La Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya definió que la frontera marítima entre el Perú y Chile se inicie en el hito número 1 y se proyecte en paralelo hasta las 80 millas marinas y marca una línea equidistante hasta 200 millas. El fallo respeta la postura chilena de una frontera marírtima en paralelo desde el Hito Uno, pero marca una diferencia en su extensión. Con este fallo, la corte le otorga al Perú una zona marítima a la que no se tenía acceso.