Exxon Mobil se centrará en la extracción de litio preparándose así para un futuro menos dependiente de la gasolina.
El gigante petrolero, con sede en Texas, compró recientemente los derechos de perforación en un terreno de Arkansas, al sur de EE.UU., desde donde pretende producir el mineral, según informó The Wall Street Journal.
Exxon compró 120.000 acres brutos (unas 48.562 hectáreas) en la formación Smackover, del sur de Arkansas, a Galvanic Energy por más de US$ 100 millones de dólares. La petrolera podría comenzar a perforar en los próximos meses.
Esta nueva apuesta de la empresa, de acuerdo con las fuentes con las que pudo hablar el WSJ, refleja el reconocimiento de Exxon de que la demanda de motores de combustión interna pronto podría alcanzar su punto máximo y marca el regreso de la petrolera a una industria en la que fue pionera hace casi 50 años.
El presidente ejecutivo de Exxon, Darren Woods, dijo el año pasado que la demanda de combustibles fósiles se mantendría sólida durante décadas, impulsada por la producción de productos químicos y el transporte pesado y la industria.
Exxon proyectó el año pasado que la demanda de combustibles para motores de combustión interna de vehículos livianos podría alcanzar su punto máximo en 2025, mientras que los vehículos eléctricos, híbridos y vehículos alimentados por celdas de combustible podrían crecer a más del 50% de las ventas de automóviles nuevos para 2050.
Exxon también proyectó que la flota mundial de vehículos eléctricos podría ascender a 420 millones para 2040, frente a los 3 millones de 2017.
Estados Unidos llegó a ser el mayor productor de litio del mundo y, en la década de 1970, Exxon desempeñó un papel clave en esta industria, pero su producción se ha desplomado y ahora depende de otras naciones como China para su suministro de este elemento.