Antofagasta Minerals estima que la producción del grupo en este año alcance el extremo inferior de la meta de 640.000-660.000 toneladas
Antofagasta Minerals recortó su estimación de producción para 2023 y dijo que la producción este año estaría en la parte inferior de su pronóstico luego del colapso de una plataforma de un proyecto desalinizador en una playa del norte chileno.
La minera reconoció en un documento que la suspensión de las obras ha afectado el calendario de finalización del proyecto de la planta desaladora. Y, en ese sentido, se está terminando un cronograma revisado que incorpora este retraso junto con el impacto del continuo oleaje en las obras marinas restantes.
La empresa que cotiza en Londres espera que la producción de cobre del grupo esté en la parte baja del rango de 640.000-660.000 toneladas para 2022, mientras que un retraso en la finalización de la planta podría afectar en unas 30.000 toneladas la producción planificada para 2023, según informó Reuters.
A inicios de septiembre, el regulador ambiental chileno dictó medidas para controlar riesgos vinculados al rescate de hidrocarburos tras el colapso por marejadas de la plataforma, utilizada para la construcción de obras marítimas del proyecto Infraestructura Complementaria (INCO) de la mina Los Pelambres.
Asimismo, la minera señaló que no se espera que haya un aumento material en el costo total de capital del proyecto como resultado de la demora en la reanudación de las obras. Y recalcó que "la plataforma volcada no ha causado ningún impacto ambiental significativo hasta la fecha", según informó Karen Peña en DF.
El 12 de septiembre, la minera anunció que fuertes marejadas habían volcado una plataforma de construcción que trabajaba en las obras marinas del proyecto de la planta desaladora de Los Pelambres. En ese momento, la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) detuvo todas las obras marinas a la espera de la recuperación de los equipos y materiales perdidos.
Según indicó la minera en un escrito, esta restricción expiró este lunes y no ha sido prorrogada.
En esa línea, la firma sostiene que las condiciones del mar continúan impidiendo la recuperación completa de todo el equipo perdido y esto ha impedido la reanudación de los trabajos de construcción marina desde que se hizo cumplir esta restricción en septiembre.
Las mineras de cobre de todo Chile se han visto obligadas a encontrar medios alternativos para suministrar agua a sus minas debido a que la sequía más larga del país en décadas y el retroceso de los acuíferos han obstaculizado las operaciones. Muchos han reducido drásticamente el uso de agua dulce continental o han recurrido a plantas de desalinización.
La agencia del cobre del país, Cochilco, estima que el uso de agua de mar por parte de la minería, ya sea directamente o desalinizada, aumentará un 167% para 2032, mientras que el uso de agua dulce disminuirá un 45%. Al final de ese período, el 68% del agua utilizada por la industria provendrá del océano, dijo la agencia.
Antofagasta dijo que anunciará los efectos de los retrasos en la planta en la guía de producción total de cobre de la compañía para 2023, cuando publique su informe de producción para el tercer trimestre el 19 de octubre.