Esta semana, Bruselas analizará cómo minimizar los costos posibles de la crisis Ucrania-Crimea-Rusia en la provisión de gas natural a la comunidad de países europeos. La UE y Rusia se encuentran en una situación de interdependencia energética, en particular con respecto al gas natural, consecuencia de las infraestructuras existentes de gasoductos que atraviesan el territorio ucraniano para su transporte hacia el resto de Europa.