la situación.
"Tuvimos que cambiar algunos modelos de botellas conseguimos las de 530 gramos, para vinos Reserva, chino de 450 gr., algo que parece mínimo, pero en términos de logística y Técnicos complica Mucho. Para algunas marcas (las mas económicas), estamos pensando en lanzarlas en Bag in box en el corto plazo, para guardar las botellas para marcas de mayor precio, porque estamos viendo que el problema está lejos de solucionarse ", advirtió Pedro Soraire, director de Exportación Bodega Malma, una empresa patagónica que cuenta con una capacidad anual para 1,8 millones de litros, y comercializa vinos de $ 800 a $ 4500.
Los Bag in box son cajas de tres a cinco litros de vino , que en su interior contienen una bolsa de vacío , que se contrae mientras se sirve el vino, sin permitir el ingreso de aire, lo que impide su oxidación . El vino se sirve en copa a través de un pico vertedor.
En 2015, muchas bodegas lanzaron vinos de calidad en este envase, que ya era utilizado en exportación, pero finalmente los proyectos no prosperaron para el consumo hogareño -aunque sí para servir en copa en locales gastronómicos-, ya que los consumidores no lograron entender de qué se trata.
Este año, los despachos en Bag in box crecen fuerte, un 94,6% , alentados por la reactivación de la gastronomía pero, también, por el faltante de botellas, para el consumo en el hogar.
La escasez de vidrio y el precio del cartón amenazan la recuperación de las bodegas en España
ABC
Como una tormenta perfecta. Así define el sector vitivinícola la nueva amenaza que se cierne sobre su actividad en pleno proceso de recuperación tras el golpe del Covid-19.
El encarecimiento de los costes de producción por la subida de la tarifa eléctrica, la crisis internacional del transporte, el ‘boom’ del consumo, el desabastecimiento de materiales y la subida desorbitada de productos por el desequilibrio entre la oferta y la demanda ponen sobre las cuerdas a las bodegas del marco Montilla-Moriles.
Recién acabada la vendimia, los viticultores se encuentran con la paradoja de que tienen vino más que suficiente pero no vidrio para embotellar sus caldos. Para colmo, la falta de cartón, empleado para el envasado del vino en ‘packing box’, tras la reactivación del sector y la apertura del canal Horeca (bares, restaurantes y cafeterías) ha provocado la subida de este material hasta tres veces en los dos últimos meses.
Esta situación, ya constatada en otros sectores como el de la construcción, es ahora cuando golpea a las bodegas, que se ven sin materias primas para afrontar los pedidos de cara a las próxima campaña navideña, donde el consumo será mayor. Actualmente, según las fuentes consultadas, van al día a día. Las alarmas se han activado ante la preocupación de que esta situación se prolongue en el tiempo y agote el stock del que disponen, lo que obligaría a parar temporalmente la producción y cortar puntualmente el suministro al canal Horeca.
«Todavía es pronto para hacer valoraciones, es una situación muy reciente», añade el gerente de Cooperativa la Aurora, Antonio López. En su caso particular, a principios de octubre se quedaron sin botellas para una determinada marca de vino, un diseño procedente de Italia. «Tuvimos que llamar al cliente para comentarle la situación y ofrecerle un embotellado diferente si no quería tener que esperar más de un mes para su pedido», apunta López.
‘Boom’ del consumo
En el caso del cartón existe un desequilibrio entre la oferta y la demanda, que ha tenido su repercusión en el encarecimiento del material de un 40 por ciento. Así lo explica el gerente de Bodegas Robles, Francisco Robles, quien apunta que «el precio ha experimentado tres subidas en dos meses». El coste de la tarifa eléctrica a su juicio, también debe haber influido en el alza de este material puesto que toda la industria está afectada por la subida de los costes de producción. En el caso de Bodegas Robles el vino que se embotella o envasa en formatos tipo tetra brik supone el 90 por ciento de toda la producción. «En nuestro caso hemos sido previsores y compramos hace meses todo el cartón para todo el año conscientes de que iba a haber problemas con el suministro y tensiones con los precios», indica Robles.
Para el gerente de Bodegas Toro Albalá, Francisco Muñoz, «esta situación durará tres o cuatro meses, hasta que se estabilice el consumo, ya que ahora mismo hay un boom mundial en la hostelería de todo el mundo, con un consumo desenfrenado». Su bodegas cuentan con acopio de material para hacer frente a los pedidos diarios, pero no a los de dentro de mes y medio. «Si no llegan los nuevos materiales que tenemos encargados tendremos problemas», afirma Muñoz. El gerente de Toro Albalá mostró su preocupación porque esta situación derive en una subida de los tipos de interés. «Eso supondrá la caída de inversiones, porque un préstamo no se puede devolver de un día para otro ni se pueden cambiar las reglas del juego de golpe», sentenció.