La empresa tiene una capitalización bursátil superior a los US$ 20.000 millones. Los precios del litio siguen aumentando por la mayor demanda de autos eléctricos
MAXIMILIANO VILLENA
El umbral de los US$ 20.000 millones de capitalización bursátil no lo ha sobrepasado una compañía chilena en años. Alguna vez Falabella, el gigante del retail que se expandió por la región desde Chile, y Empresas Copec, el holding petrolero y forestal del grupo Angelini, tuvieron un valor superior a ese límite.
Hoy solo una compañía chilena ocupa el podio. Es SQM, la compañía gobernada por Julio Ponce Lerou y la gigante chino Tianqi: el proceso de descarbonización a nivel global, la electromovilidad y la guerra en Ucrania han hecho saltar a los commodities, en especial el, hoy por hoy, principal negocio de la minera no metálica, el litio.
El papel más líquido de SQM, la serie B, sube casi 50% en el año y se ha transformado en el título más rentable del 2022. Muy atrás, hoy solo dos empresas superan los US$ 10.000 millones de valor bursátil: la eléctrica Enel y el Banco de Chile.
¿Por qué vale tanto? El alza de los precios de casi todas sus líneas de negocio ha estado tras la buena evaluación de los inversionistas, quienes pronostican que este año podría ganar más de US$ 2.000 millones, casi cuatro veces más lo que reportó en 2021.
En el último ejercicio, la empresa logró ganancias por US$585 millones, un 255,9% más que los US$168 millones del primer año de la pandemia. El año pasado, por litio y derivados a las arcas de SQM ingresaron como ingresos US$936 millones, 144% más que los US$ 383 millones del ejercicio previo. En total, el litio aportó un 32,7% de los los US$2.862 millones que la empresa obtuvo en ingresos en 2021.
Pero la multiplicación seguirá este año. Su gerente general, Ricardo Ramos, estimó que este año el litio representará más de la mitad de sus ingresos. “Es muy probable que el 2022, con precios significativamente mejores y volúmenes un 40% superiores, los ingresos por concepto de litio superen el 50% de todos los ingresos de SQM”, dijo a El Mercurio recientemente.
Es que el precio del litio ha explotado. En el cuarto trimestre del año pasado se transaba a US$ 14.600 la tonelada, según el último reporte financiero de SQM. En igual fecha del año anterior era de US$ 5.300. Un 175% más.
La escalada ha continuado en la primera parte de este año. “Creemos que los precios en el primer y segundo trimestre de 2022 deberían ser significativamente más altos que los precios informados durante el cuarto trimestre de 2021″, dice el reporte a diciembre de SQM. No solo será precio. Si en 2021 la compañía colocó 101.000 toneladas métricas de litio en el mercado, sus expansiones futuras elevarán ese monto a 140.000 estimados para este año.
“Somos uno de los productores más grandes del mundo de carbonato de litio e hidróxido de litio y estimamos que nuestras ventas representaron aproximadamente el 19% de la venta mundial de químicos de litio en términos de volumen”, sostiene la compañía en su memoria 2021.
La demanda por litio el año pasado superó las 500.000 toneladas métricas, 55% más que en 2020, impulsada por el crecimiento del mercado de los vehículos eléctricos, que, estima la empresa, se duplicó en un año, liderado por China, que captura la mitad del total.
“Las baterías representan la principal aplicación para el litio, con aproximadamente un 84% de la demanda total, incluyendo baterías para vehículos eléctricos, las que representan aproximadamente un 70% de la demanda total”, describe SQM en su memoria anual.
Todo ello sostiene el promisorio futuro de SQM. En un informe enviado a sus clientes a principios de abril, el banco de inversiones JP Morgan estimó que el precio del carbonato de litio vería un alza de 45% en 2022 y que la oferta aún no reacciona a la fuerte demanda de la materia prima. Por ello, elevó sus expectativas para el Ebitda de SQM en 58% para fines de este año y estimó ganancias por US$ 2.504 millones. Las ventas totales, según JP Morgan, saltarán a US$7.382 millones, casi tres veces más que el año pasado.
Para el 2022, el consenso de los analistas consultados por Bloomberg ve ganancias por US$1.729 millones e ingresos por US$6.039 millones, duplicando las ventas del 2021.
La expansión no se detendría. En BCI apuntan a que a nivel consolidado, para 2023 las cifras seguirán siendo fuertes, aunque algo menos que en 2022: los ingresos alcanzarán los US$7.647 millones, el Ebitda se ubicaría en US$3.642 millones y la utilidad alcanzaría a US$2.078 millones.
