La medida busca desincentivar los empredimientos por el alto consumo eléctrico
La Subsecretaría de Energía Eléctrica instruyó a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Electrico (CAMMESA) para que solicite a las distribuidoras del país información sobre la existencia de granjas de criptomonedas en sus áreas de operación.
El objetivo es desalentar los minados de criptomonedas ya que se les cobrará un sobre costo y se les exigirán inversiones en el sistema. La información deberá ser presentada en carácter de declaración jurada y abarca los periodos 2020-2021 y proyecciones 2022-2023. Gastar o comerciar con Bitcoin durante un año gasta cerca de 91 teravatios/hora de electricidad al año
Según Theodoro Toukoumidis, de Doctorminer en Latinoamérica, el país más económico para minar es Venezuela. “La minería en Venezuela ha hecho muy bien. La generación de recursos que se inyectaron al país es visible”, aseveró. Y opinó que esta industria, a largo plazo, podría llegar a equipararse a la industria petrolera.
Luego nombró a Paraguay, destacando que tiene mucha construcción e infraestructura, y que será un punto importante por la migración de los mineros de China.
Después mencionó a Argentina y a El Salvador. Este último, con la noticia y la propuesta de que se haga infraestructura con energía geotérmica, lo que podría ser un buen comienzo. En la lista sumó a Guatemala y Brasil.
Según datos revelados por Digiconomist en su cuenta de Twitter, durante 2021 Bitcoin fue responsable del 0,54% del consumo mundial de electricidad. Consumió 134 TWh de energía, lo que equivale al consumo anual de la Argentina.
En 2015, el uso de energía promedio por transacción de Bitcoin ya era equivalente al consumo de energía de un hogar de EE. UU. Durante 1,5 días. La misma métrica ha aumentado 50 veces desde entonces. La energía utilizada para una sola transacción de BTC podría alimentar a un hogar de EE. UU. Durante casi 2,5 meses.
A la hora de saber cuánto dinero hay que invertir para montar una granja de criptomonedas hogareña, la respuesta no es lineal. Entre US$ 3.000 y US$ 22.000 es el rango de precio de los equipos que existen en el mercado hoy. Esa es la inversión inicial y, en base a ella, son distintos los costos de operación y rentabilidades esperadas.
Según publicó Ámbito, la energía barata, el regreso de los controles de divisas en los últimos años dieron a los argentinos aún más incentivos para minar tokens digitales, ya que la creciente demanda de activos distintos del peso hizo que el valor del Bitcoin se dispare a casi 5,9 millones de pesos en los mercados no oficiales hasta el domingo, frente a unos 3,4 millones de pesos a la tasa oficial.
Los mineros se benefician de los subsidios a la electricidad residencial que existen desde hace tiempo en el país, una política destinada a ganar puntos políticos con los votantes, pero que está alimentando cada vez más la tensión dentro de la coalición peronista gobernante.
"A pesar de que la Argentina es un importador neto de gas, las facturas de electricidad de los consumidores representan sólo entre el 2% y 3% de un ingreso mensual promedio, en comparación con el doble que en otros mercados latinoamericanos como Brasil, Colombia o Chile", según Ezequiel Fernández, analista en Balanz Capital Valores, en Buenos Aires.
Según informó Martin Litwak en El Cronista, con el Impuesto a las Ganancias, a partir de la sanción de la Ley 27.430 (2017), las cripto fueron expresamente incluidas dentro del capítulo correspondiente a las ganancias de capital y tributan el 15% sobre el resultado de la venta (en la medida en que dicho resultado sea positivo, obviamente). El cálculo se hace sobre moneda dura, no en pesos argentinos, de manera de que la diferencia de cambio no forma parte de la ganancia gravada.
Respecto del cobro de servicios en criptomonedas, lo primero que hay que remarcar es que, en Argentina, como en otros países, las criptomonedas no son consideradas legalmente "monedas". Siendo ello así, cuando uno cobra en cripto no es considerado técnicamente un pago en dinero sino una ‘dación de pago', o pago en especie.
Esto implica que quien cobra sus honorarios en cripto tendrá que pagar impuestos por sus ingresos de la misma manera en que lo haría si, por ejemplo, se los hubieran pagado con un automóvil o una obra de arte. En caso de contraprestaciones correspondientes a relaciones laborales, hay que tener en cuenta que de acuerdo con el Art. 103 de la Ley de Contrato de Trabajo, solo el 20% del sueldo puede ser pagado "en especie, habitación o alimentos".
LA NOTA DE CAMMESA