En base al último reporte del Instituto Peruano de Economía (IPE), la reanudación de las unidades de gran minería -correspondientes a la Fase 1- continúa consolidándose mientras que, la hidrocarburos sufre un retroceso.
En la décimo cuarta semana de aislamiento social obligatorio, nuestro país se convirtió en el sexto en el mundo con mayor número de contagios pese a que el número de casos nuevos se redujo respecto a la semana anterior. Entre el lunes 15 y el viernes 19 se registraron 3,638 casos diario promedio, una reducción de 28% respecto al promedio entre los mismos días de la semana anterior. Sin embargo, esta disminución se debió, en parte, al menor número promedio de pruebas realizadas diarias, el cual se redujo 25% entre ambas semanas. Se observa que esta reducción se dio, principalmente, en el número de pruebas rápidas (-29%), mientras que las moleculares lo hicieron en menor medidas (-1%).
En el plano económico, la información reportada de algunos sectores señala un mejor desempeño de la actividad durante el mes de mayo, tras un mes de paralización total. No obstante, pese a que se espera una mayor actividad en junio, la capacidad productiva aún está lejos de alcanzar los niveles pre COVID-19. Por un lado, las restricciones operativas desacelerarían la recuperación del empleo, mientras que, por otro, la contracción de la demanda dificultaría la reactivación de la economía.
El Ejecutivo amplió la lista de actividades económicas en los rubros de manufactura, comercio y servicios como parte de la Fase 2 de reactivación. Según señala el Decreto Supremo N° 110-2020-PCM, cerca de 37 mil empresas reanudarían sus actividades generando así más de 162 mil puestos de empleo. En particular, destaca la reapertura de centros comerciales y conglomerados al público con restricciones de aforo, como, por ejemplo, Gamarra, el cual, al 2017, albergaba más de 33 mil empresas que empleaban cerca de 80 mil trabajadores. Asimismo, el Ejecutivo anunció que la próxima semana se evaluará el decreto para la aprobación de la Fase 3 que daría pase al reinicio de operaciones de nuevas actividades económicas a partir del mes de julio, informó IPE.
En el sector minero, si bien se señala que aún no existen cifras preliminares de producción, la alta demanda de electricidad es un indicador positivo de la reanudación de las actividades.
En ese sentido, la información del Comité de Operación Económica del Sistema Interconectado Nacional (COES), señala que el consumo diario promedio en Yanacocha -principal productor de oro- se ha recuperado en las últimas semanas.
Además, mientras que, entre los meses de abril y mayo, el consumo promedio medido en la subestación de La Quinua, en Cajamarca, fue de 8.2 MWh; durante el mes de junio este promedio ha sido de 19.7 MWh.
Ese consumo -según señale el IPE- ha sido mayor, inclusive, al observado durante la primera quincena de marzo (17.6 MWh), antes del inicio de la cuarentena.
También se observa un incremento en la demanda de electricidad de Cerro Verde, principal productor de cobre.
El consumo diario promedio de esta empresa en el mes de junio, medido en una de las celdas de la subestación Socabaya, en Arequipa, ha sido de 92.3 MWh. Lo que constituye más de dos veces el consumo durante los meses abril y mayo (36.7 MWh). Aún así, aún no alcanza la demanda diaria de electricidad anterior a la cuarentena.
Por otro lado, el IPE señala que el sector de hidrocarburos, en la semana de entre el 11 y 17 de junio, se ha reducido significativamente respecto a los siete días previos.
La producción de gas natural disminuyó 28% debido al menor procesamiento en los lotes 56 y 57, destinados a la exportación. Se menciona que, en particular, las operaciones en el lote 57 se han paralizado desde el 9 de junio.
Además, la menor extracción de gas ha sido acompañada de una reducción de 3% de la producción de líquidos de gas natural (LGN), principalmente por la paralización de la producción en el lote 57.
La menor producción en estos lotes – según el IPE- se ha debido, a una menor demanda por hidrocarburos y a una paralización temporal de la planta de licuefacción de Perú LNG a inicios de junio debido a problemas climáticos que afectaron las descargas para exportación.
Para mitigar el efecto sobre la producción de LGN, se ha aumentado la capacidad de reinyección de gas natural en el lote 56, por lo que la producción proveniente de este lote se ha venido recuperando.
En el caso del lote 88, destinado al consumo de gas en el mercado interno peruano, el procesamiento de gas natural en la última semana se redujo ligeramente (-0.4%) respecto a la anterior.
El IPE menciona que el caso específico del petróleo crudo, la producción en la primera quincena de junio ha caído 32% respecto de la segunda quincena de mayo.
La extracción promedio pasó de 31 mil barriles diarios entre el 16 y 31 de mayo a 22 mil barriles diarios entre el 1 y 15 de junio. Esta disminución se ha debido, en parte, a una paralización temporal del lote X entre los días 10 y 13 de junio.