Con una convocatoria exponencial, Argentina Oil & Gas Patagonia abrió sus puertas y permitirá conocer el presente y el futuro de la industria que promete reforzar la llegada de inversiones e impulsar los nuevos proyectos que darán al país autosuficiencia energética y una balanza económica positiva.
Ernesto López Anadon, presidente del Instituto Argentina de Petróleo y Gas (IAPG), apuntó en su discurso que “este es el evento que mejor representa a nuestra industria en la Argentina. En cada edición esta exposición va creciendo, sinónimo del crecimiento del sector. Se cubrieron todas las plazas de hospedaje y hemos calculado que el impacto económico de este evento en la ciudad de Neuquén y alrededores es cerca de $5000 millones”.
Argentina se nutre de la idea de potencialidad de sectores clave como el petróleo y gas pero es tiempo que la concreción se acelere .“Siempre hablamos del enorme potencial de Vaca Muerta y de las demás cuencas de Argentina. Es un potencial que hay que hacerlo realidad. Lamentablemente, lo venimos haciendo a un ritmo lento”, remarcó López Anadón.
Esto puede cambiar, hoy el país tiene la tecnología, la gente, las empresas y es altamente competitivos. "Si nos miramos con otras cuencas del mundo, quizás no estén tan preparadas como nosotros en toda la cadena de valor que tenemos".
“Vaca Muerta tiene mucho potencial, pero también hay mucho potencial en el mundo. Guyana, Arabia Saudita y Estados Unidos. Acá con un enorme esfuerzo y tratando de superar obstáculos que tiene la industria se logró a 400.000 barriles por día. Si nos medimos cómo fue el round-up de la producción en otras cuencas, hoy deberíamos estar produciendo un millón o un millón y medio de barriles por día. Necesitamos recorrer un camino que es tres veces lo que tenemos”.
Agregó que “La industria requiere de tiempo y esfuerzo y eso se logra necesariamente con planes de largo plazo. Hay que tratar de homogeneizar las normas para evitar que cada región o cuenca tenga costos adicionales por falta de estandarizaciones. Espero que realmente sea el camino, que flexibilicemos las normas que nos permitan llegar o superar los 1.5 millones de barriles, que nos permitan dejar de hablar del potencial de Vaca Muerta y pasemos a hablar de la realidad de Vaca Muerta”,
“Debemos crecer sustentablemente. La demanda de gas y petróleo va a durar más de lo que se está proyectando”, manifestó y consideró que "no solo se compite con otras cuencas, sino que en la medida que esas cuencas sean más eficientes, más productivas, con menores costos que nosotros, a medida que la presión sobre el mercado a reducirse sea mayor porque ingresan otros sistemas de energía, los que van a quedar afuera van a ser los menos competitivos".
"Hay que evitar generar costos que la industria no tiene por qué afrontar. Hay que tratar de flexibilizar las normas, hay que tratar de homogeneizar las normas en todo el país para evitar que cada sector, cada pequeño sector o cada pequeña cuenca tenga costos adicionales por falta de estandarizaciones, por falta de un hilo común que las una a todos los fabricantes, productores de servicios y demás de todo el país".
Y concluyó que el RIGI como un buen comienzo para crecer y llegar a ese millon de barriles que permite dejar el potencial de lado y transformar a Vaca Muerta en una realidad.