Ya se están realizando los primeros acuerdos con entidades alemanas y europeas
EMILIANO BELLINI
El ministro de Industria, Energía y Minería de Uruguay, Omar Paganini, anunció un plan para desarrollar proyectos de hidrógeno verde para la descarbonización del transporte de carga y la industria, así como para la exportación del combustible a otros mercados.
“Uruguay tiene que estar en esta ola”, dijo el ministro durante un evento organizado por la Cámara de Comercio e Industria Uruguayo-Alemana (AHK Uruguay), la Fundación Konrad Adenauer (KAS), la Embajada de Alemania en Uruguay, la Embajada de Uruguay en Alemania y el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Paganini afirmó que el país está excelentemente posicionado para desarrollar proyectos a gran escala y que ya se están realizando los primeros acuerdos con entidades alemanas y europeas. “El tener know-how propio también genera oportunidades nuevas y posibilidades de inversión y de sinergia entre cadenas productivas”, dijo Paganini refiriéndose a la posibilidad de tener una curva de aprendizaje propio, con capacidades endógenas.
Según el ministro, un decreto de promoción del hidrógeno verde debería promulgarse cuanto antes. “Nosotros vamos a ser un jugador pequeño en un mundo en transformación y tenemos que dar pasos seguros, con cierta calma, mirando el paso siguiente”, dijo Paganini. Por lo tanto, no se construirá infraestructura sin conocer a quién se le venderá el hidrógeno.
Uruguay está buscando interesados en invertir en una planta de producción y una flota de camiones y buses propulsados por hidrógeno.
Unos 600 grupos han ingresado a la sala de datos y más de 30 actores privados están trabajando en ella, indicó Paganini, que agregó que se han presentado esquemas asociados.
“Han aparecido inversores para proyectos de transporte; han aparecido otro tipo de ideas, algunas vinculadas con la exportación directamente, otras vinculadas con aplicaciones diferentes: energía para fertilizantes verdes, energía para combustible para flotas pesqueras”, agregó Paganini.
Las propuestas demuestran que Uruguay debe ver el hidrógeno verde como una fuente energética nacional y no solo como un producto de exportación, manifestó.
De hecho, para el mercado interno, el país pretende llegar a producir hidrógeno verde para sustituir combustibles líquidos en el sector del transporte pesado y fabricar fertilizantes verdes.
Paganini señaló que las ventajas de Uruguay como destino de inversión son la estabilidad institucional y la certeza jurídica, lo que se suma a costos competitivos en financiamiento de proyectos, así como un sólido potencial de energías renovables, particularmente generación eólica marina.
Uruguay ve el proyecto piloto, que apunta al mercado interno, como un primer paso en un camino que conduce al desarrollo de una industria exportadora centrada en el amoníaco verde derivado del hidrógeno verde, que a futuro será clave para reducir las emisiones globales de carbono de transporte marítimo y otras formas de transporte granelero.
La estrategia de la industria de exportación de Uruguay contempla incentivos para atraer la inversión extranjera y construir infraestructura, en lugar de adoptar un modelo basado en la inversión estatal.
Paganini señaló que un enfoque mesurado y gradual era vital para desarrollar el sector y agregó que el país brindaría el apoyo necesario a los inversionistas que mantengan contratos de compra, pero que el sector privado asumiría el riesgo comercial. "Se lo he dicho a todos los que han venido y nadie se ha ido hasta ahora", indicó el funcionario.
