AXEL MANCINI
El embajador de Chile en Argentina, José Antonio Viera-Gallo, participó en la 6° Convención CEMA “Business as Usual vs. Business Sustentables”. Durante su intervención en el panel "Experiencia Internacional en Mecanismos para Lograr el Cambio Climático", coordinado por Claudio Farabola, CEO de la Eurocámara Argentina, y Mirta Govoni, vicepresidenta del Consejo Profesional de Ciencias Económicas, Viera-Gallo expuso los esfuerzos de Chile en la transición energética y su compromiso con el Acuerdo de París.
El embajador comenzó destacando los desafíos que enfrenta Chile en su plan de descarbonización, el cual está proyectado para 2050. “Chile tiene un compromiso de descarbonización para el 2050. Habíamos fijado 2040, pero no fue posible”, indicó, resaltando el avance del país en la producción de energía renovable, principalmente eólica y solar.
Además, hizo referencia a la colaboración energética con Argentina: “Es importante para la transición energética los cinco gasoductos que tenemos con la Argentina”, comentó, subrayando la necesidad de un cambio normativo que permita un mayor flujo de gas entre ambos países.
Sobre el Acuerdo de París, el protagonista reafirmó el compromiso de Chile y destacó los avances del país en la implementación de sus mecanismos. Explicó que Chile ha adoptado un sistema de comercio de emisiones de carbono y bonos verdes desde 2019, que permite a las empresas comprar y vender derechos de emisión, contribuyendo a mitigar los gases de efecto invernadero.
También mencionó la implementación gradual del artículo 6º del Acuerdo de París, que incentiva la colaboración internacional en la reducción de emisiones, un proceso que aún está en desarrollo en Chile.
En cuanto a la electromovilidad, Viera-Gallo destacó los esfuerzos chilenos para alcanzar el 100% de transporte público eléctrico para 2040. “Hoy día la ciudad de Santiago es una de las ciudades líderes en electromovilidad del sector público a nivel mundial”, afirmó, reconociendo también iniciativas similares en Buenos Aires.
El hidrógeno verde y el litio también jugaron un rol central en su presentación. El embajador señaló que Chile, al igual que Argentina, está avanzando en la producción de hidrógeno verde como una fuente clave de energía limpia. Además, resaltó la importancia del litio y el cobre, fundamentales para la electromovilidad, y mencionó la renovación del convenio binacional minero entre ambos países.
En relación con la minería sustentable, Viera-Gallo subrayó los esfuerzos de Chile para minimizar el impacto ambiental de esta industria. “Nos empeñamos mucho en que haya una minería sustentable. Y eso supone desafíos climáticos, hídricos y de uso del agua”, explicó, mencionando la colaboración con empresas argentinas para la construcción de plantas desalinizadoras en el norte de Chile, cuyo suministro de agua podría eventualmente beneficiar a la minería argentina.
Por otra parte, se refirió a los instrumentos financieros utilizados por Chile para incentivar prácticas sostenibles, como el impuesto verde implementado en 2014 y el sistema de comercio de emisiones de carbono desde 2019.
El impuesto verde está en Chile desde 2014. Se trata de un mecanismo que grava las emisiones de gases contaminantes como el material particulado, dióxido de carbono, óxido de nitrógeno y dióxido de azufre provenientes de grandes fuentes emisoras. “Este impuesto ha incentivado a las empresas a buscar fórmulas de producción más limpias”, afirmó el embajador, subrayando que esta política ha sido un paso clave para reducir las emisiones y promover tecnologías más sostenibles en el país.
Para concluir, Viera-Gallo reflexionó sobre los desafíos actuales que enfrenta Chile en la implementación de políticas ambientales. “Hay una tensión muy fuerte entre el cuidado del medio ambiente y la necesidad del desarrollo económico”, señaló, destacando la importancia de encontrar un equilibrio entre ambos objetivos para garantizar un futuro sostenible.