"Se acordó entre los estadounidenses y el anterior gobierno alemán" de Angela Merkel "que en caso de nuevas escaladas ese gasoducto no podría ponerse en marcha", declaró la ministra de Exteriores, Annalena Baerbock
El controversial nuevo gasoducto ruso-alemán Nord Stream 2 no será autorizado a operar en caso de "nuevas escaladas" en Ucrania, según un acuerdo de principio alcanzado entre Alemania y Estados Unidos, dijo la jefa de la diplomacia alemana Annalena Baerbock.
La ministra de Exteriores, que participó el fin de semana en una reunión del G7 dedicada a las tensiones con Rusia y que el hoy lunes (12/12) tratará el tema con sus socios europeos, aclaró así las amenazas vertidas sobre el Nord Stream 2 por el canciller alemán Olaf Scholz.
Debido a la tensa situación de seguridad, "se acordó entre los estadounidenses y el anterior gobierno alemán" de Angela Merkel "que en caso de nuevas escaladas ese gasoducto no podría ponerse en marcha", declaró Baerbock a la cadena alemana de televisión ZDF, en un momento que Occidente teme una invasión de Ucrania por parte de las tropas rusas.
El gasoducto, fuertemente apoyado en los últimos años por el presidente ruso Vladimir Putin y por Merkel, en aras de asegurar el suministro de gas a Europa, ha sido muy criticado por muchos países, ya que a Estados Unidos y a varias naciones de Europa del Este les preocupa que Europa dependa demasiado de la Rusia de Putin.
Los países occidentales y Kiev acusan a Moscú de haber concentrado a miles de soldados y tanques en las fronteras con Ucrania, de cara a una eventual invasión, algo que el gobierno ruso desmiente tajantemente.
Semanas atrás, los precios del gas natural en Europa subieron luego de que Alemania confirmara que ha suspendido el proceso de certificación de un polémico nuevo gasoducto ruso llamado Nord Stream 2.
La decisión alemana se había producido en un momento de creciente tensión entre la Unión Europea y Rusia a causa de Ucrania y de la crisis de los inmigrantes en la frontera entre Bielorrusia y Polonia.
El regulador energético alemán dijo que Nord Stream 2, propiedad de la empresa estatal rusa Gazprom, estaba planeando establecer una filial alemana para poseer y operar la sección alemana del gasoducto.