El Proyecto Integrado MARA Agua Rica Alumbrera, aún en etapa de exploración, genera trabajo para 730 catamarqueños, la mayoría de ellos vecinos de Andalgalá, Belén y Santa María. Para la firma, este dato es una muestra de la consolidación de la industria minera en todas sus etapas, como generadora de empleo formal en época de crisis.
De acuerdo con información brindada por el departamento de Recursos Humanos del proyecto minero, de los 890 empleos directos e indirectos (en contratistas frecuentes, con contratos a largo plazo) 750 son catamarqueños y viven, la mayoría, en los departamentos del oeste de la provincia.
Tomado MARA a modo de ejemplo local, la industria minera nacional evidencia números más que destacados en cuanto a generación de empleo directo y directo en las provincias donde se desarrolla la actividad en cualquiera de sus instancias, desde la exploración hasta la explotación.
Según el último reporte de datos de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), el sector –que incluye empleo directo y proveedores– empleaba unas 70.000 personas en 2010, representando el 1,2% del total del empleo registrado del país.
Con un crecimiento sostenido a lo largo de la década, pero particularmente en el último año, se estima que 2022 cerrará con más de 99.000 personas empleadas por el sector, lo que representa el 1,6% del empleo registrado nacional.
La mayor parte de los trabajadores están empleados por empresas dedicadas a la producción de metales, seguidos por los servicios mineros, las rocas de aplicación y los minerales no metalíferos, siempre según datos de la Secretaría de Minería.
En el caso de MARA, el proyecto tiene dos unidades operativas: MARA Agua Rica y MARA Alumbrera, que cuentan con sus respectivos equipos de trabajo. Solo de MARA Agua Rica dependen hoy 531 familias, de las cuales 477 son catamarqueñas, y de ellas, casi el 90 por ciento son andalgalenses.
El empleo minero, ya sea directo o indirecto, genera un fuerte impacto positivo en las comunidades del interior profundo de Argentina, ya que la industria genera oportunidades para personas a las que se les dificulta conseguir empleo de calidad por diversos factores.
Choya y El Potrero son dos localidades ubicadas muy lejos del centro urbano de la ciudad de Andalgalá. Allí, y mediante un trabajo articulado entre MARA y la Cámara de Proveedores Mineros local, más de 120 vecinos y vecinas tienen empleo formal y en blanco. Para muchos de ellos, es su primer trabajo formal.
Así como MARA y los proyectos de Litio en marcha en Catamarca, el impulso generador de empleo de la minería se replica en varias provincias como San Juan, Santa Cruz, Salta y Jujuy, y se consolida como un factor clave de desarrollo para Argentina.