En el Presupuesto 2022 rechazado por el Congreso había una reducción de los subsidios, sin embargo los costos volverán a superar las tarifas
Debate por energía eléctrica: Cuánto cuesta y desafíos para el 2022
Ámbito
Como era esperado, los cortes de luz volvieron a ser moneda corriente en distintos barrios de AMBA en momentos en que la térmica rozó los 40 grados. Con una semana que promete ser agobiante, volvió a instalarse el debate en torno a los subsidios eléctricos y cuál es el costo real de la energía.
En el 2021, según la Oficina de Presupuesto del Congreso, uno de los componentes más expansivos del gasto fueron los subsidios energéticos. Los subsidios energéticos tuvieron un aumento del 27,0% en términos reales.
Dentro de estos sobresalen las transferencias a la compañía administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA), que ascendieron a $59.318 millones y aumentaron 27,1% a/a. Esta variación obedeció principalmente a la brecha entre la evolución de los costos de generación eléctrica y las tarifas abonadas por los usuarios.
En el mes de octubre el costo promedio de generación fue de u$s66/MWh y registró una suba del 30,6% mientras que el precio que paga la demanda fue de u$s27/MWh y se redujo un 4,2%.
También bajó el nivel de cobrabilidad de CAMMESA que fue del 70% promedio en el acumulado del mes de agosto. El porcentaje de costos financiado mediante tarifas fue del 46% y del 44% anual.
Desde 2017, las subvenciones a la energía crecieron por encima del 0,5% del PBI siendo el 2014 el mayor registro con 2,8%. En 2021 según el Presupuesto, se estimaba que fueran del 1,7% del PBI al igual que en el 2020. Sin embargo el gobierno destinó más subsidios por tener las tarifas congeladas: los subsidios energéticos se incrementaron un 62,1% en relación a la estimación inicial.
En resumen, los subsidios a la energía cubrieron el 56% del costo de la electricidad con una inflación del 51% reafirmando el atraso tarifario.
PANORAMA 2022
El gobierno planteó a través del Presupuesto 2022 rechazado en Cámara Baja, una reducción del déficit primario desde el 4% del PBI en 2021 al 3,3% del PBI en el 2022. Prácticamente la totalidad de la reducción se explicaba por un recorte a los subsidios eléctricos que pasarían al 1,7 al 1% del PBI.
La estrategia del gobierno para lograr amortizar este desfasaje es por dos carriles: en primer lugar, incrementar la oferta. En ese sentido, la Secretaría de Energía puso en marcha el Plan Gas.Ar en noviembre del 2020 cuyo objetivo es incrementar la producción diaria en unos 30.000 millones de metros cúbicos por día en un plazo de 4 ahorros. Esto le otorgaría al estado un ahorro fiscal y divisas superiores a los US$ 9.000 millones.
Por otra vía y para evitar un golpe en los bolsillos de los argentinos se trabajó durante el 2021 en un plan para segmentar tarifas de una manera más progresiva. Recientemente, el gobierno autorizó un aumento de las tarifas de luz y gas de entre el 17% y 20%.
En principio, la segmentación impactará en 500.000 usuarios del área metropolitana que dejarán de pagar un abono subsidiado para afrontar el consumo total. En la ciudad de Buenos Aires perderán los subsidios los que vivan en propiedades donde el metro cuadrado supere los US$ 3.700.
En tanto, en la provincia de Buenos Aires se tomará como referencia el valor de la tierra. Además, dejarán de percibir la asistencia los usuarios de barrios cerrados, la actividad financiera, el transporte ferroviario, el juego -bingos y casinos- y las oficinas públicas.
Una de las particularidades del nuevo esquema de aumentos de las tarifas que fijaron como un incremento para todo el 2022 de hasta el 20%, lo que está 13 puntos por debajo de la estimación de inflación que había realizado el ministro en el presupuesto 2022.
La decisión de aumentar las tarifas se da tras casi dos años de mantener la luz y el gas congelados por la emergencia de la pandemia de coronavirus que impactó en los ingresos de los argentinos. También la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI), reclama una reducción del déficit con un plan a corto, mediano y largo plazo.
Lo cierto que uno de los desafíos más importantes que tendrá la Secretaría de Energía y el Ministerio de Economía de ahora en adelante es doble: no solamente bajar el déficit fiscal sino también incrementar la oferta para que una vez más, no sea superado por la demanda.
Los costos de producción son altos y se requerirá de infraestructura adecuada para cumplir con ese mandato. Las industrias demandan energía para crecer.
Apud, ex Secretario de Energía: “En los tres gobiernos kirchneristas destruyeron al sector energético”
Perfil
Emilio Apud, ex secretario de Energía de la Nación, analizó la situación energética en el país y en declaraciones radiales a CNN Radio aseguró que “en los tres gobiernos kirchneristas destruyeron al sector energético”.
Apud habló con Guillermo Panizza y Julieta Tarrés en “La mañana de CNN” y en relación a la situación que se vive en esta etapa de ola de calor y cortes masivos en la Ciudad de Buenos y el conurbano bonaerense los relacionó con "una falta de inversión directamente”
"Creo que ya tendrían que haber aprendio de otros años", dijo refiriéndose al gobierno Nacional y explicó: "Cuando no hay tarifa, o sea que los usuarios pagamos un 30% de lo que cuesta la energía, y el subsidio no incluye inversión, evidentemente se deteriora el servicio y prueba de ello es lo que pasó en los tres gobiernos kirchneristas desde el 2003 hasta el 2015, donde destruyeron al sector energético con esa política de congelar tarifas en contextos inflacionarios de más del 1000 por ciento en ese período".
