El geólogo que lleva más de medio siglo dedicado a la minería, Patricio Jones, esperaba que después de Bajo de la Alumbrera y Veladero, viniera un diluvio de minería y no ocurrió. Hoy, sostiene que la provincia de San Juan tiene un futuro prometedor ilimitado solamente desarrollando los depósitos conocidos hasta el momento. Jones tiene uno preferido que, asegura, será de relevancia mundial.

Jorge Patricio Jones, conocido por todos por su segundo nombre porque el único que lo llamaba Jorge era su padre, se dedica a la actividad minera desde el año 1969. “Los Lundin”, así se refiere al Grupo Lundin reiteradas veces y, según los define, son los inversores que han insistido en la Argentina.

“Con ellos se comenzó haciendo Bajo de la Alumbrera que es una mina que hoy está en stand by para ver si puede continuar de alguna manera con depósitos anexos alrededor de ella. Ya tenía 99 pozos cuando nosotros ganamos la licitación internacional en Catamarca, estoy hablando de los años ’90. Era una situación muy parecida a la que está pasando el país en este momento porque no había un antecedente de inversión minera importante y, obviamente, los inversores internacionales estaban con miedo de mojarse los pies. Todo el mundo esperaba a que hubiera alguien que invirtiera, cosa que hizo el Grupo Lundin”, relató el geólogo doctorado en la Universidad Nacional de La Plata, en el programa radial “Creación Renovable” que se emite los sábados por la CNN Radio San Juan.

Jones pensó que después de Bajo de la Alumbrera y con Veladero descubierto vendría un diluvio de minería “y que se iba a desarrollar Potasio Río Colorado que estaba en prefactibilidad con la Vale Río Doce. Y ves que en San Juan tenemos El Pachón parado desde el año ‘60. Es una cosa increíble. La gente de alguna extracción económica que viene a la Argentina y entiende el mundo y ve eso parado no lo puede entender. Puede entender que, si no hay seguridad jurídica y fiscal, y se cambian las leyes, nadie va a venir a invertir. Pero no pueden entender cómo los argentinos no exigimos que se hagan las cosas que corresponden”.

Ante la pregunta de qué se puede esperar del Plan Estratégico de Desarrollo Minero Argentino (PEDMA), cuando la Ley de Inversiones Mineras suele dejarse en un rincón, la respuesta de Jones fue: “Es casi de Perogrullo tener que repetir estas cosas veinte años después de que haya comenzado la minería argentina pero, si no hay estabilidad jurídica primero y fiscal después, es imposible desarrollar ningún proyecto porque estamos hablando de inversiones de 3 y 4 billones de dólares. Es una plata que cualquiera que la invierta debe tener garantías de que va a poder recuperarla y repagar lo que los Bancos le prestaron porque casi ninguna compañía tiene estos volúmenes de dinero disponible en su flujo de caja para poder invertirlos. Los Bancos piden garantías y las garantías son certeza de repago y eso era lo que daba la Ley de Inversiones Mineras cuando se hizo Bajo de la Alumbrera y Veladero y por eso vinieron las inversiones", comentó.

"Tenemos que poner nuestras leyes en orden y la manera de conducir los negocios de tal manera que el inversor pueda tener confianza. Se ha dejado de lado la Ley de Inversiones Mineras y las empresas, específicamente los Lundin que los conozco bien y he sido directivo de ellos por muchos años, están pidiendo garantías para que su inversión la puedan repagar, para que puedan sacarla de la Argentina una vez que la mina empiece a producir. Si no le dan esa certeza, esa garantía, no va a comenzar”, agregó. 

“A mí me resulta muy doloroso, porque mi familia es originalmente sanjuanina, y San Juan tiene, por lo menos, seis depósitos que están para ser explotados y eso es riqueza para muchos años. Bien invertida y desarrollando otras industrias puede ser una de las provincias más pujantes de toda la Argentina, y verla parada porque los argentinos no nos ponemos de acuerdo para hacer las cosas como corresponde es bastante doloroso”.

Patricio Jones heredó de su abuelo agrimensor un libro que tenía unas 500 páginas y era un Tratado de Geología del francés Albert de Lapparent. Esa lectura y la amistad con Herrero Ducloux, uno de los primeros geólogos de YPF, le llamaron la atención por la geología.

“Me gustó muchísimo siempre porque permite viajar y conocer diferentes países, personas, situaciones y comidas. Realmente ha sido un acierto importante y lo único que me ha quitado la geología es estar un poco más presente en mi casa cuando mis hijos crecieron, entre la infancia y la adolescencia. Yo viajaba mucho al interior de Brasil, en esa época se estaba abriendo el Amazonas y el estaño tenía mucho precio, y teníamos que viajar a Rondonia que queda en el límite con Bolivia, cruzando todo Brasil. Y a veces estaba hasta tres semanas fuera de casa. Gracias a Dios conservamos la familia unida y los cuatro hijos han podido desarrollarse, ahora tengo dos en el extranjero, pero estamos juntos con mi mujer después de 51 años”, dijo este legendario geólogo.

En la pista de despegue

Jones dijo en el programa radial que los argentinos “somos especialistas en perder oportunidades y no nos damos cuenta de que las oportunidades cambian. Ahora, con las nuevas tecnologías, además de litio, platino, paladio, rodio y todos esos nuevos elementos que están siendo usados en los vehículos eléctricos, está el tema de cómo vas a reciclar las baterías de estos autos. Están utilizando las tierras raras que tienen sus distintas utilizaciones, principalmente en tecnología y en conductores, y los depósitos en el mundo son muy chicos y están muy desparramados. Es toda una cuestión de geopolítica, de nuevas tecnologías y de nuevos minerales que está evolucionando todo el tiempo”.

Patricio Jones formó parte del team de geólogos que descubrió no solamente Veladero, sino también los proyectos Josemaría, Los Helados, Filo del Sol y Vicuña. De todos ellos, hay uno que desplazó Veladero en cuanto a su preferencia y es Filo del Sol.

“Hasta ahora siempre fue Veladero, pero yo pienso que Filo del Sol va a ser un depósito más que de importancia mundial, una cosa que le permitirá a San Juan usufructuarlo muchos años y tiene la pinta de ser gigantesco. San Juan está muy bien posicionada y es necesario que se ordene la macroeconomía del país para que salga con una fuerza increíble. San Juan tiene un futuro ilimitado nada más desarrollando los depósitos que tiene conocidos hasta el momento y que, seguramente, va a encontrar más”, precisó.

Filo del Sol es un proyecto de cobre, oro y plata, ubicado muy cerca de Josemaría. Es explorado por la empresa Filo Mining, del Grupo Lundin.

Un “prócer” de la geología como Patricio Jones asegura que descubrir un Veladero es cuestión de circunstancia donde “uno está en el momento apropiado con la compañía que tiene plata para explorar y que le permitió perforar, y tal vez otro que estuvo antes lo vio, pero no lo pudo probar y no se le dio. También es una cuestión de agradecer a la vida y a Dios la oportunidad de haberlo podido hacer”. El consejo para sus colegas que quieren seguir sus pasos es que “estudien siempre. Lean toda su vida, vean nuevas tecnologías, nuevos minerales, nuevos mercados, la geología es absolutamente amplia, tiene mil facetas y posibilidades”, concluyó el hombre que recorrió la Cordillera sanjuanina de punta a punta y quiere que lo recuerden como una buena persona.