Con el índice del dólar cayendo, el oro subió más de un 2% y cerró por encima del nivel clave de US$ 1.700 la onza. Así, las mineras encabezaban los ascensos entre los Cedears más operados, mientras los mercados internacionales se mantienen expectantes a las elecciones de medio término en Estados Unidos.
Barrick Gold subía 8,2% y Harmony Gold, 6,6%. Por su parte, Airbnb crecía 5,8%. La minera brasileña Vale también estaba entre los principales ascensos con el 4,2%. En cuanto a los descensos, Tripadvisor se desplomaba 17%, según informó Ámbito.
En cuanto a las subas de la jornada encabezadas por las mineras, suceden en sintonía con el alza del oro. La onda subió más de un 2% impulsada por la caída del dólar y del rendimiento de los bonos, así como por compras técnicas.
El oro al contado creció un 2,2%, a US$ 1.720,40 por onza, su nivel más alto desde el 7 de octubre. En tanto que los futuros del oro en Estados Unidos ganaron un 2%, a US$ 1.714,60.
"El repunte es un seguimiento de un movimiento similar visto el viernes, con el dólar estadounidense retrocediendo y las preocupaciones por la recesión en el centro del escenario", explicó Anna Golubova en Kitco.
"Los mercados están siguiendo de cerca las noticias de las elecciones de mitad de período en los EE.UU., y las encuestas pronostican que los demócratas perderán la Cámara y el Senado. En respuesta a los movimientos del mercado, el oro avanzó a un máximo de cuatro semanas, rompiendo su nivel de resistencia clave de $1,700 la onza. Los futuros de oro de Comex de diciembre se situaron en US$ 1.716,80, un 2,16% más en el día, después de subir desde un mínimo diario de US$ 1.667,10 y alcanzar un máximo diario de US$ 1.720,40", explicó la especialista.
“El repunte fue impulsado por la depreciación del dólar estadounidense. Es probable que el último aumento en el precio del oro se haya atribuido a la cobertura de posiciones cortas especulativas. Ascendieron a unos buenos 40,000 contratos solo unos días antes, según la CFTC, colocándolos solo marginalmente por debajo de su máximo de fines de septiembre”, agregó Carsten Fritsch, analista de Commerzbank.
"Parece que se produjo un gran movimiento de riesgo que impulsó las acciones al alza e hizo que el dólar baje en el día, lo que a su vez hizo subir a los metales preciosos", completó Craig Erlam, analista de OANDA.
El índice dólar cedía un 0,5%, a un mínimo de casi dos semanas, haciendo al lingote más atractivo para los tenedores de otras divisas. El rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense también bajaba.