LUCIANA PAZ

El cambio era inevitable. Gabriel Boric tenía que hacer ajustes en su gabinete para pasar el Rechazo a su nueva Constitución. Lo dijo y lo hizo. En su discurso del domingo el presidente de Chile adelantó que se vendrían cambios en su gabinete y así fue.

"Quiero que sepan que hago este cambio de gabinete pensando en nuestro país. Los cambios de gabinete siempre son dramáticos en Chile y este ha tenido su dosis". El  61,86% de los chilenos le dijo "no" a la reforma constitucional que comenzó luego del estallido social en 2019 bajo el gobierno de Sebastián Piñera pero se materializó en el del izquierdista Boric.

Los que entran (o se mueven): Carolina Tohá (Interior y Seguridad Pública), Ana Lya Uriarte (Secretaría General de la Presidencia), Giorgio Jackson (Desarrollo Social y Familia, quien salió del puedo que ahora ocupa Uriarte), Ximena Aguilera (Salud), Diego Pardo (Energía) y Silvia Díaz (Ciencias y Tecnología).

Los salientes fueron: Izkia Siches (Interior);  María Begoña Yarza (Salud), Claudio Huepe (Energía) y Flavio Salazar (Ciencias).

Uno de los hechos que marcó la gestión de Siches fue a días de haber asumido el cargo. En su visita a territorio Mapuche, la Macro Zona Sur militarizada desde el gobierno de Piñera  sostenido por Boric, fue recibida con tiros al aire y tuvo que retroceder.  en ese momento afirmó “El camino que hemos decidido seguir para enfrentar la situación crítica en el Wallmapu [territorio mapuche] y especialmente la Araucanía, sabíamos que iba a ser difícil. El camino del diálogo sabemos que no va a estar exento de dificultades y que probablemente hay muchos que no quieran el diálogo".

El texto de la nueva Constitución estaba marcado por la tradición indígena de Chile otorgándoles mayor participación y derechos. Uno de los puntos que generó más controversia fue la creación de autonomías territoriales indígenas, asegurando al mismo tiempo que el territorio del país era indivisible, y se planteaba el respeto a los sistemas de justicia indígena.

A su llegada, Uriarte, enfatizó que  “vamos a enfrentar muchos desafíos (...) y comprometemos la mejor de las voluntades para encontrarnos con el parlamento y con todos los diputados y senadores para tener el mejor de los diálogos”.

Algo en las predicciones oficiales falló. La mayoría de los chilenos aprobó el plebiscito para crear una nueva Constitución, fue el texto más vendido ni bien salió a la calle y no llegó al 50% de aprobación.

Como Boric, y las encuestas, anticipaban el rechazo, el Congreso aprobó disminuir el quórum necesario para reformar la Constitución de 1980, que, tras el triunfo del rechazo este domingo, mantiene su vigencia en el país.

Tras los cambios, Boric se reunió en La Moneda con la mayoría de las colectividades del espectro político y fijaron fecha de inicio de las negociaciones para un nuevo proceso, cita que tendrá lugar este miércoles en el Congreso. La nueva titular de la Segpres, Ana Lya Uriarte, será la representante del gobierno en los diálogos, mientras el Jefe de Estado asumirá un rol de "facilitador" y no de protagonista.