Colombia podrá exigir a las empresas mineras licencias ambientales para la exploración en busca de minerales y metales con el objetivo de proteger el medio ambiente, aumentar los controles del Estado y evitar conflictividad de las compañías con las comunidades.
La ministra Susana Muhamad lanzó la iniciativa durante el Congreso Nacional de Minería que se realiza en la caribeña ciudad de Cartagena, en momentos en que las empresas del sector han expresado su preocupación por un proyecto de reforma tributaria del gobierno que pretende aumentar los impuestos a la producción de recursos como el carbón, según informó Luis Jaime Acosta en Reuters.
"Creo que hay que poner licencia ambiental para la exploración y hay que hacerlo porque hay también mucha conflictividad y falta de control de los procesos de exploración de parte de la minería en muchos lugares", dijo Muhamad durante un conversatorio como parte del congreso organizado por la Asociación Colombiana de Minería (ACM).
"Eso nos ayudaría a que la exploración se pueda concertar de mejor formar, pueda haber mecanismos de diálogo, de regulación y de trabajo conjunto entre el Gobierno, las empresas y las comunidades", explicó la ministra.
Actualmente las licencias ambientales solo se exigen para la explotación y producción.
Representantes del sector rechazaron la posibilidad de exigir licencia ambiental a la exploración en la industria de la minería y aseguraron que sería un nuevo obstáculo a la búsqueda de recursos incluso considerados claves para la transición energética que impulsa el Gobierno del presidente izquierdista Gustavo Petro como el cobre.
"Los proyectos de exploración tienen un periodo de entre 8 y 18 años en los que las empresas invierten millonarios recursos sin la certeza de encontrar un yacimiento y una licencia ambiental extendería los tiempos y desestimularía inversiones claves para la búsqueda de metales y minerales", dijo una fuente del sector que pidió mantener su nombre en reserva.
EXPLOTACIÓN RACIONAL, INTELIGENTE Y ESTRATÉGICA
Por su parte la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, dijo en el mismo evento que el Gobierno de Colombia no está en contra de la minería, sino que busca una explotación racional, inteligente y estratégica de los recursos.
Vélez dijo que el Ministerio a su cargo comenzó un proceso de reorganización que busca aclarar las normas vigentes en el sector de la minería y revisar un código que rige desde el año 2001.
El proyecto de reforma tributaria que el gobierno presentó al Congreso busca recaudar inicialmente 25 billones de pesos (5.652,5 millones de dólares) para financiar ambiciosos programas sociales.
La iniciativa tributaria contempla un impuesto a las exportaciones extraordinarias con tarifa de 10% a las ventas al exterior de petróleo sobre un precio superior a los 48 dólares por barril, a los 87 dólares por tonelada de carbón y a los 411 dólares por onza de oro.
Recientemente el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, admitió la posibilidad de excluir al oro del proyecto.
La Asociación Colombiana de Minería anunció que en 2022 el sector aportará recursos por 14,7 billones de pesos (US$ 3.323,7 millones) por impuestos y regalías, sin incluir la reforma tributaria.
El gremio alertó que la reforma podría poner en riesgo la inversión en nuevos proyectos y la creación del empleo.
QUÉ DIJO LA ASOCIACIÓN COLOMBIANA DE MINERÍA
El presidente de la Asociación Colombiana de Minería (ACM), Juan Camilo Nariño aseguró que la reforma tributaria que se presentó en Colombia tiene implicaciones profundas en el sector minero.
“Así se lo hemos hecho saber al ministro de Hacienda, al Congreso de la República y a las distintas audiencias públicas, esto parte de una cosa fundamental: en promedio, en los distintos minerales que produce el país, las contribuciones de las compañías mineras pasan del 68 % al 90 %: esto en la estructura tributaria de cualquier compañía tiene un profundo impacto”, precisó Nariño, según informó Valora Analitik.
El líder gremial agregó que estos recargos comprometen los costos de producción de los distintos minerales, la viabilidad de las compañías actuales, pero también impactan a los proyectos futuros en exploración y producción: muchos que son clave para la transición energética y movilidad eléctrica.
"Esto en esencia tiene una dimensión social muy grande, pues el sector minero colombiano tiene un profundo arraigo social en estabilidad fiscal de los municipios, departamentos y la Nación”, manifestó Nariño.
Entre tanto, el presidente de la ACM explicó que la reforma tributaria tiene distintos impuestos que se le sumarían al sector minero, dos para ser exactos: el primero, es la cláusula en la cual se dice que las regalías no son deducibles.
“Históricamente, las regalías han sido un costo en la operación minera y, por supuesto, eso tiene un impacto importante. En relación con otros países, competidores nuestros incluso miembros de la OCDE -países mineros Australia, Canadá-, en todos ellos las regalías son deducibles, tal vez en el mundo habrá uno o dos países en los cuales esto no pasa”, indicó Juan Camilo Nariño en el Congreso de Minería de la ACM.
El presidente del gremio relató que cuando hay ajustes como la actual reforma tributaria que se tramita en el Congreso, hay que hacer un análisis para saber a dónde va a llegar la minería, ya que históricamente ha alcanzado el 15 % del total de la Inversión Extranjera Directa del país.
Sobre el impuesto a las exportaciones de oro, carbón y petróleo, Nariño subrayó que tendrá un fuerte impacto en la industria, pues no tiene antecedentes en la estructura tributaria de los países en América Latina.
“Hay dos impuestos adicionales, uno general con todas las compañías del país que es la tributación sobre los dividendos y, por supuesto, también uno que tiene un efecto profundo en materia inflacionaria en el país que es el impuesto al carbón”, precisó.
