La ministra de Minería de Chile, Aurora Williams, participó en el Foro de Minería y Sostenibilidad de las Américas, organizado en alianza por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Foro Intergubernamental sobre Minería, Minerales, Metales y Desarrollo Sostenible (IGF), allí reflexionó acerca del valor de generar políticas públicas mineras basadas en el diálogo.
“El mundo está viviendo un proceso de cambio climático cuyas consecuencias para el planeta, los territorios y las comunidades tienen que ser enfrentadas por los países, con sentido de urgencia y el deber de tomar acciones que transformen los modelos de desarrollo productivo en el mundo, para transitar hacia economías resilientes, de bajas emisiones de carbono y basadas en el uso de energías renovables”, sostuvo Williams.
Para ello, la secretaria de Estado explicó que “este desafío requiere de mejores y nuevas tecnologías, requiere de innovación, de nuevas capacidades humanas y junto con ello, demanda también, la necesidad de acelerar la producción y asegurar el suministro de minerales variados como el litio, el cobre, el cobalto o las tierras raras”.
Durante el evento, que coincidió con la realización de la XIII Conferencia Anual de Ministerios de Minería de las Américas, con Chile como país anfitrión, la autoridad resaltó el hecho que ambos eventos se llevaran a cabo en Santiago.
“No es casualidad que estas dos instancias se hayan dado cita en Chile, precisamente, para abordar el desarrollo de la industria a partir de un tema tan relevante como lo es la geopolítica de los minerales estratégicos", agregó.
"Conversar respecto de las estrategias de colaboración en torno a estos recursos, críticos para el mundo desarrollado y claves para economías emergentes que pueden contribuir con su oferta minera, es fundamental para orientar esta contribución al progreso de las sociedades humanas para alcanzar la anhelada transición energética”, explicó.
Junto con destacar “la oportunidad que se presenta a la minería chilena y regional, así como a sus encadenamientos productivos, como agentes de cambio para explorar y avanzar en mejores prácticas operacionales o ambientales que permitan construir vínculos o puentes capaces de reducir la fricción social que, muchas veces, implica desarrollar actividad minera en los territorios”, Williams llamó a la reflexión acerca del valor de generar políticas públicas basadas en el diálogo.
“Sin base social – agregó – no vamos a construir la minería que queremos, porque los escenarios han cambiado. El mundo y la sociedad han cambiado. Por eso, hoy como, nunca antes, tenemos que abrir espacio a la creatividad, a la osadía, para enseñarle al mundo que podemos adaptarnos, que podemos hacer cosas en sintonía con los desafíos globales que el nuevo contexto nos exige”, explicó.
La jornada contó además con la intervención de Pablo Angelelli, jefe de operaciones del BID en Chile, quien manifestó que “la distribución geográfica de los minerales críticos está altamente concentrada por lo cual hay una notable dependencia de un reducido número de países en lo que respecta a la extracción y el procesamiento de estos minerales y metales".
"Esta situación, con implicancias geopolíticas y comerciales importantes, ofrece al sector minero de América Latina una verdadera oportunidad estratégica de maximizar sus ventajas y contrarrestar sus efectos adversos. La gestión y el aprovechamiento responsable de estos recursos por parte de los países de la región no solamente potenciaría el crecimiento económico general, generando más empleos y fomentando la inversión extranjera y aportando significativamente a las arcas fiscales nacionales, sino también situaría a la región como un actor destacado en las industrias emergentes y sostenibles del futuro”, agregó.