Una vez que se complete la transacción, Reko Diq, uno de los depósitos de cobre y oro sin desarrollar más grandes del mundo, será propiedad de Barrick Gold (NYSE:GOLD) (TSX:ABX) en un 50%, en un 25% de la provincia de Baluchistán, y en un 25% de las principales empresas estatales paquistaníes (SOE).
El presidente y director ejecutivo de Barrick, Mark Bristow, dijo que el proceso para completar los acuerdos finales y los pasos legales que permitirían el desarrollo del proyecto Reko Diq está progresando constantemente.
Bristow hablo tras una visita de cuatro días a Pakistán durante la cual él y el equipo del proyecto sostuvieron conversaciones con el primer ministro Shehbaz Sharif y el primer ministro de Baluchistán, Abdul Quddus Bizenjo, y sus equipos, así como con los socios de la SOE de Barrick.
Durante el transcurso del viaje, el equipo de Barrick también visitó el Distrito Chagai de Baluchistán, que alberga a Reko Diq, para informar a los líderes locales y a las partes interesadas de la comunidad sobre el proyecto, que traerá enormes beneficios a la región en forma de empleo, habilidades y desarrollo económico, así como iniciativas comunitarias enfocadas en seguridad alimentaria, gestión ambiental y acceso a salud, educación y agua potable.
Bristow dijo que Barrick está estableciendo comités de desarrollo comunitario (CDC) para identificar proyectos prioritarios y supervisar su implementación.
“Barrick se ha basado en asociaciones exitosas con nuestros países anfitriones, y estas abarcan la gama completa de partes interesadas, desde gobiernos hasta proveedores y comunidades alrededor de nuestras minas. Nuestro modelo CDC proporciona un mecanismo transparente y responsable para adaptar los programas de desarrollo a las necesidades de estas comunidades con su plena participación”, explicó el directivo.
Una vez finalizados los procesos legales actuales, Barrick completará la actualización del estudio de factibilidad, que actualmente contempla una operación a cielo abierto con una vida útil de más de 40 años. Se prevé que el proyecto se construya en dos fases con un costo de capital estimado inicial 1 de aproximadamente $ 7.000 millones y se espera que entre en producción entre 2027 y 2028.
Mientras estuvo en Pakistán, Bristow anunció que Barrick estaba donando $ 150.000 adicionales al fondo de alivio de inundaciones de Baluchistán, elevando la contribución total de la compañía a $300.000.