China, donde se procesan la mayoría de esos minerales, es con diferencia el mayor socio comercial del país
MICHAEL J. KAVANAGH
China y la República Democrática del Congo están discutiendo una financiación de US$ 7.000 millones en el marco de un acuerdo renegociado de minerales por infraestructuras, según destacó el presidente Felix Tshisekedi en su segundo discurso de investidura en la capital, Kinshasa.
Tshisekedi ha estado presionando para que se reestructure un contrato de 2008 entre ambos países por valor de US$ 6.200 millones, que según él ha proporcionado pocos beneficios al Congo. El acuerdo original prometía US$ 3.000 millones en proyectos de infraestructuras pagados con los ingresos de una mina de cobre y cobalto conocida como Sicomines.
Aunque la mina ha funcionado durante años, menos de un tercio del dinero destinado al desarrollo se ha desembolsado, según el gobierno del Congo.
Tshisekedi declaró que una nueva iniciativa de infraestructuras para abrir el enorme país se financiaría "gracias a la próxima asignación de fondos de la dotación obtenida en el marco de la renegociación del proyecto Sicomines y que debería alcanzar un importe total de US$ 7.000 millones".
El Congo es el segundo país africano por superficie y es profundamente pobre a pesar de sus enormes riquezas minerales, incluidos metales clave para la energía verde como el cobre y el cobalto. China, donde se procesan la mayoría de esos minerales, es con diferencia el mayor socio comercial del país.
La embajada de China en el Congo no respondió inmediatamente a dos correos electrónicos en los que se le pedían comentarios el sábado, fuera del horario normal de oficina.
Tshisekedi juró su cargo para un segundo mandato de cinco años ante decenas de miles de seguidores y más de una docena de jefes de Estado africanos en el estadio nacional del Congo.
El presidente obtuvo más del 70% de los votos en las elecciones del 20 de diciembre, que se vieron empañadas por retrasos que prolongaron la votación durante días. Los líderes de la oposición han rechazado los comicios y han convocado protestas para el sábado.
Pero la comunidad internacional ha aceptado en gran medida los resultados, dado el margen de victoria de Tshisekedi y la tranquilidad general de las elecciones.
En su discurso, Tshisekedi también prometió reducir la inflación, estabilizar el tipo de cambio y ampliar la industria para crear empleo en el país. Más del 62% de los casi 100 millones de congoleños viven en la pobreza, según destacó el Banco Mundial.