La multinacional BHP dijo que las operaciones de sus minas de cobre Escondida y Spence en Chile se han desarrollado con normalidad pese a la huelga de un gremio de operaciones remotas.
Los trabajadores sindicalizados del Centro Integrado de Operaciones (CIO) de BHP, que maneja rajos, plantas concentradoras y de cátodos de las minas ubicadas en el norte del país desde la capital chilena, iniciaron el jueves pasado (27/5) una paralización tras fracasar sus negociaciones contractuales.
“Minera Escondida y Minera Spence han informado que las operaciones se han desarrollado con normalidad”, dijo en una breve declaración a Reuters.
Aunque existían dudas sobre el impacto potencial de la huelga, la figura de contrato de servicios que tienen los trabajadores paralizados le permite a los yacimientos reemplazar sus labores con suplentes.
Los huelguistas han mostrado su rechazo a los reemplazos y han acudido a instancias legales, ya que argumentan que se les vulnera el derecho a huelga.
"Nosotros estamos concientizando a nuestra gente que vote la huelga, ojalá en un 100%", dijo Jessica Orellana, presidenta del gremio. "Las demandas de los trabajadores no fueron escuchadas, así que estamos demasiado desilusionados de la respuesta que dio BHP porque al fin y al cabo discriminan a los trabajadores y no los reconocen en la cadena productiva", agregó.
La paralización se da en momentos en que el precio global del cobre ha tocado máximos históricos en medio de mejores perspectivas de demanda por la recuperación económica tras la pandemia de coronavirus.
Escondida produjo 1,19 millones de toneladas en 2020, mientras que Spence sumó 146.700 toneladas.
Por otra parte, BHP tiene pendiente en los próximos días intentar evitar una huelga de los trabajadores de Spence en un proceso con mediación gubernamental y en algunas semanas iniciar conversaciones con el poderoso sindicato de trabajadores de Escondida.