LUCIANA PAZ

En el escenario de un ajuste económico, la desregulación y medidas de urgencia para contener la crisis, las tarifas de gas  están dentro del paquete que impactará en los ciudadanos. Con precios atrasados, las distribuidoras presentaron ante Enargas sus propuestas de subas para la audiencia que se realizará el 8 de enero.

Un aumento que ronda los 350% que empezará a regir en febrero también podría incluir un mecanismo automático de actualización en base a la inflación mayorista. El 8 de enero será la audiencia pública número 104 para definir las nuevas tarifas del gas.

Según un informe del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), dependiente de la UBA y el Conicet, los principales subsidios económicos  a los sectores Agua, Energía y Transporte tuvieron en noviembre un crecimiento acumulado anual del 79,1% a.a. respecto de igual periodo del año anterior y por lo tanto su variación real muestra una reducción del 17,5% a.a. en el período, para el caso de energía se redujeron un 19,9% a.a.

Las empresas de distribución de gas plantearon al Enargas que necesitarán una recomposición de tarifas desde febrero de al menos el 350%, en promedio, en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), considerando que los precios estuvieron congelados.

CUÁNTO PIDIÓ CADA UNA

Utilizando como antecedentes distintas variables: precios congelados, escenario externo (e interno) de crisis, cambios en los precios internacionales, paralización de las obras por el GPNK, las distribuidoras presentaron sus propuestas para la revisión tarifaria.

Metrogas: 376,5%

Naturgy: 473%

 Redengas (Entre Ríos): Desde marzo, 481%

Camuzzi Gas Pampeana: 421%

Camuzzi Gas del Sur: 543%. 

Gasnor:  438% y 704%

Ecogas (Córdoba, La Rioja, Catamarca) 126%

Transportadora Gas del Sur (tgs): 567%

Transportadora Gas del Norte (TGN): 573%

ASIGNACIÓN CAPACIDAD DEL GASODUCTO NORTE

En el marco de los pedidos al Enargas, Metrogas detalló los criteros de asignación de la capacidad de la Reversión del Gasoducto Norte. Según la distribuidora, 

Soliciataron revocar la Resolución 532/23 y proceder a la resolución del contrato que se apruebó entre ENARSA y CAMMESA (en el caso de que se hubiera efectivamente celebrado), a fin de resguardar el normal abastecimiento de las áreas licenciadas de distribución y encauzar el accionar de la licencia de transporte al régimen que le es propio, la Ley 24.076.

La presentación de Metrogas, define que "se debe contemplar en el proceso de RTI convocado por el DNU 55/2023, el rebalanceo integral del sistema de transporte considerando la infraestructura existente más la incorporada y a incorporar por el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (“GPNK”), más la reversión del gasoducto Norte, hasta su capacidad prevista total".

En la transición y para el 2024, la capacidad del GPNK debe ser priorizada para el abastecimiento de las distribuidoras, considerando sus obligaciones de gas y transporte para la demanda prioritaria y de transporte para la demanda no prioritaria.

Según el polémico Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023, presentado días antes de la Noche Buena y que entrará en vigencia a finales de diciembre, la realidad de la infraestructura del gas es mucho mejor en comparación con la eléctrica pero no es los suficientemente estable. A medio camino de finalizar las obras del programa Transport.Ar, el país debe asegurarse el gas para pasar el invierno.

La resolución detalla que disponibilidad del gas natural importado desde Bolivia ha ido disminuyendo drásticamente año tras año, pasando de cantidades comprometidas en firme para el invierno de 2020, de 18 MMM3/d a un máximo de 5 MMM3/d promedio mensual para el año 2024.

Esta situación se verá agravada a partir de agosto de 2024 en virtud de que el compromiso de abastecimiento en condición firme, de YPFB con ENARSA se convierte en provisión interrumpible por parte del proveedor, pudiendo llegar a ser cero. Cabe destacar que la adenda que llevó al acuerdo se da en el marco de las obras por el GNK que darían a Argentina el abastecimiento energético para prescindir del gas de Bolivia. Con la obra pública frenada sólo se encuentran en evaluación las ofertas por al reversión del Norte. 

Frente a este estado de situación, la resolución determina que "colocan en condiciones de alto riesgo de desabastecimiento de gas natural y energía eléctrica a los usuarios del centro y norte del país, habida cuenta de que las principales centrales termoeléctricas e industrias radicadas en dicha región dependen del gas importado desde Bolivia para poder generar energía y no tienen como alternativa la posibilidad de utilizar combustibles líquidos".

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