Interesantes definiciones del director de Gaceta Mercantil
EDUARDO A. HAPKE
Julio Villalonga es uno de los editores de medios con más experiencia y reconocido en la región de América Latina. Su trayectoria periodística es una de las más completas, el sueño al que la mayoría de los periodistas quieren llegar.
Hoy, en periodismo se podría decir que todo tiempo pasado fue mejor… sin embargo, Villalonga apuesta a que la tecnología ayude -al fin- a los medios que quedaron en pie a ser mejores y llegar a los consumidores de noticias con la información menos sesgada posible.
Contra la tendencia, augura un mejor futuro en donde la sociedad se volverá a inclinar hacia los medios tradicionales, hoy castigados por el avance de las redes sociales y la intoxicación de las “fake news”.
La marca Gaceta Mercantil cumple en 2023 doscientos años, lo que la convierte en la más antigua de Argentina y, muy probablemente, en una de las más antiguas de América
Negocios Magazine dialogó con Julio Villalonga acerca del presente y del futuro de los medios.
- ¿Cuál es o será el mejor negocio para los medios, información gratuita o las suscripciones?
- Para mí el negocio es muy claro. El medio puede cobrar por información exclusiva o porque los suscriptores pagan porque les permiten tener esa información en manera exclusiva. O el pago de manera indirecta por el prestigio que genera que seas un medio que se adelanta a los otros con información veraz. Un caso notorio son los grandes medios como New York Times, Financial Times, la gente se suscribe porque accede a firmas que de otro modo no accedería.
Hay un caso particular que siempre me gusta destacar, el medio francés Mediapart. Lo hace un grupo de periodistas franceses importantes, todos ex de grandes medios que se juntaron, armaron una especie de cooperativa y lanzaron ese medio. La suscripción cuesta 11 euros por mes, tienen 220.000 suscriptores mensuales pagos y solo diez profesionales hacen ese medio. Facturan mas de 2.400.000 euros mensuales y solo son diez periodistas, pero tienen la mejor información –no la diaria- y firmas relevantes, que los lectores buscan. Se impusieron con periodismo de investigación.
- ¿Por qué no funcionan las suscripciones en los medios en América Latina?
- Los medios pueden cobrar dependiendo de lo que dan. Esto es oferta y demanda. ¿Por qué no funciona la suscripción en nuestros países? Porque el periodismo no es bueno. La gente no se inclina a comprar algo que no le seduce. Además, en la región, el mercado publicitario no tiene espacio para tantos medios. Distinto puede ser en un mercado con millones de consumidores hispanos, por ejemplo, en Estados Unidos, donde todavía tienen un mercado sin desarrollar.
- ¿Realmente cree que hay oportunidades en el mercado hispano de Estados Unidos?
- Sin duda, el problema es que las agencias de publicidad no ven el crecimiento del mercado hispano. Las agencias están recluidas en su espacio de confort con los grandes medios, los grandes avisadores, es un círculo vicioso que se retroalimenta, y no dan espacio al crecimiento de otras opciones que requieren más trabajo. En el mercado hispano hay un nicho interesante para aquellos que van a las universidades, a las escuelas de negocios, gente educada en el consumo, etc. El consumo de los hispanos ha cambiado, se ha sofisticado, y eso no se ve reflejado en los medios.
- ¿Cómo ve los medios en la región?
- Los medios en América Latina en general, la calidad del periodismo ha bajado enormemente. Me refiero no solo a la redacción sino a la capacidad de tener información que otros no tienen, a la capacidad de análisis, ha caído mucho.
- ¿En que se convirtió el periodismo?
- El ejercicio de la profesión periodística en sí, no los medios, es ahora una profesión de nicho. Habiendo tantas “fake news”, tanta información robotizada, pasa a ser clave que haya un editor de esa información, que haya alguien que separe la paja del trigo, darle la confianza a tu lector de que, lo que va a ver en tu sitio, es lo que realmente está pasando.
Están los medios masivos y avanza la tendencia de los medios sesgados, según el gusto de sus consumidores, sea por razones políticas o de otra índole. Y lo que existe es una enorme desconfianza en los medios más grandes porque estos responden a los intereses de los accionistas, que son básicamente grandes grupos financieros, no son tampoco medios neutrales. No creo en la independencia periodística pura, eso no existe.
Lo que existe es que el periodista sea lo más leal posible a su lector. Para eso hay que hacer periodismo de excelencia. Y esto tiene un enorme futuro en cualquier lugar del mundo. No va a ser masivo, para nada. Se volverá en eso al siglo XIX, al periodismo de influencia.
- Como afectó la tecnología con Google y Facebook, por ejemplo, ellos se llevan gran parte del negocio publicitario.
- Eso se ha convertido en el gran problema que enfrentan los medios grandes. Esto ha obligado a que se concentre el mercado de medios porque es una tendencia de lo que se conoce como supermercado de medios, donde si tienes a Facebook y a Google con ese nivel de masividad no hacía falta publicitar en medios tradicionales. En un principio esto ayudaba a los medios porque arrastraba tráfico, pero luego se va “jibarizando”, en donde las tecnológicas no les pagan a los medios por sus contenidos y se quedan con los beneficios. Esto seguramente va a ir alterándose. Cada vez más los gobiernos atacan estas políticas distorsivas.
En el horizonte, al final del camino, se va a volver a revalorizar la importancia de los medios como intermediarios entre la información y el público, lo que básicamente hoy se ve completamente alterado por esto que explicamos y por la proliferación de falsos medios.
UN PERIODISTA TODOTERRENO
Julio Villalonga conoció todos los formatos periodísticos: gráfica, radio, televisión; fue productor, conductor y desde hace más de veinte años dirige medios. Y cubrió guerras, cumbres presidenciales y foros económicos en cinco continentes, desde comienzos de la década del ochenta.
Entre 1995 y 2000 fue editor de una de las revistas más importantes de Argentina, Noticias. En el 2000 lo contrató el fondo de inversión Hicks, Muse Tate & Furst cuando comenzó un raid de compras de empresas de TV por cable en la región (Brasil, Colombia, Venezuela, Chile y Argentina). En esa compañía, Villalonga cumplió un doble rol, uno como portavoz regional y otro como director de comunicaciones externas en Argentina hasta 2001.
En 2002 se tomó un año sabático haciendo radio, pero en 2003 ingresó al Grupo America de Argentina, como gerente de noticias, a cargo de los noticieros durante cinco años, hasta el 2007.
En 2009 comenzó su experiencia digital en el sitio de noticias MinutoUno.com, y al siguiente año lanzó el Grupo Gaceta, que incluye una familia de marcas periodísticas con Gaceta Radio (web) y los portales Gaceta Mercantil, Breves24, Gaceta Campo y Gaceta Deportiva (la marca Gaceta Mercantil cumple en 2023 doscientos años, lo que la convierte en la más antigua de Argentina y, muy probablemente, en una de las más antiguas de América).
En ese momento comenzó a trabajar también como consultor de medios para la migración a digitales y la producción de contenidos.