Pero en JP Morgan estiman que la última línea seguirá creciendo el próximo año. Así, para 2023 proyectan ganancias por US$3.127 millones, las que declinarán recién en 2024 a US$2.765 millones, con ingresos superiores a los US$ 9.000 millones en ambos años.
UN ADR A US$ 100
En septiembre de 2018, Julio Ponce Lerou, histórico controlador de SQM, reapareció tras una larga ausencia. Y lo hizo en grande. En 2015 se vio obligado a dejar la presidencia de la minera no metálica, acosado por las investigaciones por el financiamiento irregular de la política, y de la disputa con Corfo por los arrendamientos de pertenencias en el Salar de Atacama.
Desde entonces no había vuelto a aparecer, hasta que se presentó en la bolsa de Nuew York para celebrar los 25 años de la colocación del ADR de la compañía, evento al que acompañó al gerente general del momento, Patricio de Solminihac, y al gerente de finanzas, Ricardo Ramos, quien hoy es el gerente general.
Desde que se emitió en 1993, el ADR -colocado en US$2,46- ha trepado 2,900%. Este viernes, cada ADR, equivalente a una acción chilena, se transó ya a US$ 74. En privado, dicen quienes han conversado con Ponce, el accionista más importante de SQM ha hecho una predicción: el papel superará en algún momento los US$ 100, un pronóstico que viene haciendo desde hace años. El 4 de abril llegó a su peak: US$ 88 por acción. Ese mismo día, el banco de inversión JP Morgan actualizó su precio objetivo para el ADR a US$107 hacia fines de este año.
En JP Morgan estimaban a comienzos de abril que los múltiplos esperados apuntan a que el papel de SQM transa con un descuento de 42% respecto de su historia. “Nunca vimos las acciones tan baratas”, analizó en su informe y recomendó sobreponderar el papel, argumentando también que ve una mejora en todas las líneas de negocios.
El banco de EE.UU. no es el único que ve la acción de la minera no metálica por sobre los US$100. Desde Banchile Inversiones, detallan que “nuestro precio objetivo para el ADR es de U$103 y para la acción local $82.400 (hoy en $63.300). El papel es uno de los mas favorecidos por el alza en los precios del litio en el mercado spot puesto que la compañía tiene un alto porcentaje de su volumen contratado con valores indexados al precio spot, en tanto un porcentaje no menor no está contratado”.
Efectivamente, la empresa lo detalló en sus últimos estados financieros. Solo un 20% del litio que esperan vender en 2022 tienen tarifas fijas. Todo el resto es variable.
Por su parte, José Ignacio Pérez, analista de Bci Corredor de Bolsa, apunta a un precio objetivo para SQM-B de $77.000 a fines de año, con utilidades para la firma por US$2.153 millones al cierre del ejercicio.
LOS OTROS NEGOCIOS
No sólo el litio está empujando a SQM. Aldo Morales, subgerente de Estudios de Renta Variable local de BICE Inversiones, concuerda en que el alza del papel se explica principalmente al fuerte repunte del precio del litio, “donde el precio spot del carbonato de litio en China ha aumentado cerca de 600% en los últimos 12 meses”, pero precisa que también se ha visto un fuerte repunte de los precios de fertilizantes, que en conjunto representan aproximadamente 40% del margen bruto de SQM.
“Los precios del potasio han aumentado cerca de 120% en los últimos doce meses, por diversos factores entre los que destacan un aumento en la demanda en el contexto de la pandemia, restricciones a la oferta, mayores costos de insumos y por último la guerra de Rusia con Ucrania, donde Rusia es uno de los principales productores mundiales de fertilizantes, siendo tercero en potasio”, dice Morales. En el cuarto trimestre de 2021, el potasio se transó a US$ 685 la tonelada métrica. Un año antes se cotizó en promedio a US$ 270.
El cloruro de potasio y sulfato de potasio representaron el 14,5% de los ingresos de la firma en 2021.
Pero la otra línea de negocios relevante fue la nutrición vegetal de especialidad, que totalizó ingresos por US$908,8 millones, un 29,5% más que en 2020, casi tanto como el aporte del litio. Y el aporte al margen bruto alcanzó al 24%. Sus precios en el último cuarto de 2021 promediaron US$ 940 la tonelada métrica, un 39% más que el año previo. “Creemos que los precios podrían permanecer en este nivel o en un nivel superior durante el primer semestre de 2022″, finalizó SQM.