JULIÁN YOSOVITCH
El oro busca su revancha en 2023. Los dos últimos años no generó ganancias significativas para los inversores. Sin embargo, el mercado especula que el fin de suba de tasas de la Fed podría darle aire adicional al metal precioso.
Las proyecciones entre bancos de inversión son mixtas. Algunos se muestran cautelosos, anticipando pérdidas de 16% mientras que otros esperan ganancias enormes, mayores al 60% para 2023.
EL ORO, CON EL PIE DERECHO EN 2023
El oro sube 2% en las primeras ruedas del 2023. Las proyecciones de los bancos de inversión muestran retornos esperados de hasta 60%. El metal precioso arrancó el año con el pie derecho el 2023.
Sube 2% en los primeros días del año y opera en US$ 1.857 la onza, siendo el valor más alto desde mayo de 2022. Después del rally de 2019 y 2020 en el que el oro subió 18% y 25% respectivamente, el metal se estancó y 2021 y 2022 cerraron con una pérdida de 3,5% y 0,5% respectivamente.
Hacia adelante, distintos bancos de inversión se muestran divididos sobre el futuro del metal precioso. Las proyecciones van desde una caída del 16% hasta una suba astronómica de 61%.
Entre los más cautelosos se encuentra el banco suizo, Societe Generale que espera que el oro caiga 16% desde los valores actuales, finalizando el 2023 en US$ 1.550 la onza.
Con una visión bajista también se encuentra el banco neozelandés, ANZ que espera una baja del 11% hasta los US$ 1.650 la onza.
Del lado alcista, ABN Amor proyecta un oro en US$ 1.900 la onza, lo cual implica una suba modesta de 2% para este año, al igual que el banco alemán Commerzbank y Wells Fargo.
Bank of América ve al oro en US$ 2.000 para fin de año, es decir, 7,5% de suba desde los valores actuales. Mas alcista se encuentra Saxo Bank que espera un oro en US$ 3.000, es decir, una suba de 61% desde los valores actuales.
MIRANDO A LA FED
Gran parte de las perspectivas para 2023 de los mercados mundiales depende de la trayectoria de la política monetaria que apliquen los distintos bancos centrales globales.
La expectativa esta puesta en si los bancos centrales reducirán las agresivas subas de tipos de interés que llevaron a cabo el año pasado.
Hoy la tasa de la Fed se encuentra en el rango de 4,25% y 4,5%.
En la medida que los mercados perciban que los bancos centrales levantaran el pie del acelerador en la suba de tasas, esto permitirá que los activos financieros mejoren y tengan una mejor performance respecto de la del 2022.
Es decir, si el mercado ve que la Fed subirá menos la tasa a causa de una menor inflación esperada, entonces esto podrá provocar una baja en los rendimientos de los bonos del tesoro americano.
De ocurrir, esto podría provocar un rally también en el oro.
Bank of América espera que la Reserva Federal termine su ciclo de suba de tasas en marzo y ve el primer recorte de tasas para fines de 2023.
En este entorno, Michael Widmer, estratega de materias primas de Bank of America, dijo que los precios del oro tienen un camino a US$ 2,000 la onza.
Los analistas de materias primas de Commerzbank también esperan que la Reserva Federal reduzca las tasas de interés para fin de año y esto tendría un impacto directo en el oro
"Después de lo que se espera sea el último aumento de la tasa de interés en marzo, es probable que siga un período de tasas sin cambios antes de que la Fed comience a bajarlas hacia fines de 2023 en vista de una economía débil y una inflación más baja. Tan pronto como la Fed adopte estas medidas, el precio del oro debería subir nuevamente", dijeron analistas del banco alemán.
Desde el banco holandés, ING remarcan que las tenencias totales conocidas en ETF de oro se han reducido en alrededor de 13,2 millones de onzas, desde el máximo de abril de este año debido a que la Fed aumentó las tasas de interés.
Sin embargo, desde ING consideran que dada la expectativa de que el ciclo alcista de tasas podría estar cerca de terminar, los flujos regresen al metal precioso.
"El aumento de la tasa de interés de este año ha alejado el dinero de inversión del oro, ya que los inversores perseguían mayores rendimientos en los bonos del Tesoro de EE.UU. Sin embargo, una desaceleración en las subas de tasas o la posibilidad de recortes de tasas más adelante en 2023 podría revertir la tendencia y ayudar a que el dinero de inversión vuelva al oro", comentaron.
Finalmente, el banco de inversión europeo, Pictet Asset Management, proyecta un oro en US$ 1.880 para finales de 2023, es decir, cerraría el año proactivamente sin cambios.
En sus perspectivas, considera que la dinámica inflacionaria en EE.UU. y el accionar del dólar a partir de las políticas monetarias de la Fed, podrían tener un impacto en el metal precioso.
"El oro podría funcionar relativamente bien en 2023 a pesar de que las tasas reales de EE.UU son significativamente menos favorables que en años anteriores. La demanda en oro está impulsada por las tendencias del dólar estadounidense, el temor a una alta inflación y las incertidumbres mundiales. En particular, nuestra expectativa de cierto debilitamiento del dólar debería ayudar al oro", dijo Luc Luyet, estratega de moneda y de Wealth Management de Pictet Asset Management.