Según los datos de Apud, al finalizar los tres gobiernos se pagaba un valor mínimo de la tarifa, con lo cual el ex secretario de Energía se preguntó: ¿Usted cree que pagando el 15% se puede tener una calidad de servicio razonable?
SUBSIDIOS, LA CABEZA DEL PROBLEMA
Durante el programa radial se analizó la situación que viene de larga data, con subsidios a la demanda, y los consecuentes problemas de consumo ante la falta de inversión
Ahora bien, ¿cómo hace el resto del mundo para gestionar la demanda en forma eficiente?
Para Apud, simplemente hay que cumplir con el reglamento que está desde 1992 de la concesión de los servicios desresgulados de gas y de electricidad. "Ahí está bien claro que para la gente que realmente no puede pagar la energía, hay una tarifa social que es bastante generosa porque 1 de cada 5 usuarios es beneficiario de eso", explicó.
Pero, para el ex funcionario, lo que pasa es "que se engolosinan", dijo y apuntó a una de las últimas decisiones del gobierno de subsidiar la energía en zonas frías y a otras decisiones del estilo. Además, agregó: “se subsidia al 80% de la gente que sí puede pagar la tarifa”.
“Para no subsidiar al que puede pagar la energía hay que pagar un costo político”, remarcó Apud, y se refirió al gobierno de Mauricio Macri que a su entender, le costó caro.
"El Estado no está en condiciones de hacer las inversiones necesarias", disparó Apud y recordó que en el caso de "las empresas Edenor y Edesur que dependen del Estado Nacional, se las subsidia con emisión, cosa que las provincias no pueden hacer", expresó.
Y en esa línea rescató que en otras provincias aceptan el costo político, por eso "en Córdoba, por ejemplo, cuesta el triple que acá porque el valor agregado de distribución lo tienen que adecuar porque sino se cortan los servicios, no hay otra forma", expresó.
Siguiendo la tónica del tema subsidios, Apud recordó que hasta la llegada del gobierno de Néstor Kirchner "no existían los subsidios en energía".
Y procedió a analizar la estadística de horas de corte por usuario por año. "En los últiomos 15 años se ve que hubo un pico de hasta 33 horas por usuario/ año de corte por congelamiento tarifario. Cuando viene el presidente Macri, con todo el costo que significó bajó de 33 a 11, porque nosotros empezamos a pagar casi el 80% de la tarifa y parte iba para inversiones", recordó. Pero, según su mirada, la situación ahora volvió a complicarse.
"Vienen ahora y otra vez destruyen el sendero para la normalizacion y vuelven a congelar", dijo. y agregó: "No puede ser que con una inflación del 50% por año se mantengan las tarifas”.
Y finalizó: "si ellos produjeron eso, deben hacerse cargo del costo político", indicó el ex secretario de Energía.
Montamat: "Si seguimos haciendo lo mismo se van a repetir los cortes", dijo y apuntó al "populismo"
Impulso Baires
Según Daniel Montamat, ex secretario de Energía, existe un teorema que cruza transversalmente a la política “que es que no se pueden aumentar las tarifas porque se pierden las elecciones”.
“Hay que contrastar ese teorema con la realidad. En 2017, la administración Macri ya había hecho casi el 80% de la recuperación tarifaria. ¿Se ganó o se perdió la elección a mitad de término? Se ganó. Esta gente dio elecciones a mitad de término con tarifas totalmente congeladas. ¿Ganaron o perdieron? Perdieron“, indicó en Radio Mitre.
En ese sentido, el experto adjudicó las fallas en el suministro eléctrico a la falta de actualización tarifaria e inversiones.
“La inflación sube si yo subo las tarifas, pero sube una vez. Pero si no subo las tarifas, tengo que cubrir los costos de la energía con subsidios, y esos subsidios los pagamos con impuestos. Y como no alcanzan los impuestos, los pagamos con el peor de todos los impuestos que es el impuesto inflacionario. Con lo cual, con subsidios cronificamos la inflación“, graficó.
Y continuó: “Tener tarifas de gas y electricidad que recuperen costos económicos cubriendo a aquellos que no pueden afrontarla con una tarifa social es lo que nos dicen los manuales y las economías normales. Acá el populismo siempre cortoplacista está queriendo inventar la rueda de nuevo y transmite todas estas ideas falsas de energía gratuita pero de calidad. Estas cosas tienen que desaparecer o marginalizarse si queremos tener un sistema energético sustentable porque si seguimos haciendo lo mismo, se van a repetir los cortes“.
A criterio del entrevistado, las grandes fallas que explican los cortes extensivos ocurren en el sistema de distribución.
“Si querés mejorar la calidad del servicio, tenés que hacer más inversiones. En febrero correspondería una nueva revisión tarifaria integral porque las tarifas de electricidad se fijan con una tarifa techo cada cinco años y se renuevan para ver los costos, la base de inversión y la remuneración que tienen que tener las distribuidoras. Eso tocaría en febrero pero no han movido un lápiz para hacer eso”, insistió Daniel Montamat.
Por último, Montamat interpretó que la inacción del oficialismo “quiere decir que la política sigue siendo el atraso tarifario y el congelamiento”.
“Con eso no alcanza. Si no tenemos tarifas que recuperen costos económicos, retrasamos la inversión y eso afecta la calidad y el servicio. ¿Qué significa calidad y servicio? Número de cortes y duración de los cortes”, cerró.