LKAB encontró en Suecia un depósito de un millón de toneladas de tierras raras
La empresa minera estatal sueca LKAB descubrió en el extremo Norte del país el yacimiento de tierras raras más grande conocido hasta ahora en Europa, que podría contener más de un millón de toneladas de metales, se informó hoy oficialmente.
Este hallazgo posee potencial para ayudar al continente a liberarse del dominio de China -mayor productor mundial- y otras partes del sudeste asiático en el mercado de estos recursos, útiles para fabricar baterías de vehículos eléctricos y turbinas de torres eólicas, según señaló la agencia de noticias Bloomberg.
Los trabajos se encuentran aún en fase exploratoria y se desconoce la extensión total del yacimiento, situado justo al norte de la mayor mina de la empresa en la ciudad de Kiruna, informó LKAB en un comunicado.
Actualmente no se extraen elementos de tierras raras en Europa, al mismo tiempo, se espera que la demanda aumente dramáticamente como resultado de la electrificación, lo que conducirá a un suministro insuficiente global, y esto en un momento de crecientes tensiones geopolíticas.
Según la evaluación de la Comisión Europea, se espera que la demanda de elementos de tierras raras para automóviles eléctricos y turbinas eólicas, entre otros, se multiplique por más de cinco para 2030. Hoy, Europa también depende de las importaciones de estos minerales, donde China domina por completo el mercado, un factor que aumenta la vulnerabilidad de la industria europea.
“Esta es una buena noticia, no solo para LKAB, la región y el pueblo sueco, sino también para Europa y el clima. Este es el depósito más grande conocido de elementos de tierras raras en nuestra parte del mundo, y podría convertirse en un componente importante para producir las materias primas críticas que son absolutamente cruciales para permitir la transición ecológica. Nos enfrentamos a un problema de suministro. Sin minas, no puede haber vehículos eléctricos”, dijo Jan Moström, presidente y director ejecutivo del grupo LKAB.
“La electrificación, la autosuficiencia de la UE y la independencia de Rusia y China comenzarán en la mina. Necesitamos fortalecer las cadenas de valor industriales en Europa y crear oportunidades reales para la electrificación de nuestras sociedades. La política debe dar a la industria las condiciones para cambiar a una producción verde y libre de fósiles. Aquí, la industria minera sueca tiene mucho que ofrecer. La necesidad de minerales para llevar a cabo la transición es grande", agregó la ministra de Energía, Comercio e Industria, Ebba Busch.
En este sentido, LKAB tiene previsto solicitar una concesión de exploración este año, antes de pedir los permisos.
La relativa escasez de minerales de tierras raras se convirtió en un obstáculo importante en la transición mundial para abandonar los combustibles fósiles, principalmente para Europa, en su búsqueda de imponerse como actor principal en el ámbito de las energías renovables.
En este marco, Suecia desempeña un papel clave, al suministrar aproximadamente 90% del mineral de hierro del continente, la mayor parte procedente de las minas de LKAB en el norte del país.
COMIENZA UN LARGO CAMINO
Al mismo tiempo, el camino hacia la posible explotación del yacimiento es largo, donde el primer paso es la solicitud de una concesión de explotación del yacimiento Per Geijer para poder profundizar en él e investigar las condiciones para la explotación. El plan es poder presentar una solicitud de concesión de explotación en 2023.
LKAB ya ha comenzado a preparar una galería, de varios kilómetros, a una profundidad de aproximadamente 700 metros en la mina Kiruna existente hacia el nuevo yacimiento para poder investigarlo en profundidad y en detalle.
“Ya estamos invirtiendo mucho para avanzar, y esperamos que lleve varios años investigar el depósito y las condiciones para explotarlo de manera rentable y sostenible. Nos sentimos honrados por los desafíos que rodean el uso de la tierra y los impactos que existen para desarrollar esto en una mina y que deberán analizarse para ver cómo evitarlos, minimizarlos y compensarlos. Solo entonces podemos proceder con una solicitud de revisión ambiental y solicitar un permiso”, dijo Moström.
“Si observamos cómo han funcionado otros procesos de permisos dentro de nuestra industria, pasarán al menos 10-15 años antes de que podamos comenzar a extraer y entregar materias primas al mercado. Y luego estamos hablando de Kiruna, donde LKAB ha estado extrayendo mineral durante más de 130 años", agregó.
"Aquí, el enfoque de la Comisión Europea en este tema, para asegurar el acceso a materiales críticos, y la Ley de Materias Primas Críticas en la que la Comisión está trabajando ahora, es decisivo. Debemos cambiar los procesos de permisos para asegurar una mayor minería de este tipo de materia prima en Europa. El acceso es hoy un factor de riesgo crucial tanto para la competitividad de la industria europea como para la transición climática”, completó el directivo.