China y el sudeste asiático representan la mayor amenaza comercial para la industria del acero. La Asociación Latinoamericana de Acero (Alacero) publicó un comunicado haciendo foco en la importancia de una integración regional que permita apuntalar la industria y hacerle frente a la competencia desleal de China, como consecuencia del acero subsidiado.
"La sobreproducción de China inunda los mercados internacionales a través de prácticas de comercio desleal". En el 2000, se exportaba 90.000 toneladas de acero laminado y semiacabado chino a Latinoamérica, para 2024 ya eran 14.200.000 de toneladas.
"Es necesario un diálogo comercial basado en la integración regional. Sin medidas coordinadas, nuestra cadena de valor, formada por 1,4 millones de personas, está en riesgo", destacó Alacero.
Las empresas productoras de acero de América Latina no pueden competir con el acero subsidiado de China, esto tiene graves consecuencias: Suspensión de operaciones, despidos y cierres de planta.
América Latina tiene la oportunidad histórica de establecer una cadena de abastecimiento regional coordinada en las Américas, en la que la industria del acero tenga un rol protagónico por su capacidad de producción con una de las menores huellas de carbono del mundo, por su innovación y tecnología avanzada, por contar con el talento que trabaja en procesos cada vez más eficientes.
"Desde el Alacero reafirmamos nuestro compromiso de trabajar junto a la industria, gobiernos y comunidades para lograr fortalecer la cadena de valor del acero, coordinar alianzas comerciales efectivas e impulsar el diálogo y defender el empleo y el desarrollo regional", concluyó el comunicado.