Frente a la situación ocasionada por los cortes en Neuquén, las productoras de hidrocarburos advirtieron que no podrán cumplir con el Plan Gas.Ar y que podría faltar gas no sólo en el invierno, sino en los próximos días, particularmente en la zona del área metropolitana de Buenos Aires.

Los empresarios nacionales y extranjeros aseguran que los piquetes impactan en forma directa sobre el Plan GasAr, que busca potenciar la producción para garantizar el abastecimiento durante el próximo invierno.

Las pérdidas que rondarían entre US$ 10 y 12 MM diarios en Vaca Muerta, según fuentes de la industria. Debido a la falta de distribución de combustible y petróleo para refinerías y estaciones, en Neuquén ya son 53 las estaciones sin stock o al límite del quiebre.

La mayor dificultad es el retraso en la perforación de nuevos pozos, enganche y construcción de la infraestructura de superficie, señalaron desde una de las principales operadoras del país. Así, se contabiliza una pérdida de 1 millón de metros cúbicos día de gas y más de US$10 millones acumulados, que pronto escalarían a al doble.

A partir de mayo, el gas en boca de pozo que compran la mayoría de las empresas en la Argentina llegará con aumentos que irán de entre 20% y 100%, según cada caso, lo que significará una suba en las facturas cercana al 70% a partir de los consumos de mayo, que se abonan entre junio y julio.

Este incremento ya les fue comunicado informalmente por las productoras o comercializadoras a algunas empresas, debido a que los contratos vigentes en la actualidad tienen como fecha de vencimiento el 30 de abril. En un mercado en el que, salvo la demanda residencial y un ínfimo número de pequeñas empresas, el precio del gas está desregulado, las nuevas tarifas llegarán más abultadas.

Según confiaron a La Nación fuentes de la industria, hay un dato claro y concreto: el gas para las empresas aumentará el 1° de mayo. “La dimensión del aumento no está definida aún, pero se estima que el millón de BTU (unidad de medida que utiliza el sector) no podrá costar menos que lo que ya acordaron las productoras con el Gobierno para cumplir con el Plan Gas, es decir 3,80 dólares”, afirmaron.

El precio de referencia del Plan Gas.Ar fue de u$s 3,50 promedio por millón de BTU en el bloque base (igual durante los 365 días del año) y de u$s 4,70 entre mayo y septiembre, por lo que el ponderado anual ronda los u$s 3,80. Es el costo que las industrias pagarán también desde el próximo mes, confirmó a este medio una fuente fabril.

Mientras tanto Argentina está preparada para duplicar  sus compras de gas natural licuado (GNL) en el mercado spot este invierno, en un intento por evitar un déficit.

Las importaciones al puerto de Bahía Blanca están suspendidas desde 2018, con la esperanza de poder cubrir cualquier déficit con su propio gas de esquisto, pero la nación planea reanudarlas el próximo mes. 

A los bajos precios y la pandemia que han ralentizado las nuevas perforaciones se le suma el bloqueo a las rutas de Neuquén que retrasa los trabajos y el inicio de tareas. En suma, lo que ha provocado una escasez de combustible y la posterior decisión del gobierno de aumentar las importaciones para el invierno en el hemisferio sur.

La estatal Integración Energética Argentina (IEASA) ha convocado una licitación por 13 embarques para entrega entre mayo y agosto a Bahía Blanca, donde una nueva unidad flotante de almacenamiento y regasificación (FSRU) estará estacionada durante casi 100 días a partir de fines de mayo. La empresa ya había comprado 24 cargas parciales para entregar durante el mismo período a su otra unidad FSRU en el río Paraná.

Si la última licitación se adjudica en su totalidad, los volúmenes de importación de GNL de invierno de Argentina desde el mercado spot se duplicarán con creces en comparación con el mismo período del año pasado, cuando el brote de Covid-19 perturbó la economía del país. Eso lo convertiría en uno de los mercados spot de GNL de más rápido crecimiento este año, informó Bloomberg.